Capítulo 1

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Mi nombre es Ren Fernandes tengo 14 años, nací en Argentina, aunque gracias a una beca estudiantil hoy llegué a Tokio Japón, pero no es la gran ciudad de Tokio sino una ciudad con mucha naturaleza a su alrededor. No tengo recuerdos de mis padres ya que a los pocos meses de nacer los asaltaron y mataron cerca de mi casa por lo que la mayoría de mi infancia la pasé con mis abuelos y de un hogar adoptivo a otro. Creo no tuve tanta suerte en mi vida en Argentina a excepción de conocer a quien a día de hoy es mi único amigo Julián Ramírez y su familia que son de las pocas personas que me trataron bien a lo largo los cinco años que los conozco

Lo gracioso de este pequeño gran viaje es que no comprendo nada del idioma, por lo que mis profesores me enviaron un año antes de iniciar las clases en la escuela secundaria Kuo, una de las secundarias más prestigiosas de Japón, para familiarizarme con el idioma y la cultura Japonesa, el tiempo es muy limitado solo tengo un año aunque domino casi a la perfección el inglés eso hará las cosas un poco más fáciles aun así no toda la gente lo habla, además debo conseguir un trabajo para poder sustentarme ya que si bien me dejarán un pequeño departamento y me brindarán ayuda monetaria, no me gusta depender de otras personas cuando se trata de dinero para comer y comprar cosas para estudiar

Escribo este diario en mi celular por sugerencia de mi profesor, también debo describir como me veo ahora no entiendo el por qué: Mido 1,59. Mi cabello es corto algo alborotado ya que no me gusta peinarme en su mayoría el color es negro, aunque cuando se acerca a las puntas se torna de un color rojo, tengo este peculiar color de cabello desde nacimiento. Mis ojos son de un color azabache. No llevo puesto nada en especial un abrigo negro con detalles blancos en ambas mangas, pantalón del mismo color negro, zapatillas blancas, así como siempre voy con mis auriculares bluetooth rojos, dos pequeñas valijas donde únicamente llevo ropa, una mochila donde llevo mi computadora junto a demás cosas electrónicas como cargadores y por ultimo algo que no podía faltar y es... mi equipo de mate junto con yerba como para 3 meses

En fin, por fin llegue a mi departamento que se encuentra en el cuarto piso de un pequeño edificio de seis pisos, donde después de casi 30 horas de viaje podré dormir, pero... la puerta no abre

-Mierda ¿Por qué me tiene que pasar esto? Si no se abre juro que la voy a patear hasta que lo haga-un poco enojado mientras forcejeaba con la cerradura y la llave. Hasta que mi nuevo vecino de al lado salió por el ruido

Un hombre de avanzada edad que no parecía tener más de 60 años, más alto que yo tal vez 1,68, cabello blanco supongo que por la edad y llevaba un pendiente en su oreja derecha en forma de triángulo de un color dorado, salió del departamento del frente, al principio no confiaba mucho pero luego de examinar detenidamente su aura no había nada de lo que preocuparse, inmediatamente me dijo algo, pero obviamente hablaba en japonés y no entendí absolutamente nada de lo que dijo

-Excuse me sir but I don't understand, I don't really understand Japanese-respondí en inglés con la esperanza de que entendiera, por desgracia no daba indicios de entender, pero en ese momento se me ocurrió usar el traductor del celular e intentar hacer que me entienda. Así repetí lo mismo al micrófono y para mi sorpresa y alivio si entendió, a lo que él volvió a preguntar lo mismo que hace un momento

-Wakai shounen daijôbudesuka?-que al español me está preguntando "¿Sucede algo joven?" a lo que le contesté que la maldita puerta no abría a través del traductor, por lo que él únicamente levantó un poco la puerta y la empujó, haciendo que me sienta como un completo inútil

-Muchas gracias señor-dije inconscientemente en español con una sonrisa, pero el señor una vez más se quedó quieto sin entender-Casi lo olvido el traductor-pensé mientras reía un poco y repetía lo mismo al micrófono para que así pueda entenderme

El ultimo cazador del clan...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora