Soledad

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"Los mas jóvenes

 deben aprender sobre la vida y la muerte,

 la tristeza y el dolor..."

Unos labios jóvenes susurraban aquella melodía en mandarín casi perfecto a fuerza de repetición, solo la luna le acompañaba mientras su lento caminar intentaba llevarle a casa.

Estaba cansada pero feliz, la sensación de orgullo llenaba su pecho desde hacia ya varias horas, entre las manos apretaba una carpeta de plástico dónde se guardaba celosamente el fruto de su esfuerzo, su título en psicología.

Mientras la canción cambiaba trato de acelerar el paso, percibiendo que la lluvia volvía a precipitarse, sus alegres pisadas sonaban en el asfalto mojado.

Disfrutó del aire fresco despeinando su cabellera corta y el álbum musical que ocupaba sus oídos, aunque las letras del mismo fueran melancólicas e incluso tuvieran la capacidad de hacerle llorar en ocasiones, jamas dejaría de amarlas.

Se perdió en aquellos pensamientos, recordando su vida antes de enfermar y como las novelas chinas se habían vuelto consuelo y refugio mientras estuvo alejada del mundo, confinada en una habitación a causa de su debilidad.

Las calles estaban cada vez más solitarias pero no pudo notarlo, así como tampoco se dio cuenta de aquella penetrante mirada posada en su persona que la seguía sin reparos.

"¿Por que hay que tener miedo

 de recorrer el mundo? 

Junto a un hombre ciego pero 

de corazón bondadoso..."

Su sonrisa vacilo un poco pero enseguida se repuso y canto también esa canción; estaba agradecida con Mo Xian Tong Xiu por aquellas historias maravillosas, hasta entonces había leído tres de sus novelas mas populares y veía también las adaptaciones en manhua, donghua o incluso el más reciente live action.

Pasando por un callejón recordó ver de nuevo brillo en sus ojos gracias a esas historias, no había vuelto a dejarse vencer por la enfermedad y aun débil, a pesar de que a veces ni siquiera podía levantarse de la cama, triste y adolorida, tomo cada clase virtual, envió sus trabajos, estudio hasta el agotamiento, y ahora tenia en sus manos el resultado.

"Su corazón es como el de un niño,

 ni siquiera el polvo puede contaminarlo, 

decidió permanecer a su lado, 

superando cada conflicto..."

El primer golpe llego sin aviso, arrojando su aún frágil cuerpo contra la pared, manos bruscas jalaron su abrigo, intento correr, sin éxito, antes de que el bolso fuese arrebatado y vaciado directamente en el suelo en busca de artículos con algo de valor.

La tranquila y triste melodía en los audífonos resguardados del hurto dentro de su pabellón auditivo contrastaba vivamente con los desbocados latidos de ese corazón asustado.

Gritó, solo para recibir otro golpe como respuesta, justo en el estomago, y fue hasta que intentó enfocar el rostro del atacante que notó su vista nublada, estaba llorando.

CHAOS: Camino de la Heroína Auto-proclamada Objetivo: SalvaciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora