Algunos días pasaron, pero para Jungkook fueron los días mas felices, pues cada momento que pasaba al lado de Taehyung eran los más especiales, ya que podía disfrutar de aquella encantadora sirena.
―Kookie ¿ya te meterás al agua? es aburrido si solo yo juego ―refunfuño el castaño al ya haberse aburrido de jugar solo con todos aquellos juguetes que previamente el biólogo había traído para él
―Lo siento mucho Taehyung, hoy no puedo, me tengo ir, tengo algo muy importante que hacer, tal vez otro día ―mintió el azabache recogiendo sus cosas
―¿He hecho algo que te haya molestado, Jeon? llevas ya una semana tratándome tan indiferentemente y no me gusta, así que dime ¿te he hecho incomodar o molestado?, si así yo...
Hablando fuertemente, Jungkok hizo callar abruptamente a el castaño que no paraba de echarse la culpa de que él se haya estado distanciado.
―No, no es así, es por mi culpa Taehyung, lo siento mucho ―respondió sin voltear a verle
―¿Por qué te disculpas? no has hecho nada malo, quiero la verdad Jungkook y no mentiras ―advirtió el castaño tratando de encontrarse con la mirada del azabache
―No lo entenderías Taehyung, es algo muy complicado, lo siento
Lanzándole una mirada lastimera y volteando a verlo por primera vez en ese día, Jungkook continuo guardando sus cosas, ignorando a esa vocecita que le decía que hiciera lo correcto y le contara sobre sus sentimientos de él al castaño.
―Si no me dirás, bien, pero espero no volver a verte, ya no es necesario que vengas a cuidar de mi, ya no te necesito, llévate también todos estos juguetes, no quiero volver a saber de ti
Con tristeza y enojo plasmado en él, Taehyung se sumergió en el agua y fue hasta el único lugar de esa horrible gran pecera donde ninguna persona podría llegar, su escondite, una cueva pequeña al fondo de esta donde podía olvidarse de todos lo que últimamente le ha ocurrido.
Por otro lado, Jungkook se repetía una y otra vez que no podía dejarlo así, que debía solucionarlo todo sin importar qué, y si eso significaba que tenia que decirle lo que sentía, él lo haría, porque lo amaba y era la persona de la cual no se perdonaría perderlo.
Dejando todas sus cosas de lado, Jungkook se sumergió al agua, con la esperanza de poder hacer las pases con Taehyung, pues odiaría que él mismo nunca más le hablara por su estupidez.
―¡Taehyung! ―subiendo a la superficie, gritó el biólogo al no poder nadar a tal profundidad donde él se encontraba, más no recibió respuesta alguna
Una vez más se sumergió y nadó lo más profundo que pudo, pero su falta de aire lo hacía retroceder.
—¡Kim Taehyung! — gritó una última vez, no volviendo a recibir una respuesta —No me dejas otra opción
Tomando el suficiente aire, Jungkook se sumergió y comenzó a nadar lo más rápido que pudo para poder llegar a aquella cueva, mientras más profundo iba, su aire se agotaba cada vez más, pero no le importó.
Él sabía que Taehyung no lo dejaría morir, pero aún ese miedo de que no llegara se hacía presente, con lo último de aire que le quedaba, se impulsó más profundo, quedando ya sin este.
La peor decisión que Jungkook pudo haber tomado fue tratar de buscar a Taehyung aún si moría al hacerlo, pero no fue hasta que vio las consecuencias de sus actos, que se arrepentía de haberlo hecho.
Pensó por un momento qué tal vez Taehyung vendría a salvarlo, pero cada vez esa idea era más lejana.
Moriré ahogado. Se dijo a sí mismo al no ver ninguna señal de aquella sirena, fue estúpido no haberle dicho lo que sentía, y ahora más que nunca se culpaba de ello.
A punto de cerrar sus ojos, sintió como algo lo tomaba de la cintura y lo llevaba rápidamente a la superficie. Lo primero que sintió fue la arena de aquel lugar y luego unos labios tratando de darle respiración mientras unas manos hacían presión en su pecho, intentando de reanimarlo.
—Jungkook, reacciona por favor —sollozó el castaño repitiendo una y otra vez el proceso para poder reanimarlo —No me dejes, te amo
Como si esas palabras fueron lo único que necesitara, Jungkook se levantó abruptamente, tosiendo todo el agua que había tragado anteriormente.
—¡Jungkook!
Gritando emocionado, Taehyung abrazó el cuerpo mojado de Jungkook, con lágrimas aún deslizándose de sus acarameladas mejillas, para después separarse y darle un reprimienda.
—Eres un idiota Jungkook, ¿por qué has hecho eso?, pudiste morir, ¿dónde dejaste el collar que te di? hacer eso fue muy irresponsable de tú parte, ¿qué hubiera pasado si yo...
Interrumpiéndolo abruptamente, Jungkook tomó el rostro de Taehyung e hizo lo que siempre había querido pero nunca se atrevió por miedo a ser rechazado, lo besó.
Un pequeño grito de sorpresa fue expulsado de los labios de Taehyung, quedando este atrapado entre ambos labios.
El beso fue delicado y sin ningún apuro, ambos disfrutaban de ese pequeño acto íntimo que demostraba todo sus sentimientos.
—Te amo Taehyung, sé que últimamente fui un idiota contigo, pero al estar a tú lado y ver lo feliz que te ponías cada que venia y pasaba tiempo contigo, me hacía querer alejarme, no quiero lastimarte, esto que comenzó como una amistad, se fue convirtiendo en algo más, tenía miedo y gracias a eso terminé distanciándome, perdóname, no quería hacerte sentir de esa forma
—¿Por qué no me lo dijiste Jungkook?
—Tenía miedo
—¿De qué Jungkook? ¿Del rechazo? Jungkook, yo te amo, lo hago desde que te conocí, realmente estoy enamorado de ti, y estos días que estuviste distante para mi fue lo peor, no dejé de sentirme culpable —lágrimas comenzaron a caer de las acarameladas mejillas
—Lo siento Taehyung, no llores, por favor —tomando en sus brazos el acaramelado cuerpo, lo abrazo y lo sostuvo fuertemente, deseando que ese momento nunca terminara —Te prometo que de ahora en adelante te haré feliz, no te dejaré nunca solo, jamás haré que derrames más lágrimas, pero por favor quédate a mi lado y no me dejes solo
—N-Nunca lo haría Kookie
ESTÁS LEYENDO
Mermaids Love ᵏᵒᵒᵏᵗᵃᵉ
Fanfic¿𝐒𝐢𝐫𝐞𝐧𝐚𝐬? ¿𝐓ú 𝐚𝐜𝐚𝐬𝐨 𝐜𝐫𝐞𝐞𝐬 𝐞𝐧 𝐞𝐥𝐥𝐚𝐬? 𝐔𝐧𝐚 𝐬𝐢𝐫𝐞𝐧𝐚 𝐲 𝐮𝐧 𝐛𝐢ó𝐥𝐨𝐠𝐨 𝐦𝐚𝐫𝐢𝐧𝐨 ¿𝐐𝐮é 𝐩𝐨𝐝𝐫á 𝐬𝐮𝐜𝐞𝐝𝐞𝐫 𝐞𝐧𝐭𝐫𝐞 𝐞𝐥𝐥𝐨𝐬? ¿𝐍𝐚𝐝𝐚 𝐯𝐞𝐫𝐝𝐚𝐝? 𝐉𝐞𝐨𝐧 𝐉𝐮𝐧𝐠𝐤𝐨𝐨𝐤 𝐮𝐧 𝐟𝐚𝐦𝐨𝐬𝐨 𝐛𝐢ó𝐥𝐨...