Capitulo Once

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Kate casi tenía cuatro meses de embarazo, Carlos la había acompañado a la primera ecografía y todo estaba perfecto con el bebé.

En unas semanas se graduarían y a Kate la ponía nerviosa que Carlos no había hablado más de su beca de lacrosse y temía que fuera por lo del bebé.

Se puso un gran hoodie encima del uniforme, su barriga se estaba formado y ya se podía notar un poco.

—Hey, no se te olvide que hoy es la ecografía—musitó Carlos antes de que Kate se subiera al auto Hannah para ir a la escuela. —Veámonos en el parqueadero del centro comercial, no llegues a la escuela.—lo dijo rápidamente mientras la ayudaba a subir para que nadie en su casa notara que estaban hablando.

Cuando llegaron a la cita, Kate no podía creer que casi lo olvidaba.

—Hola chicos, llegaron puntuales esta vez, que sorpresa—Dijo la doctora cuando llegaron al consultorio.

Carlos la tomó de la mano y se alegró mucho que todo estuviera e perfectas condiciones.
—¿Quieres saber el sexo?

Ambos se miraron.

—Sí- asintió Kate.

—Al parecer será una niña—contestó.

Saliendo de allí luego de que les dijeran algunas recomendaciones, Carlos no podía creer que en unos meses tendría a una mini Kate en sus brazos.

—Quiero llevarte a desayunar, si tomamos algo ahora, llegaremos a tiempo para el segundo periodo-le dijo Carlos mientras se dirigía a una cafeteria.
Pasaron por una papelería y Kate se enamoró de un diario que vió.

—¿Nuevo diario?—le preguntó Carlos al ver a Kate subirse al auto con uno.

—Es para nuestro hija..

—¿Para qué? Un recién nacido no podrá usarlo.

Kate le explicó a Carlos lo que había hecho su mamá con ella y sus hermanas.

Había terminado de escribir algo en el diario cuando un mensaje hizo que el celular de Kate vibrara.

Era Nate, había enviando una foto de ella y Carlos saliendo de cita con la doctora.

"Se lo tenían bien guardado, felicitaciones.."

—Dios mío, Nate nos hizo seguir—musitó Kate entrecortadamente, casi en un grito ahogado.

Carlos tomó el teléfono y miró de lo que se trataba.

—Ese hijo de puta me las pagará una  por una...le dolerán hasta los huesos...

—Por favor, déjalo así, no quiero que golpees a nadie, no vale la pena.

Carlos apretó la mano y le dio un puñetazo fuerte al claxon.

—Pensaré en otra cosa por ti ángel. Pero de hoy no pasa, ese mal nacido se las verá conmigo.

Llegaron al segundo periodo y tomaron sus clases normales, Kate se sentó junto a Hannah y Josh en el almuerzo, la ponía nerviosa lo que podría hacer Carlos...

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