" La Visión "

315 43 6
                                    

Juegan a los dados. La intensidad se siente en el aire, los hombres en la taberna también lo sienten, es una rivalidad. Clases sociales distintas, enfrentadas en un burdo juego de dados. Puede llegar parecer algo muy en serio si lo pones así, pero la verdad es que ellos se están divirtiendo, están apostando plata y se están aprovechando de eso para sacar partido. Los mejores amigos, se miran fijamente, seriamente, pero por dentro es cariño, por dentro es amor.

- ¿ Sabes Merlín? No hay nada de malo si llegas a perder contra tu rey ...-

- ¿ Sabes Arturo ? Yo estaba por decir lo mismo, o ¿ Tienes miedo porque soy un sirviente ? - tenía una ceja levantada y una gota de sudor le pasaba por la frente.

- Yo no le tengo miedo a nada... - dijo con el ceño fruncido, apostando todo el oro que llevaba encima.

El mago solo actuó como si estuviera sorprendido, pero sabía que lo había convocado, estaba tan divertido. Agarro su cuenco con los dados dentro, también apostando todo lo que traía.

.

.

.

.

Arturo está demasiado borracho, al igual que Merlín. No saben cómo ni cuando pasó pero en su ebriedad se ubican en el pasillo, camino a la alcoba de Arturo. Su fiel sirviente lo lleva agarrado de un brazo apoyándose en su hombro para sacar adelante al rey. No falta mucho para llegar allí.

Merlín pasa por las antorchas al igual que el alcohol deja de hacer efecto en él, sabe que la mañana siguiente va a ser un dolor de cabeza, pero ese momento en la taberna, lugar que detesta y el cual nunca creyó que iría. Recordaba a Gaius mintiendo, diciendo el único lugar que se le ocurría y él, quejándose de ello. Piensa en el olor y la cerveza, las apuestas y los juegos de dados. Piensa en lo estúpido que es y en cómo llegaron hasta el castillo, pero por más que se esfuerza no logra recordarlo. Decide que fue inconsciente, culpa a la borrachera que se desvanece lentamente de su cuerpo, pero ve al la persona que tiene al lado suyo, lo lleva con toda su fuerza, " Arturo es más pesado de lo que parece ". Dios si escuchara ese pensamiento, seguramente sacaría su espada, mientras defiende a muerte que no esta gordo. Se ríe de solo pensar en eso.

- Me....Tu...sabes...que eh ganado.... no sé cómo lo haces.., pero.. estoy seguro de que haces trampa... - Arturo se mece de un lado para el otro, complicando su llegada al dormitorio.

- Si si .. lo que tu digas cabeza de cebolla... - Merlín ve una puerta conocida y la felicidad lo recibe, no quiere tener que lidiar con un príncipe ebrio nunca más en su vida. Apoya a Arturo contra la pared, quien parece que ya se siente mejor. Abre la puerta de la pieza y hace sentar a Arturo mientras va a por unos vasos de agua.

Se ve en el espejo de el frente mientras sirve el agua, su pelo está todo desordenado y puede notar unas gotas de sudor en su frente, regresar al castillo fue toda una travesía , bebe el mejor vaso de agua que haya tomado nunca, recobrando un poco la consciencia y le pasa a Arturo un vaso de agua también, sentándose en la silla de al lado.

- ¿ Te sientes mejor ? -

El rubio carraspea y se siente refrescado totalmente cuando siente el líquido pasar por su garganta. - Más te vale no menciones nunca una palabra de esto a nadie -

- No creo que una borrachera del rey tampoco sea algo muy histórico - miró el ceño fruncido- Okay, callado como una tumba - el brujo asiente, solo quiere irse a su cama.

Arturo menea la cabeza, adormilado. - Ayúdame, estoy seguro de que si me paro no voy a poder mantenerme recto -

- Se nota que todavía estas borracho, nunca pides ayuda -

La VisiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora