La vida sin Dany al rededor solía ser aburrida, ahora me daba cuenta de que no iba a estar haciendo absolutamente todo con Dany como antes, porque se suponía que él estaba empezando una nueva relación y yo, pues, no sé, eso estaba en proceso de ser así, entonces, cada quien iba a estar pasando tiempo cada uno por su lado.
Al pasar las semanas, empecé a tener citas con el chico nuevo, Joseph, y ya se rumoraba por toda la escuela que él era mi pareja. Yo por mi lado, extrañaba más y más a Dany, y no era que no me gustara estar con mi novio, estar con él era genial, me encantaba, él siempre me sacaba a cenar, me llevaba regalos, me daba dinero sin yo siquiera pedírselo, me hacía cumplidos, etc, pero extrañaba mucho a Dany, no es facil alejarse de una persona con la que habías tenido una amistad de toda una vida. Además, Joseph tenía algo, y era que siempre miraba distinto a la novia de Dany, en serio no sé por qué, ni siquiera a mí me miraba de esa manera, era como si se conocieran desde antes, pero su mirada hacia ella no era como familiar, sino más bien como si la deseara, llegué a sorprenderlos mirándose así el uno al otro en forma de coqueteo.
Y cierto día en la escuela:
-Oye- lo saco de sus pensamientos.
-Si, dime-
-¿Qué le ves?, ¿por qué la miras así?
-¿Que miro cómo y a quién amor?
-A ella, Emily-
.La miro normal amor, ¿vas a seguir con eso igual que el otro día?
-Es que insisto en que ustedes se miran de una manera extraña, diablos estoy harta- digo parándome de aquel banquillo y caminando hacia la salida de la cafetería.
Seguía extrañando a Dany, y cada día sentía más cosas por él, simplemente no se me salía de la cabeza, pero no sé cómo decírselo. Le escribí un mensaje saludándolo y preguntándole como se encontraba y que lo quería ver para hablar algo importante con él, ya era hora de que yo le dijera lo que creo que está pasando entre nuestras parejas.
-Dónde nos podemos ver?, y por favor que sea un lugar lejos de casa y de la escuela- le ruego
-Claro, a donde quieras-
-Si, ¿qué te parece Candle cafe?
-Pero, ¿esa cafetería no queda casi fuera de la ciudad?
-Claro que sí, por eso quiero que vayamos allí.
-Parece ser algo muy serio de lo que me vas a hablar
-Lo es Dany, te espero allá hoy a las 5.
-Y por qué no nos vamos juntos?
-No podemos dejar que nos vean juntos esta vez, recuerda que hay cabañas cerca y pueden pensar otra cosa peor.
-De acuerdo, veré qué mentira le invento a mi novia para que no se preocupe.
-Dile que irás a saludar a tu mamá.
Al terminar las clases tomo el autobús que cruza por esa cafetería y hace parada a unas cuantas cuadras de ahí, cuando voy llegando veo a Dany que está esperándome dentro de su auto, miro al cielo y está todo nublado, y tronando. Cuando me voy acercando al auto, de repente llega una fuerte brisa que me hace poner los pelos de punta, me encojo de brazos y hago un gesto como de que me abrazo yo misma para quitarme el frío y entro de pronto al auto:
-Rápido, enciende la calefacción- digo con al respiración un poco agitada.
-Ya, tranquila, ya la encendí.
-Gracias- digo al mismo tiempo que descanso mi espalda y regulo mi respiración.
Se forma un gran silencio, y justo empieza a caer agua a cantaros. -Bueno, no podrémos entrar al café por ahora, así que tendremos que hablar eso tan importante en mi auto.
-Sí, oye Dany, sé que te sonará raro y quizá ni siquiera me vayas a creer, o también vas a decirme que te lo pude haber escrito en un mensaje, pero yo pienso que esto lo debemos hablar cara a cara, porque es algo serio.
-Oye, me estás asustando, no sé qué pensar al respecto.
-Se trata de Joseph y Emily- Dany frunce el ceño.
-¿Tu Joseph y mi Emily?
-No Dany, los hijos de la vecina... Claro que sí tarado, hablo tu Emily y de mi Joseph.
-Oh... ¿Qué pasa con ellos?- pregunta con cara de confundido.
-Los he sorprendido ya por varias veces, mirándose como si hubiera algo entre ellos.
Respira profundo como en modo de alivio, y se queja -Karen, ¿te das cuenta de que me has hecho venir hasta aquí solo para hablar de algo de lo que aún no tienes pruebas, y solo sospechas?- me quedo callada, mirándolo confundida, enojada, desesperada y a la misma vez con mucho frío, por encima de que la calefacción está encendida, Dany se da cuenta de que estoy temblando y toma del asiento trasero un chaleco suyo y me abriga con él. -toma, aún tienes mucho frío-
-No será necesario- me lo quito y salgo del auto debajo del aguacero dirigiéndome a la misma esquina en donde me dejó el auto bus.
-No no, ¿qué haces?, ¡Karen!, ¡KAREN!- me hago sorda a sus gritos.
De repente sale detrás de mi y yo acelero el paso, no quería dejar que me alcanzara pero obviamente lo hizo. El aguacero era muy fuerte, y el cielo estaba tan oscuro que parecía muy de noche, y tan solo eran casi las 6 de la tarde. Me tomó del brazo y justo ahí perdí toda la fuerza que me quedaba, me dió un horrible vértigo, que casi me caigo, pero Dany me tomó en sus brazos, y me llevó al auto, yo aún sigo temblorosa, ya no aguanto el frío, y se escuchan mis dientes chocar debido a los temblores, el mareo se me calma un poco pero aún no tengo nada de fuerza. Dany vuelve a ponerme su abrigo pero esta vez como va y cierra la cremallera, empieza a abrazarme y su calor me va calmando pero muy lentamente.
En ese instante recuerdo que estaba menstruando. -Dany- digo con la voz estorbada por los temblores, -ahora recordé que estoy menstruando... Y... no me puedo mojar en la lluvia cuando estoy menstruando.
-¡Diablos Karen!, ¿cómo rayos te habías olvidado de que estabas menstruando?, nos irémos a aquel motel, y te voy a calentar hasta que se seque tu ropa- encendió el auto, dió la vuelta, y se estacionó en un pequeño Motel que había en la misma acera, como a unos 250 metros de la cafetería.
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Mejores Amigos con derecho
RandomKaren Dave & Dany Garnett nos traerán una emocionante historia. Son mejores amigos, digamos que amigos con derechos, o lo correcto sería, MEJORES AMIGOS CON DERECHO. Voten ☆