-2- **En edición**

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Hiro

Recuerdo el día en que murió Tadashi, me encontraba en la escuela esperando ansiosamente los resultados de los exámenes de historia. Un día antes, mi hermano había prometido llevarme a la fábrica; con la condición de que obtuviera una buena calificación en las pruebas, estaba seguro que la nota que iba a recibir era perfecta, sin embargo, nunca lo descubrí. Antes de que la profesora me entregara mi calificación Honey, seguida de varias madres de familia, llegaron llorosas y cubiertas de polvo. Todo mi mundo se derrumbó, aún no tengo claro que fue lo que sucedió después de la llegada de mi tía pero terminé en el bosque donde ví a Gogo esta mañana. -¡Lo prometiste!- grité a la nada tanto como pude -¡Dijiste que volverías como siempre!- mis palabras eran inútiles, nadie me escuchaba, puse mis brazos en mis piernas y comencé a llorar sin saber que hacer. Mi hermano ya no estaba. Así es como me siento en estos momentos, perdido y sin ser escuchado. Camino lentamente al escenario, evitando soltar lágrima alguna. <<Debes ser fuerte>> <<No muestres tu debilidad>>

- Damas y caballeros, les presento a los tributos del Distrito 3, Hiro Hamada y Gogo Tomago - dice Krei alegremente. Nadie se ha propuesto como voluntario lo que significa que iremos, mi mejor amiga y yo.

El edificio de justicia es lo suficientemente amplio como para albergar a más de cinco familias, al entrar a una de las habitaciones me encuentro con tres sofás de terciopelo rojo y una pequeña mesa. Miro el exterior a través de la ventana, todos comienzan a regresar a casa, en silencio. La puerta se abre y mi tía entra. No dudo ni un segundo, la abrazo tanto como puedo. Sus cálidos brazos me hacen caer por completo, ahora estoy lleno de lágrimas y mocos.

- Tienes que ser fuerte hijo - escucho como me dice al oído.

- No... No puedo, hay pocas probabilidades - digo entre sollozos.

- No podría estar sin ti, Hiro, ya perdí a tu hermano, yo no... - Los agentes de la paz llegan, arrebatandome de la protección de mi tía.

- ¡Recuerda que tienes una familia que te ama! - grita antes de que cierren las puertas. Me miro en el reflejo de uno de los tantos platos de plata que se encuentran en la mesa y decido hacerle la promesa a mi tía de que seré fuerte. Me limpio las lágrimas con mi camisa y finjo una sonrisa, tal vez si pueda ganar, sólo necesito esforzarme más de lo que me creo capaz.

Wasabi, Honey y Fred llegan y, antes que pueda decir algo, me abrazan. Esta vez contengo las lágrimas y sonrío débilmente. Fred me mira y sin preguntar comienza a contarme una de las tantas estrategias que pueden existir. - Sobretodo, dales espectáculo, es lo que quieren - el tiempo de despedida se acaba, las puertas se abren y mis amigos se despiden con un abrazo final. Estoy solo.

Gogo

Camino hacia la salida que conecta con la carretera que llega a la estación, me he prometido no llorar, no le mostraré al Capitolio lo que nos pueden hacer a los más débiles. Hiro sale con la cara un poco hinchada y roja, al parecer no pudo contenerse, las cámaras nos enfocan y toman cientos de fotografías que en unas horas serán mostradas por televisión.

El vagón en el que entramos es mucho más lujoso de lo que pensé, hay una mesa cubierta con extravagantes manteles y encima cientos de manjares se encuentran, además, los caros muebles hacen que deteste más al Capitolio, tan sólo con uno de los floreros mi familia podría comer hasta por un mes. Decido ignorar a los bocadillos y prestar atención al chico de cabello alborotado que se sienta en uno de los sofás en espera de instrucciones, luce demasiado inocente al grados en que, alguno de los profesionales podría verlo como una presa fácil.

- La cena es a las 6:30- dice Krei -Pueden recorrer los alrededores, estoy seguro que les fascinarán - No pienso ni un segundo y salgo a explorar un poco, entro a una habitación y me acuesto en una de las camas, es mucho más cómoda de las que había en casa. Pienso en lo que Wasabi me dijo, su padre fue uno de los ganadores desafortunadamente, falleció hace algunos años atrás a causa de una pulmonía. - No confíes en nadie - . Le he prometido tanto a mis amigos como a la tía de Hiro que traería con vida al pequeño, aunque eso me costara la vida.

Hasta ahora he intentado contener mis lágrimas pero por lo que veo Hiro no pudo, nos llevaron en auto hasta el tren de la muerte (como yo le llamo) en el camino recordaba lo que me había dicho Wasabi, él sabía a lo que me enfrentaba pues su padre era uno de los ganadores pero había muerto hace 2 años. Hiro y yo entramos al tren se veía tan lujoso...

Narra Hiro:

Al entrar al tren vi diversos bocadillos, no pude resistirme y comenzé a comer, derrepente entraron 2 personas, eran nuestros mentores: Abigail y Robert Callaghan, ambos eran familia, Robert ganó sus juegos hace 40 años y su hija Abigail hace 6, muchos en el distrito le llaman la familia de los ganadores...

Abigail: Así que estos son los afortunados?

-(con un bocadillo en la boca) Ujum.

.

Abigail: Sabes niño, debes ahorrar espacio para el almuerzo...

-...

Gogo: Entonces... ustedes son nuestros mentores?

Robert: Así es jovencita

Krei: *llega* Más modales Hamada

El camino es largo pero no se si preocuparme o no ahora por sobrevivir, Krei nos dijo que nos duchemos y cambiaramos esos "trapos" no se que tiene de malo mi ropa...

Los Juegos Del Hambre BH6Donde viven las historias. Descúbrelo ahora