Romance Pervertido| Kookmin

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Enfoco la cámara de mi celular en el rostro dormido de Jungkook y una ardiente idea cruza por mí mente, así que colocando mi celular sobre la mesita y con la cámara encendida, lentamente deslizo su ropa interior hacia abajo dejando al descubierto su gran polla, se encuentra hacia abajo, calmada -Tan bonita- susurro acariciando la gran masa de carne que me vuelve tan loco.

«pero se ve mucho más hermosa cuando esta erecta»

—Jimin...— murmura Jungkook sin despertarse totalmente.

Y pasando la yema de mis dedos por toda la longitud hago que de inmediato su polla se ponga dura, muerdo mis labios al verla tan erecta, dura y lista para eyacular; tan pronto como la punta de mi lengua toca el glande, Jungkook se levanta totalmente asustado —Jimin...¿¡Qué haces!?— exclama una vez tomo su pene entre mis manos.

—Un video casero de nosotros teniendo sexo— respondo deslizando mis manos de arriba hacia abajo —Primero te haré sexo oral y después tú me follaras en la cama.

La mano de Jeon jala de mis cabellos evitando que su polla entre a mi boca —¿Estas grabando esto?

—Si— desvío la mirada hacia mi celular encendido y el rostro de Jungkook queda totalmente rojo —Di "hola"— bromeó sonriendo.

Y antes de que él logré impedir mi cometido me subo encima suyo restregando mi trasero en su erección, la tela de mi bóxer es fina y puedo sentir claramente como su polla golpea necesitada por ser recibida —V-vamos Kook coopera, solo nosotros veremos ese v-video— jadeo dando pequeños saltos y comienzo a gemir.

Jungkook parece resistirse pero de un momento a otro me tumba sobre la cama aplastando mi cara en la almohada y baja mi ropa interior con brusquedad, mi ya mojada entrada está lista para recibirlo así que en cuestión de segundos los rechinidos de la cama se hacen presentes, no puedo respirar muy bien pero no me molesta, la falta de aire me excita al igual que las morbosidades que jadea en cada estocada, «has aprendido muy bien mi Kookie».

—¿T-te gusta así, no?— gime penetrando me con más intensidad y baja sus manos hacia mi cadera presionando allí sus dedos con fuerza, seguramente planeando dejar una marca.

Poco a poco Jungkook se va acoplando a lo que yo busco, no se ha atrevido a golpearme pero el sexo es más rudo y voraz ahora, aunque cuando no estamos en el acto íntimo se vuelve torpe, tímido e incluso me besa, normalmente yo lo beso cuando quiero tener sexo pero él lo hace cada que puede e incluso cuando nadie nos ve en la escuela.

Cuando el caliente semen de mi ardiente compañero de cama llena mi interior, unos toques a la puerta nos hacen espabilar y aunque me dejó caer sobre la cama, Jungkook se levanta rápidamente colocándose su ropa, apaga la grabación y me coloca con suavidad mi bóxer.

—Puede ser tu primo, termina de vestirte, iré a ver.

Suspiro antes de colocarme una camiseta y cuando estoy por levantarme siento una punzada en mi culo que me hace querer gritar, me dejó caer al suelo de rodillas totalmente excitado, así es siempre después del sexo, mi idea de no preparación me ha servido de maravilla por que este dolor punzante y ardiente solo me hace sentir caliente en cada fibra de mi ser.

De pronto Jungkook entra todo alterado y corre a auxiliarme.

—¿Estás bien?, ¿Te lastime demasiado?

—Nah, está bien— me apoyo en su pecho para levantarme y en cuanto lo hago él me atrapa en sus brazos. Inerte me quedo ahí, sintiendo su olor a su sudor y aunque puede ser desagradable para algunos, no lo es para mí. El olor a Jeon después del sexo es maravilloso.

Jungkook acaricia mi espalda como dándome un masaje
-¡Rayos!- exclama de pronto y vuelve a su nerviosismo —Afuera está una mujer que dice ser tu madre.

—¿¡Mi madre!?— pregunto emocionado y haciéndolo a un lado corro hacia afuera.

Y ahí en la sala se encuentra mi bella madre con una sonrisa y esa coleta inseparable en su cabello —¡Mamá!.

—¡Cariño!— exclama recibiendome en sus brazos y tal cual pequeño niño me besa con dulzura. Hacía meses no la veía.

Sonrío entre sus brazos y entonces recuerdo que Jeon está mirando detrás así que volteo mirándolo fijamente, él sigue luciendo nervioso y asustado, mi madre aclara la garganta elevando una ceja —Él es....?— pregunta confundida.

—Mi compañero sexual.

Y tanto mi madre como Jungkook parecen entrar en una especie de trance.

¿Ahora que dije?

We pinche Jimin, me da un coraje igual, pero irá poco a poco viéndose la historia, las amo bebés.