Gardenia

Lili

La flor de la inocencia, felicidad, pasión y sensibilidad.

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Los señores Black se apresuraron a hablar sobre mi vida nada más sentarnos todos en la mesa.

Leila: Bueno Zendaya... ¿Cuándo decidiste venir a Londres a trabajar y a que te dedicas exactamente en tu profesorado?

Zendaya: Bueno hace bastantes años que amo Londres y estaba esperando a terminar mis estudios para ejercer mi profesión aquí, enseño lengua antigua alfa y arquitectura como ya sabrá.

Leila: Por supuesto querida, mi marido me ha enseñado algunos trabajos tuyos y déjame decirte que son hermosos, adoramos el estilo clásico y se te da muy bien representarlo en tus obras.

Zendaya: Muchas gracias señora Black.

Leila: Dime Leila por favor, no me gustan las formalidades.

Zendaya: Perdone Leila, intentaré no tener formalidades en vuestro hogar. -Oí una pequeña risita y vi a Rosé sonriéndome.

Intentaba no mirar mucho a Roeanne, pero me era imposible, estaba hermosa y tenía una pequeña sonrisa en sus labios mientras escuchaba mi conversación con su madre. Quería quedarme a solas con ella y empezar a conocerla a fondo, después de tantos años y mi destino estaba aquí, en Londres, la ciudad donde siempre quise vivir y ejercer, esto era más que una coincidencia para mí.

Roseanne: Me alegra saber que me dará clases de Lengua alfa antigua, nuestro antiguo profesor era bastante peculiar y no estaba de acuerdo en que las omegas estuviéramos en su clase.

Zendaya: Por eso no se preocupe señorita Rosé, estaré encantada de enseñaros a todos esta fantástica materia, al final estamos hablando de poesía y cortejo antiguo, es bueno que los adolescentes y adultos de nuestra época sepan la manera antigua en la que sus antepasados convivían. Déjeme decirle que no estoy muy a favor de infravalorar a los omegas, nacemos de ellos quieras o no.

Roseanne sonrió aún más ampliamente y juré desfallecer al ver sus ojos en dos lunas hermosas y sus hoyuelos, mi aroma debió intensificarse porque sus padres se miraron cómplices y la señora Leila empezó a reírse con su marido, mi cara no podía estar más roja y Rosé me pedía disculpas con la mirada.

Zendaya: -Carraspeo.- Por supuesto no solo por el n-nacimiento, los omegas son t-trabajadores y f-fuertes y hacen de la vida de un alfa la más feliz de todas, todos debemos prestar atención a esta antigua materia y aprender de ella...-Empeze a tartamudear como siempre que estaba nerviosa, genial, ahora Rosé pensara que soy una alfa asustadiza.

Terminamos de cenar una media hora después y los señores Black nos desearon buena noche, había llegado justo un fin de semana por lo que tenía dos días para aclararme en el despacho y preparar las primeras clases en la universidad, Roseanne y yo cruzamos el jardín en un silencio cómodo y sentí como su corazón empezaba a latir más fuerte y el aroma a chocolate se intensificaba. Jodidamente amaba sus aromas, eran justo lo que siempre había soñado en un omega, el chocolate cambiaba de olor según su estado de ánimo, podía percibir su nerviosismo pues había cambiado a un chocolate con leche sutil.

Supongo que de pensar que estaríamos viviendo juntas hasta nuevo aviso, no todos los días conoces a tu destino y te enteras de que va a vivir en tu casa hasta que termines la carrera.

Porque si ella es mi destino y lo he sentido al igual que ella nada más entrar en su hogar. Para mí es perfecta en todos los sentidos por fuera y por dentro, parece esa chica dulce y pura que ha esperado por mí, por tener una familia y un alfa a quien amar y estoy jodidamente agradecida por haber elegido este trabajo.