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- Tienes razón, lo más seguro es que llegarán pronto. Podemos esperar juntos. Soy Wong Kunghang pero puedes llamarme Hendery, es un gusto. - El chico frente a ella se presentó mostrándole una pequeña y bonita sonrisa logrando ponerla más nerviosa.

Inhaló lentamente y exhaló buscando calmarse, era su oportunidad de comenzar una nueva vida, de ser sociable y finalmente conocer personas.

- Claro. Podemos esperar juntos. Me llamo Ong Misuk. - Sintió como si un peso se fuera de sus hombros al darse cuenta de que no tartamudeo en la oración. Parecía agradable y mucho más confiado que ella, eso fue seguro cuando el más alto le rodeó con su brazo los hombros como si fuesen amigos de toda la vida mientras comenzaba a hablarle sobre él.

"¿Quién diría que un chico guapo podría ser agradable?" Hendery ya le había hablado alegremente sobre sus amigos y hasta le había contado que adoraba comer pollo así como también le había invitado a comerlo juntos algún día. Era difícil de creer que después de tantos años sola ahora podía decir que tenía algo como un amigo.

No pasó mucho tiempo hasta que más estudiantes de su carrera comenzaron a acercarse a ellos. Pensó que quizás teniendo más personas cerca y que eran más habladoras que ella entonces Hendery ya no continuaría hablando con ella, grande fue su sorpresa cuando incluso le incluyo en las conversaciones logrando que conociera a más de sus compañeros.

Sin embargo, toda su atención se fue totalmente de la conversación cuando observó a lo lejos el rostro más hermoso que había visto en todos sus años de vida. Si bien Hendery era guapo entonces aquel chico estaba probablemente hecho por los mismos dioses.

"Dios mío, Misuk. ¿Qué estás pensando? Deja de mirarlo como una acosadora" Se regaño a si misma alejando su mirada de aquel completo desconocido, estaba demasiado lejos como para llegar a leer al menos cuál era su carrera, pero estaba más que segura que incluso aunque estuviesen en la misma jamás prestaría atención en alguien como ella

- Vamos, pequeña. Es hora de ir a la primera clase. Esperemos que al profesor no se le ocurra realmente pasar materia el primer día. - La voz de Hendery logro sacar a Misuk de sus pensamientos y sin emitir ninguna palabra se decidió a seguir al resto del grupo. Dirigiendo su mirada al lugar donde había visto a ese chico perfecto solamente para no encontrarlo allí.

El primer día pasó rápido, para su sorpresa Hendery no se apartó de ella en todo el día e incluso le ayudo a conocer a algunos de sus otros compañeros con quiénes compartía la mayoría de sus clases. Na Jaemin y Liu Yangyang fueron aquellos dos chicos agradables que había conocido.

Fue corto el camino desde la universidad hasta su hogar, estaba tan feliz porque después de tanto ahora podía decir que tenía amigos e incluso que tenía sus números de teléfono, porque sí, esos tres chicos agradables habían pedido su teléfono y habían anotado allí sus números. Se sentía afortunada pero aun así no logró sacar de sus pensamientos la imagen del chico desconocido.

"¿Será uno de esos "enamoramientos" como los que suele tener mi prima pequeña?" Su pequeña prima de diez años que le visitaba cada cierto tiempo siempre decía estar enamorada de un nuevo Idol o actor cada vez que se veían, quizás en su caso había sido igual y había quedado simplemente demasiado sorprendida por lo bonito que el desconocido era.

- Quizás hasta tiene mala personalidad o jamás vuelva a verlo. - Susurró para sí misma estando ya finalmente tendida sobre su cómoda cama, mirando nuevamente el techo de madera como cada tarde.

Los días pasaban rápido, desde el inicio intentaba estudiar en sus horas libres y prestar atención durante sus clases, lo cual era complicado teniendo a su lado al revoltoso de Hendery quien ya hasta se había llamado a si mismo su mejor amigo, lo cual a Misuk no le molestaba ni lo más mínimo.

Durante los recesos solía pasar el tiempo con Hendery, Jaemin, Yangyang y su nueva amiga Aisha quien estudiaba psicología pero se habían conocido cuando accidentalmente dejó caer sus cuadernos tratando de llegar rápido a su clase, Misuk realmente agradeció recibir la ayuda de aquella agradable chica que termino siendo su ahora primera amiga.

- No entiendo porque prefieres pasar tiempo con nosotros. ¿Tus compañeros son desagradables? - El chico de cabello rubio junto preguntó a la castaña quien bebía de su jugo de manzana. Aisha negó con su cabeza soltando un pequeño suspiro antes de responder.

- No, son agradables. Pero creo que son demasiado habladores para mi gusto. Te sorprendería lo mucho que Jeno y Haechan pueden hablar en menos de dos minutos. - Misuk inevitablemente soltó una pequeña risa ante el comentario de la castaña más alta, no conocía a ninguno de los dos mencionados pero era gracioso ver la expresión en el rostro de Aisha al hablar de ellos.

- Mira como hablas de mi a mis espaldas, Aisha. Y yo que creí que ya teníamos una relación agradable. - Se escuchó una voz masculina desconocida para la más baja del grupo, volteó su rostro observando a un nuevo chico, parecía más alto que Yangyang y sin duda tenía una apariencia ligeramente más "dura" que el resto o al menos a los ojos de Misuk.

- Dios Jeno, no se puede estar tranquila un tiempo sin que molestes. - Aunque sus palabras fueron duras fue la sonrisa en el rostro de la chica lo que hizo notar que no se encontraba enfadada pero si bastante entretenida con el comentario dramático de su compañero.

Fue un momento gracioso para Misuk ver como ambos hablaban, el tal Jeno fingiendo sentirse herido mientras Aisha le daba un pequeño golpe en la cabeza que sacó una risa de los labios de quienes observaban.

- ¡Aisha, Jeno! Ya vamos, no quiero llegar tarde. Saben que la señora Park no es nada agradable cuando llegamos tarde. - Otra voz desconocida se unió a la conversación.

The Perfect Boy [Haechan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora