You want me to burn [Evan Peters]

Capítulo 5 (last night - the vamps)

[Evan's POV]

— ¿Qué?

No podía creérme lo que oía. ¿Alguien la había disparado? ¿Pero quién? ¿Y si se habia auto-disparado? Quizá esa zorra quería eliminar sospechas y...

— Señor Peters, por favor ¿puede responder a la pregunta?

— Ya he dicho que no recuerdo nada. Había bebido, estaba oscuro y me disparó desde un ángulo muerto. No puedo ayudar por más que me gustaría.

El comisario suspiró. 

—  Está bien. Si recuerda algo más, hágamelo saber.

— ¿Sabe cuando podré regresar a casa? 

—  No sé si todos los calmantes y esas mierdas le nublan la visión, pero que yo sepa, no voy vestido de médico —me respondió, yéndose.

Decidí levantarme  y dar una vuelta por la habitación, vi mi móvil junto a mi ropa en una silla. Lo cogí, y vi que tenía varias llamadas perdidas. Le envié un mensaje a Mike, diciéndole que estaba en el hospital, pero que estaba bien, que no se preocupara. Me respondió de inmediato, diciéndome que qué había pasado y que estaba en camino.
Había pasado ya un cuarto de hora, cuando escuché sus pisadas por el pasillo del hospital.

— Tío, ¿estás bien? ¿Qué te ha pasado?  —dijo al entrar en la habitación que le había indicado por mensaje.

En ese momento, no supe si contarle la verdad o no. No quería mentirle a mi mejor amigo, pero tampoco quería meterme en problemas. Y además, tenía que saber qué le había pasado a esa zorra antes de decir nada. La odiaba, la odiaba con toda mi alma. Me había disparado y ni siquiera podía delatarla porque sabía lo de mi padrastro. Aunque tenía que reconocer que la muy zorra estaba buena, y me la hubiera tirado si no hubiera insistido en hacerse la dura y dispararme.

Así que le conté a mi amigo que me habían disparado mientras salía por la puerta trasera para ir a la casa del bosque, ya que me dolía la cabeza y quería alejarme de tanto ruido. Mike asintió, y pareció creérselo. Se sentó en la cama junto a mí, y me dió un abrazo. 

— Me alegro de que estés bien. Si la bala te hubiera llegado a dar en otro sitio... De todas formas, pienso cargarme al capullo que te disparó.

—  Mike, ya te he dicho que no vi nada. No sé quién es.

—  Pienso descubrirlo. Y cuando lo sepa le partiré la cara... Y otras cosas. Me aseguraré de que nunca tenga hijos — "los hijos se los haría yo" pensé. Dios, que mal estaba. Una tía me acababa de disparar y solo pensaba en acostarme con ella. Ayer debía de haber bebido demasiado.  

— Gracias tío. Pero procura que no vaya armado cuando vayas a patearle el culo. —dije, dándole un golpecito en el hombro. Me dolía mentirle a Mike, y me prometí a mí mismo que le contaría la verdad cuando las cosas se hubieran calmado.

Mi estómago rugió, y le pedí a Mike que me consiguiera algo de la máquina expendedora.

[Mike's POV]

Asentí y salí de la habitación con tal de llevarle a Evan cualquier tipo de bollería, que sabía que adoraba.
Estaba recorriendo el pasillo cuando una puerta se abrió, y vi a una chica salir de ella silenciosamente. Tenía una venda manchada de sangre que le cubría todo el hombro, y en general, tenía muy mal aspecto. Empezó a andar y vi que cojeaba. Entonces me di cuenta de que tenía varios moratones y cortes en las piernas.
— ¿Puedo ayudarte en algo?
La chica sé sobresaltó y se giró hacia mí. Entonces me di cuenta: era la chica de ayer.
Nos quedamos mirando sin decir nada.
— Eres... Eres tú. Eres la chica de ayer... ¿Qué te ha pasado?
— Es una larga historia... ¿Y tú que haces aquí? —me dí cuenta de que no quería hablar del tema, así que no la presioné.
— Alguien disparó a mi mejor amigo ayer. Es de locos.

[Kayley's POV]

Mierda. Era el mejor amigo de Evan. Esperé que su querido amigo no fuera gilipollas y se hubiera ido de la lengua, porque entonces estaba dispuesta a arruinarle la vida. 

— ¿Dónde vas? No deberías salir de la habitación estando así — me dijo.

—  Yo solo eh... —divisé una máquina expendedora a lo lejos—  quería una cocacola.

—  Vuelve a la habitación anda, ya voy yo— me dijo amablemtente.

— De verdad, no hace falta —le miré a los ojos. Eran negros y brillantes. Miré su rostro al completo, recordé como era besar sus labios, y una parte de mí quiso volverle a besar. Noté que yo también le gustaba, sentía atracción por mí, lo supe en cuanto me besó la noche anterior. Por como puso sus brazos a mi alrededor, por como me sonrió, por como su mirada se apagó cuando le dije que tenía que irme. Pero él era un buen chico, y yo no tenía derecho de meterle en toda mi mierda. No estaba enamorada. No quería casarme con él. Sólo quería volverle a besar, porque noté más cariño en cuanto él me besó que cuando mi -ahora ex- novio lo hacía. 

[Mike's POV]

Se me quedó mirando y sentí como si el mundo se parara. Dios, era preciosa. Recordé cuando la besé. Sus labios encajaron con los míos, y fue la mejor sensación del mundo. Desde ayer que no lograba quitármela de la cabeza. Deseé que esa mirada significara algo. Deseé gustarle. Que para ella ese beso hubiera sido especial.

Y también deseé partirle la cara a quién fuera que le hubiera hecho daño. Ella era como una preciosa y frágil criatura.

Y entonces me di cuenta de que me estaba enamorando de una desconocida.

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Espero que os haya gustado el capítulo. He tardado mucho en subir y lo siento, pero he tenido que reescribir todo el capítulo varias veces porque notaba que los personajes estaban perdiendo su personalidad y sus puntos de vista, se estaban "aplanando". Y no quería que eso pasara, así que me he tomado mi tiempo para hacerlo bien. Espero que disfrutéis del capítulo. ¿Quién creeis que ha disparado a Kayley y por qué? (es bastante obvio, pero la primera que lo acierte se llevará una dedicatoria en el próximo capítulo woho).

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