Capítulo 57

230 27 17
                                    

Capítulo cincuenta y siete: "Nueva vida".

Tantas cosas pasan en un abrir y cerrar de ojos.

—Cariño...

Puede asimilarse a un sueño, los nervios y las mismas emociones inolvidables, se juntan.

—TN, linda, despierta. —su voz suave choca contra mi oído. —Ya vamos a aterrizar, princesa.

Pero al despertar, olvidas ese sueño...

—Papá... —me quejé sin abrir los ojos aún. —No tienes que usar tantos apodos para demostrar cariño.

—Perdona... —se le escuchaba nervioso. —Es que en media hora aterrizarmos y no quería que te levantaras agitada o mareada. —suspiró. —Mira por la ventana, ya se puede ver Japón.

Con pereza, abrí mis ojos de a poco, bostece y con el pequeño espacio que tenía, estiré mis brazos, saliendo de esa posición incómoda. Dirijo mi mirada hacia la ventana de mi izquierda, comenzando a ver mi país natal. (NA: saquenme de latinoamerica, plox :v)

—¿Qué dices? —mi padre suavemente dijo a mi oido—¿Crees que ha cambiado mucho?

—Cuando me fui, no mire atrás... Por lo que no recuerdo mucho... —contesté sin mucho interés mientras seguía viendo el hermoso paisaje. —Ya han pasado casi cuatro años, después de todo.

Casi cuatro años... No pensé que volvería. Pero, seguramente están perdidos de que rayos ha pasado con mi vida y el porqué estoy de regreso.

A ver... Después de estar como Magdalena en el avión, cuando me fui, al llegar por primera vez a Inglaterra, fue un caos total. Mis nervios de saber que estaba sola, recordar mi inglés y el que seguramente debía que lidiar con mi miedo social al pedir indicaciones a alguien, hizo que no me fijara bien y un idiota robó mi maleta de mano, donde estaba mi teléfono y mi computadora. Que buen inicio.

Afortunadamente, no pasó mucho tiempo hasta que encontré al encargado del instituto para irme a recoger, no dude en contarle mi robo; pero igual, la policía no hizo mayor cosa porque el tipo de fue corriendo y huyó en una moto, visto por las cámaras de seguridad. Lo buscaron por días hasta que tuve que hacerme la idea de olvidarme de eso.

El instituto me dijo que no podía reparar gastos de mi beca en eso, y ellos se encargarían de notificar a mi encargado de mi llegada. Resignada tuve que bloquear mis contactos y mi única red social, al recordar que mis dispositivos estaban sin contraseña.

Y así es como perdí el contacto con mi tía y Ryo.

Cuando comenzaron las clases, tenía miedo a que volvería a ser la "chica antisocial", después de todo, había oído sobre casos de abuso sobre chicos extranjeros en las escuelas.

Pero, ese no fue mi caso.

Los chicos de mi salón fueron totalmente amables y comprensivos. Si bien, seguía siendo una chica solitaria y sin mayor contacto, ellos me entendían el hecho de darme mi espacio y jamás se burlaron o me miraron mal, de hecho, era popular por el simple hecho de ser japonesa.

Y fue de la misma manera que cambió mi vida.

En el último festival del año, las clases de último año, optaron de hacer un concurso de belleza entre una represente de cada clase. No se imaginarán mi sorpresa cuando me eligieron a mi para la competencia. Debo decir que tuve múltiples ataques de ansiedad por el simple hecho de imaginarme sobre una tarima para que todos me observarán. Iba a negarme, pero se me fue imposible por mis compañeros.

Al llegar el día y ver que en verdad no tenía escapatoria. Mandé todo al diablo e imaginé el hecho de que estaba sola, para no sentir el estrés de mi problema. Y, ¿saben algo? Me lucí.

Mi Chica Antisocial [Brothers Conflict] (Iori Asahina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora