Capitulo 40

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Sus labios eran suaves, su lengua entro en mi cavidad bucal sin ningún problema o pudor; jugaba con la mía como todo una experta.

El dulzor de la coca cola y los pochoclos se hizo presente. Ambos nos estábamos prácticamente ‘comiendo’ parecíamos dos hambrientos, me separe lentamente con la respiración levemente agitada.

-No – dije pero sonó débil, el me miro fijamente para luego agarrarme de la mano

-Parate- dijo serio mientras pasaba el cubo de pochoclos al otro asiento, pero con una dejadez de tranquilidad; que lo hacia mucho mas malditamente atractivo. Trague duro y me pare, me hizo pararme enfrente de el.

–Sientate- dijo palmeando con una mano su regazo, nege con la cabeza intentando volver a mi asiento, pero tiro suavemente de mi mano haciendo que pierda el equilibrio y caía prácticamente arriba de el. Volvió a capturar mis labios, con un movimiento hizo que mis piernas estén a cada lado sentada en su regazo, paso su mano por mi espalda llegando a mi nuca haciendo presión para profundizar el beso. Mientras su otra mano descansaba un poco mas arriba de mi rodilla, debajo de mi pollera de colegio. Esto estaba mal, pero lo estaba disfrutando, sentir los labios de jack con los mios era una explosión en mis hormonas, bajo la mano de la nuca por mi espalda, pasándola por mi muslo y por debajo de la pollera toco mi trasero por arriba de la calza. Enrede mis dedos en su espeso pelo . Nuestros rostros se movían de un lado para el otro, tranquilos. Pero profundos. Mordió mi labio inferior para tirar un poco de el. Se quedo a solo centímetros, mirándome en la oscuridad del cine. Sentí su mano que antes descansaba en mi muslo, moverse mas adentro lentamente, acariciando mi parte interna del muslo, rápidamente agarre su muñeca llena de pulseras de tela de distintos colores y distintas frases, parando su accionar; sabia lo que iba a hacer, el sonrió. Acercándose lentamente a mis labios

–Dejate llevar – dijo en susurro arriba de mis labios, para luego volver a besarlos lentamente, relaje el agarre de su muñeca, pasándola por su pecho dejándola en su hombro, el decidió proceder a su accionar, paso su dedo índice por mi feminidad lentamente, haciendo que todas mis hormonas se activen, estaba por protestar pero aumento la velocidad del beso haciendo que todas mis ideas desaparezcan, comenzó a mover sus dedos lentamente en forma de caricia en esa zona, haciendo que me vuelva loca, un pequeño y casi inaudible gemido salió de mis labios, el hizo presión con un dedo. Subió lentamente su mano llegando al borde de la calza

–¿Puedo? –dijo suavemente, estaba completa embriagada por sus caricias, sus labios y su perfecto aroma varonil. Volví a besarlo. Al parecer el lo tomo como un ‘si’ ya que metió su mano por debajo de la calza, sentí sus dedos moverse arriba de mis bragas ahora húmedas.

-Por favor no – dije en un débil suspiro separándome de sus labios, el paso sus besos a mi cuello, mientras movía ágilmente sus dedos. Tire mi cabeza para atrás, en un pedido de auxilio a mi cordura, pase mis dedos por su cuello volviendo a enredar mis dedos en su pelo. Con un dedo corrió mi braga, introducio un dedo.

Maldita sea! Mi respiración se corto por completo. Escuche una pequeña risa proveniente de Jack

-Eres un maldito – dije en susurro

-Me lo agradecerás – dijo para luego besar mi mandíbula, metió un segundo dedo. cerre mis ojos el placer me estaba invadiendo.

No podía pararlo. Mi cuerpo no quería reaccionar a lo que decía mi cerebro

-Estamos en un ci..- mis palabras fueron interrumpidas cuando introducio su tercer dedo, y comenzó a moverlos con agilidad y experiencia, sentía que mi cabeza daba mil vueltas, hacia un vaivén con sus dedos. El mordió el lóbulo de mi oreja, no podía creer que esto estaba ocurriendo en una sala de cine, la película para mi había dejado de existir.

Ver Mas Alla De Lo Que Ves {Jack Gilinsky} © [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora