CAPITULO 3

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CAMILA

Mi mamá se acerca,  y yo llorando por que veo a mi hermano tirado y con sangre.

-Camila... Cuidado. (Me grita Miguel) 

Reacciono y saco mi pistola.

-Camila ¡no! guárdala para otra persona, yo no soy como ellos. Mira... Me enseña el cuello y con la mano se borra la marca roja, era pintura la que traía puesta.

Un día antes de las elecciones

SOFIA

Mi marido ha estado actuando extraño últimamente, es muy cortante y siempre se la lleva hablando por el celular... Hasta que un día, le vi en el cuello una marca roja...El se estaba bañando, y en eso le entró una llamada, la conteste.

-Hola, ¿tu familia ya uso la tarjeta Sim Cards? ¿Ya tienen la marca roja?
Le cuelgo.

-Sofia. ¿Eres tú? ¿Qué pasó?

-Nada, vine avisarte que ya está la cena.

-Esta bien, ahorita voy, ¿ya pusiste la tarjeta en tu celular? 

-Si amor, apúrate que se enfría la cena. 

Agarro mi pintura de labios y me hago la marca roja.

Época actual 

MIGUEL

No lo puedo creer, me equivoqué de arma... Me siento terrible esto no debió pasar, no quería lastimar a nadie... Camila está hablando con su mamá, ¿qué estará pasando?

Me acerco
-Camila, ¿qué está pasando?
-Mi mamá esta de nuestro lado, no es uno de ellos.
La mamá de Camila me enseña el cuello.
-Bueno, lo siento mucho, esto no debió de haber pasado.
-Camila llora... Por el hay que salvar Ashbury, y con la ayuda de mi mamá lo lograremos.

CAMILA

Dejamos a mi hermano tirado, inconsciente.

Seguimos nuestro camino hacia el lugar donde se encuentran las máquinas, ahora no éramos dos si no tres personas dispuestas a salvar Ashbury.

Mi mamá se volvió a pintar la marca roja para no levantar sospechas y servirnos de espías.

Mamá nos mantenía informados de todos los movimientos cuando nadie la miraba y estaba sola a través de un celular que nosotros le proporcionamos. 

MIGUEL

Ya casi nos acercamos al lugar, nos hemos topado con algunas personas, pero gracias a Sofia las pudimos evitar.

Llegamos, la casa es demasiado grande y con muchos hombres de traje negro vigilando, no podemos pasar por la entrada sin ser vistos.

Saque mi laptop de la mochila y al ver las cámaras de seguridad nos dimos cuenta que por la parte de atrás no hay nadie, así que por ahí tenemos que encontrar una forma de entrar.

Tuvimos que movernos y tomar un atajo seguro, que nos llevará a la parte de atrás.

-Por fin, llegamos Camila.
- Si, mira, una puerta.
- Lo bueno que está abierta, tenemos que entrar con cuidado.

Una vez adentro, nos dimos cuenta que no había nadie, seguimos caminando y había demasiados cuartos, nos detuvimos y miramos la cámaras de seguridad y nos dirigimos hacia el cuarto en donde se encuentran las máquinas.

HÉCTOR

-Solo cinco personas se quedarán aquí adentro cuidando, al resto los quiero buscando y vigilando la entrada.

CAMILA

Seguimos caminando hacia el cuarto... Cuando de repente se escuchan pasos, hay una puerta abierta, entramos para escondernos... Era un cuarto en donde tenían a las personas con mascarillas metidas en tubos con agua, está dormidas... En cuanto dejamos de escuchar los pasos salimos.

Vimos otra puerta abierta, entramos a ver qué cosas encontramos... Hay niños... ¡Niños en jaulas!... Se acercan personas y salimos rápido, nos escondimos en otro cuarto, en donde se encuentran sustancias químicas.

Esperamos a que se fueran y salimos, al seguir caminando miramos unas escaleras... Bajamos y llegamos al cuarto en donde están las máquinas, las cuales son grandes, también se encuentran sillas eléctricas y robots.

De repente las luces se apagaron, se escuchaba cómo todas las puertas se cerraban... Estamos a oscuras y sin saber que pasa.

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