Capítulo 22: Por Siempre

892 82 25
                                    

Isabela:
(22 años)

Si, definitivamente tengo un novio olvidadizo, Julio estaba como loco buscando un no tengo idea, quisiera ayudarlo a buscar pero la única respuesta que obtengo de él es que no me preocupe, cuando me dicen que no me preocupe hago todo lo contrario

Debe ser algo importante por lo que veo ya que esta con el ceño fruncido y esa no es una buena señal, eso significa que ya llegó a su límite de enojo, me da risa porque su cara se torna a un color rojizo y ahí si parece que Rojo es su hijo

Hace ya un par de años nos habíamos comprado un pequeño departamento para poder vivir formalmente como una pareja y me pone muy feliz ver que con Julio estamos construyendo poco a poco nuestro futuro juntos

__¡Debe de estar en algún lugar!__gruño para si solo pero lo logré escuchar

__Si tan solo me dejas ayudarte sería mucho más fácil ¿no crees?

__No, tu descansa que debes de estar agotada por la noche que tuvimos el día de ayer__soltó acercándose a mí por detrás para así suspirar contra mi cuello haciendo que me estremesca

Solté una pequeña risa por lo que había dicho anteriormente, aunque conozca a Julio desde pequeño igual no terminaba de conocerlo aún, él me sorprendía cada día más

__No es excusa ¿qué estás buscando?

__Eh... te amo

__Yo igual__dije juntando nuestros labios en un corto beso__igual señor Peña déjeme decirle que su hermosa palabra no lo librarán de decirme lo que busca

Julio empezó a reír y solo negaba con la cabeza, me encantaba ver esa radiante sonrisa en su rostro, ver esos hermosos ojos color miel conectar con los míos, no importa que los años pasen yo siempre me voy a enamorar cada día más de él

__Lo intenté Bela, lo intenté__Julio de la nada se dirigió corriendo al armario y metió un objeto rápido a su bolsillo__te encontré

__No te olvidas de mi nombre solo porque me ves todos los días__bromeé y observé como su rostro feliz se tornó a uno de confusión

__Bela yo me puedo olvidar hasta de mi nombre ¿vale? Pero nunca me olvidaría de la persona que pone mi mundo de cabeza, de la persona que hace que tenga un motivo para levantarme todas las mañanas, nunca me olvidaría de tí

__Hoy andas muy romántico ¿algún motivo en especial?__pude ver que ante mi pregunta él se puso nervioso, si que estaba raro

__No amor, solo que nunca me voy a cansar de decirte lo importante que eres en mi vida

__Yo igual, pero ya anda a trabajar que se te está haciendo tarde, voy a ir al super a ver que puedo comprar para la cena

__No es necesario, quiero que estés lista en la noche que voy a venir a recogerte para llevarte a cenar, no te digo que te pongas lindas porque pff.. siempre lo estás__sonreí por lo que había dicho, quizás no era la chica más linda pero cuando él me lo decía me hacía sentir como tal

__Nos vemos allá entonces

Julio cerró la puerta y yo me tiré al mueble, estaba cansada, ser un adulto no era fácil, habían demasiadas responsabilidades de por medio, pero todo eso cansancio era recompensado cuando veía a Julio

Yo estaba estudiando Psicología y a ser sincera era una carrera que me encantaba demasiado, poder aconsejar a las personas era algo lindo y me alegraba mi trabajo, aunque no me gustaba mucho el ambiente que tenía este

Hace unos meses cuando comencé a trabajar en el consultorio me asignaron un compañero que sería doctor, Daniel era un tipo muy estresante y patán, todos los días trataba de seducirme cosa que nunca iba a pasar, al poco tiempo después dejó de hacer eso y él mismo pidió que lo cambien de compañera, Julio pensaba que yo no sabía lo que él había hecho pero los chismes corrían demasiado rápido en el consultorio y este no iba a ser la excepción, el rumor de que Julio había amenazado a Daniel de que mantuviera su distancia conmigo era un tema que en su momento todos amaban hablar

Cuenta Conmigo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora