De caza en la disco

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Era una noche de verano, estaba en una disco no muy conocida por la ciudad. Miraba a todos con mucha atención, su color de pelo, sus pecas, la ropa que llevaban, las joyas y accesorios. Me senté en la barra y le pedí al camarero que me trajera un poco de whisky. Un hombre alto y con una chaqueta negra de cuero y unos lentes de sol se sentó al lado mío. Solo le faltaría la moto y sería todo un motociclista. Pero no me interesa lo que pueda ser, me interesa más la deuda que le debe a mi jefe. Mi jefe no está para nada feliz con el y por eso me mandó a matarle, básicamente ese es mi trabajo, acesinar aquellos que hacen enojar a los grandes líderes. Me dejó una orden muy fácil y sencilla; -Él es Mark Brethen, nos debe mucho dinero y nos ha traicionado muchas veces, se buena niña y matalo, si lo haces te daremos una pequeña recompensa, falla y tomarás su lugar, me oíste bien?
No podía fallar en esto, pero no tenía miedo ninguno ya que nunca fallaba cuando me pedían este tipo de trabajos.
-Aguardiente por favor- pidió Mark al camarero
-Con esos anteojos pareces vaquero- Le dije a Mark, en un intento para provocarlo
-En Texas usan mucho este tipo de gafas
-Oí que Texas tiene un pésimo sentido de la moda.
-Bueno, digamos que tú no tienes el mejor vestuario
-Mi ropa concuerda con mi trabajo. - Le respondí con una media sonrisa, en ningún momento me voltee hacia el, quería demostrarle que no le tengo miedo y que era la que mandaba ahí
-En que trabajas? Recoges la basura o que?
-Si, pero no la basura que tú crees.
-Ah si? Entonces que tipo de basura?
Me gire hacia el lentamente, como una felina, calculando cuidadosamente lo que iba a hacer a continuación.
-Basura como tú
Cogí mi bolso rápidamente y saqué la un cuchillo muy afilado. Le intente apuñalar lo más rápido pero tenía buenos reflejos, se movió tan rápido que casi logra escapar. Corrí detrás de el hasta que salimos de la disco. Vi que dió una vuelta hacia la derecha y voltee hacia la izquierda para atraparlo. Y salió como lo predije, me lo encontré de cara y le pude atravesar con el cuchillo unas cuantas veces para asegurarme de que están bien muerto. Le tome una foto al cuerpo sin vida de Mark y se la mandé a mi jefe:
𝑼𝒏 𝒓𝒆𝒈𝒂𝒍𝒊𝒕𝒐 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒕𝒊, 𝒆𝒔𝒑𝒆𝒓𝒐 𝒒 𝒕𝒆 𝒈𝒖𝒔𝒕𝒆.
Se lo mandé y me fui muy contenta por la caza exitosa de aquella noche.
𝔽𝕚𝕟...

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