𝐇𝐞𝐫𝐨𝐞𝐬 𝐨𝐟 𝐭𝐡𝐞 𝐎𝐫𝐚𝐧𝐠𝐞 𝐒𝐤𝐢𝐞𝐬 ➸ Larry.

0.15

El viernes amanece gris y nublado, y Louis se despierta con la sensación de que al final del día será una persona completamente nueva. Pero eso es absurdo. Es solo una persona, solo una persona anónima que respondió a más de cincuenta notas de Louis en toda la ciudad, solo alguien que vio algo de importancia en las palabras que Louis garabatea en los lugares más banales.

Pasa el día con Harry, tomando una siesta en el sofá del estudio mientras Harry entra y sale, vagando en el depósito de chatarra para recolectar y organizar metal para un proyecto que él mismo no parece entender lo suficientemente bien como para poder decírselo a Louis. Entonces Louis simplemente lo mira sentarse en el piso y organizar arandelas, tornillos y clavos en latas de pintura vacías, y vio trozos gigantes de metal por la mitad. Louis trae su libro al estudio y se acuesta en el sofá con su ipod adentro, comiendo pringles y leyendo El Hobbit , mientras que el sonido parpadeante y rugiente del trabajo de Harry es un fondo aburrido para su día.

A las 7 pm, están cenando sándwiches de pepino y salami en el piso del estudio de Harry. Están tranquilos, Harry cansado después de un día de trabajo y Louis ansioso por su reunión con The Bird esa noche.

"Tengo que irme a casa pronto". Louis se aclara la garganta y saca un pepino de su sándwich. Harry mira hacia arriba. "Le prometí a Zayn que esta noche haríamos una película de Star Wars". No mira a Harry cuando lo dice. No es que esté avergonzado exactamente, porque él y Harry aún no han definido lo que son, por lo que está libre para reunirse con quien quiera, pero no le gusta mentirle a Harry.

Harry tose. "No, está bien, Lou, yo, uh-", tira de su labio de esa manera que llamó la atención de Louis la primera vez que lo vio, "Voy a trabajar en esto un poco más". Hace un gesto hacia las pilas de metal que se encuentran cerca de su estación de trabajo.

Louis asiente.

**

Empieza a llover cuando Louis se dirige al parque. Espera que no disuada a la persona de aparecer, porque por mucho que Louis encuentre romántico encontrarse con alguien bajo la lluvia, realmente no quiere pararse en el puente bajo la lluvia por alguien que no va a ir para mostrarse.

La llovizna es fría, se desliza por el cuello de la camisa de Louis y hace que se le ponga la piel de gallina en los brazos. En el momento en que está de pie en el puente, mirando hacia el agua, está empapado, la camiseta se le pega y el pelo pegado a la frente. El resto del parque es un borrón a su alrededor, se forman charcos en la hierba y la lluvia cae con tanta fuerza que se siente como si lo golpearan contra la tierra. El rugido de la lluvia en el estanque debajo del puente es fuerte, y Louis se levanta la capucha, sintiendo que se empapa al instante.

El parque está vacío, excepto por algunos corredores corriendo para salir de la lluvia. Louis no puede ver la calle desde donde está parado, y los árboles altos bloquean la vista del horizonte, por lo que Louis se siente como si estuviera en medio de la nada, atrapado en este aguacero torrencial y esperando la llegada de una persona desconocida.

Se apoya contra la barandilla del puente, el frío metal le congela los antebrazos a través de la sudadera empapada. El cielo es denso y gris como el acero, brumoso y borroso por la lluvia, y Louis se siente como si estuviera en una novela de Jane Austen, esperando en un campo lluvioso a que aparezca el Sr. Darcy. A Louis siempre le ha gustado la lluvia: le gusta la sensación de renacer después de que termina el aguacero, le gusta el olor a tierra húmeda, le gusta ver a la gente aventurarse después de la tormenta. Le gusta ver a la gente acurrucada bajo los toldos en la ciudad, esperando que pase la tormenta. Le gusta la sensación de llevar zapatos mojados, de estar tan increíblemente mojado que se siente como un hombre que se está ahogando, un sentimiento que Louis conoce íntimamente.