Capítulo 2: La razón de por qué ya no confío en la inocencia

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Es difícil pensar que vives al lado de New York y no has ido ni a una fiesta o a una disco, es impresionante la tan mala suerte que tengo de vivir en una ciudad al lado de New York que es toda fea y aburrida, es que enserio mi hermano es el peor hermano del mundo, ¡No me deja hacer nada!, en fin una vez con Jay hicimos todo un plan para poder escaparnos, porque de verdad esto parece una cárcel, entonces decidimos ejecutar nuestro plan en la noche cuando todos estaban durmiendo, el plan era perfecto, con Jay nos escabulliríamos por un pasadizo secreto que él encontró y luego de burlar las trampas y alarmas que tenemos afuera de la casa, nos iríamos felizmente caminando hacia New York, sip tenemos todas las alarmas y trampas afuera de la casa, no adentro. Finalmente cuando íbamos cruzando el pasillo principal nos encontramos con el hámster de Kevin, si ya sé que dirán “Solo es un hámster que nos puede hacer” créanme yo también lo dije pero no se crean es un hámster malvado, así que ignorando al hámster seguimos con nuestro plan y luego de diez segundos de hacernos encontrado con el hámster suenan las alarmas de afuera, ¡El maldito hámster hizo que sonaran las alarmas de afuera!, bueno mientras Jay estaba como “¡Sálvense quien pueda!” yo estaba como “Voy a hacer estofado de hámster algún día” pero también estaba como “¡Mi hermano me va a crucificar viva!”.

Al final Jay salió corriendo a su cuarto dejándome sola porque se le ocurrió que si no lo pillaban en la escena del crimen no lo iban a castigar y me dijo “Soldado que arranca sirve para otra guerra”, pero al idiota se le olvido de las cámaras de seguridad que graban todo, así que mientras mi hermano me daba un sermón y me castigaba dos meses, lo cual no eran solo dos meses él quería castigarme y dejarme sin mi iniciación de Demandeurs volviéndome en una sirvienta de la casa/mansión, les dije que mi hermano es el diablo mismo pero por suerte que también existe mi ángel guardián llamado Nadia, ella lo convenció de que estaba siendo muy extremista y que solo los meses de castigo me harían aprender lo cual nunca va a pasar mientras yo viva, bueno y no nos olvidemos del gran amigo Jay, a él lo castigaron tres meses por escapar y dejarme sola, dulce venganza. Y así es como comenzó mi desconfianza en las cosas que parecen inocentes.

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Hola, perdón por haber desaparecido por mucho mucho tiempo pero mi imaginación estaba bien muerta, acavo de revivirla y además con todas las celebraciones de Navidad, Año Nuevo y cumpleaños de mis amigas y familiares no he tenido tiempo de revivir mi imaginación pero aquí estoy no se asusten c: espero que les guste este cápitulo y si tengo faltas ortograficas por favor diganme ;)

Les dejo un gif de el hámster de Kevin en su ruedita de la muerte!!

Besos, 

SarahKelmeckis

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