Rechazado por un Alfa en celo. (Pausada)

Capítulo 1.

Información Obtenida Del Alfa.

—Muy bien, más vale que dejes de una vez por todas ese librito que traes desde la semana pasada.

Le reprendía con enfado su hermana mayor mientras dejaba su revista de chicos Alfa de lado para mirar entre la orden a su hermano.

—Yo... —suspira regresando la mirada a sus hermanos —Estoy de acuerdo con Temari, te has estado comportando raro desde hace algunas semanas... —baja los pies del pupitre mirando por la ventana —pero dime Gaara, ese chico Alfa... ¿De verdad ingreso a tú clase?

—Si —gruñe con enfado —y es mejor que te alejes de él.

— ¡Wow! —pide calma con la mano —tranquilo, ese tío no es para nada mi tipo... —su rostro se vuelve triste — ¿Que hay con Kiba? Escuché que se encuentra con una Omega de una escuela rival... —lo observa de reojo — ¿Sabes algo de eso?

El pelirojo sube la mirada de su libreta de notas hacia los ojos casi preocupados de su hermano, pero antes de poder contestar nada Temari comienza a reír divertida tratando de cubrir su enorme carcajada con la mano mientras recibe una mirada fulminante de su hermano del medio.

— ¡Perdón! —limpia sus lágrimas tratando de controlarse —perdon, perdón, perdón... Es que simplemente no puedo con eso —sonriente se recarga del respaldo de su asiento —ese chico es ciertamente un Alfa, pero... No es de los fuertes, a papá no le gustará ese intento fallido.

—Me importa un carajo Temari, a mi no me molesta la idea de tener crías Omega como nosotros... Somos fuertes, y los voy a criar para que sean tan fuertes como nosotros, además me tendrán para cuidarlos —aprieta el puño —ningun maldito Alfa se aprovechará de ellos.

—Mmm... —sonríe inclinandose sobre el hombro de su hermano —eso significa que estás totalmente enganchado a ese tío... Bueno —se encoge de hombros —atrapalo en tu próximo celo.

—Hablas —dirige una mirada molesta a su hermana —como si fuéramos unos sucios y asquerosos Alfa.

—Um... —niega cruzandose de brazos entre el entornar de su mirada —Deja de comportarte así, ellos son una mierda con nosotros, ¿Y yo no puedo serlo con ellos? Ellos merecen la mierda que le siguen dando a nuestros chicos aún en el tiempo actual... —patea la banca de al lado con enfado —aun con las leyes actuales ellos siguen violando y manipulando a los nuestros, tratandolos como no más que basura... Te recuerdo a madre.

—No menciones a madre.

— ¡La subastaron como un animal! ¡No me vengas con que es diferente porqué se encontró con padre! Los unieron como animales —aprieta el puño —los encerraron juntos y los hicieron tener crías... La obligaron más de una vez y aún ahora no tenemos conciencia de cuántos de los Omega allá afuera pueden ser nuestros hermanos.

—A madre no le gusta hablar de eso... Además eso fue acto de betas, el periódico anunció que los Betas eran quienes movían todo ese negocio.

— ¡Por qué los Alfas necesitaban más Omegas para reproducirse!

— ¡Deja de pelear por eso! —le hace frente con enfado — ¡Los Betas movían todos! Iban por las calles secuestrando Omegas, los drogaban, les ponían collares para evitar que fueran mordidos... Los obligaban a tener sexo con Alfas que por igual secuestraban... Y luego de tres embarazos o más los echaban a la calle.