A Bitten Heart. [Ziall] Suspendida.

Capítulo ⑱

-Hola Niall.

Le miré de arriba abajo. Jersey azul, pantalones beis, y playeras a juego con el color de el jersey. Que porcierto, estaba un poco manchado.

¿Tierra? ¿Barro? No se veía con claridad, ya que la noche había caido sobre Irlanda.

-¿Qué haces tu aquí?- dije con los colores subidos. El sabor amargo de el detergente seguía en mi boca.

-¿No podía pasar a verte? Después de el almuerzo fui a la sala de estudio, donde seguramente estarías, pero no había ni rastro de ti.- dijo pasando a mi lado y entrando en la casa.- Pero tenía entrenamiento, así que no podía pasarme a mirar por aquí.

Le miré enfurruñado, la conversación que había tenido con Harry no decía lo mismo.

-¿No están tus padres?- preguntó curioso.

Cerré la puerta, y me acerque a él.

-No, sin embargo...- iba a mencionar a Louis, pero no hizo falta.

Louis bajo las escaleras ruidosamente, y miro en nuestra dirección, absorto del mundo, en general.

Al ver a Zayn, sonrió en nuestra dirección, mientras movía los ojos, de el, a mí, y viceversa.

-Niall, es muy tarde, creo que me tengo que ir ya.- declaró caminando en dirección a la puerta, pero antes de abrirla, se giro, y me miró fijamente.- Os dejo, solos.- y salió riéndose de casa, como si acabase de contar un chiste.

Maldito Louis.

Un día el karma le devolverá todas las bromas que me ha echo, y la venganza será apoteosica.

-Bueno, pues estamos solos.- dijo Zayn tirándose en el gran sofá blanco.

-¿Que te hace pensar eso? Greg podría volver de la Universidad en cualquier momento, y mis padres también.- declaré yo cruzandome de brazos.

-Cállate anda, y no les invoques.- se río.

Quería saber mas acerca de aquella conversación que había tenido con Harry en el pasillo.

-Ven aquí.- dijo Zayn dando un par de golpecitos a su lado.

Con paso tímido y lento, me acerque a él.

-Oye Zayn, cuéntame algo mas sobre los vampiros.

Vi una alarma en su cara, cuando le planteé aquella cuestión.

-¿Algo más?- vi asomar una sonrisa mientras me acercaba a él, y pasaba un brazo sobre mis hombros.

-Sí.

Vaya, no era nada incómodo estar sobre el.

-Creo que para ser un simple mortal, ya sabes mucho Niall.- dijo sonriente.

-Pero, ¿Hay algo más?

Le miré directamente a los ojos, cosa que siempre ocurría antes de que nos fueramos a besar. Baje la mirada, empezaba a tener calor.

No me respondió, y hizo que me tumbase a su lado.

Mi vista se fijo en el techo, liso, y también blanco, a juego con el sofá.

El sofá era lo suficientemente grande como pará que entrasemos los dos, y lo suficientemente entrecho, para que estuviéramos pegados.

-Entonces, ¿Estás muerto?- pregunté.

Zayn, aún con el brazo sobre mis hombros, llevó la mano a mi pelo, y comenzo a avariciarlo lentamente.

Cerré los ojos, y disfrute de la caricia.