¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Él dice: Oh, nena, no te cortes en mis bordes Soy el rey de todo y mi lengua es un arma Hay una luz en la grieta que separa tus muslos Y si quieres ir al cielo deberías cogerme esta noche"- Young god, Halsey.
Eiza despierta debido al movimiento del mar a su alrededor, tiene sus brazos alrededor de la cintura de Laura así que besa su omoplato antes de colocarse de pie, va hasta el baño donde lava sus dientes y rostro con cuidado.
Vuelve a la habitación notando que son solo las cinco de la mañana por el reloj de la mesita de noche, se vuelve a recostar abrazando nuevamente a Laura atrayéndola hacia ella momento que aprovecha de acariciar sus muslos donde la rubia gime aun con los ojos cerrados.
Eiza desliza su mano dentro de las bragas acariciando su pelvis suavemente subiendo a su vientre. Laura abre los ojos girando, encontrándose con el rostro de la castaña. Se restriega un poco los ojos para volver a verla.
- Siento despertarte- susurra la castaña
Laura acaricia su mejilla acercando sus labios a ella.
- Bésame – susurra la rubia – por favor
- Como ordenes cielo – responde la castaña besándola rudamente, eso sorprende a Laura quien abre la boca mientras Eiza muerde su labio inferior adueñándose de su cavidad bucal. La chica se sube sobre Laura y rosa sus senos aun vestida haciéndola temblar.
- Dios- gime Laura
La castaña sonrie besando su mejilla, bajando por su cuello mientras pasa su lengua por el cuello haciéndola temblar y levantar las caderas.
- Eres ansiosa- ríe Eiza besando sus labios desabrochando botón a botón la camisa de Massimo
- Y tu me torturas- susurra Laura mientras la castaña baja a sus pechos besándolos despacio lamiendo su pezón haciendo que ella empuje la cabeza de la castaña mientras succiona su pecho.
Eiza muerde su pezón suavemente mientras Laura levanta su cadera momento que la castaña aprovecha de sacar sus bragas.
- Abre tus piernas para mi cielo- susurra Eiza viéndola- vamos a hacerte sentir bien
Laura abre sus piernas mientras Eiza lame sus labios pasando su boca sobre su pelvis dando un suave beso haciéndola sollozar. La castaña baja su rostro posando sus labios por sus labios mayores haciéndola temblar, momento que ella abre sus piernas un poco más succionando su clítoris haciéndola temblar. La castaña introduce dos dedos en su interior moviendo sus dedos suavemente dentro y fuera.
La rubia tiembla mientras baja su propia mano a su clítoris acariciándolo, temblando mientras encorva la espalda llegando al orgasmo.
- Buena chica- sonrie la castaña subiendo sobre ella besando sus labios
