Una Mejor Oportunidad

Capitulo IV

Me desperté y sentí un brazo rodeando mi cintura en modo posesivo, me di la vuelta quedando cara a cara con esa persona que era Ethan.

Anoche estuvimos viendo caricaturas aunque está claro que él solo lo hizo por mí, siempre lo atrapaba mirándome y yo solo le respondía con una sonrisa y un beso en la mejilla a lo que él me gruñía dando a entender que no lo quería ahí él.

Ethan pidió que trajeran la comida al cuarto a la hora de cenar.

Me gustó mucho estar así con él. Sin nada de preocupes y nadie que nos interrumpiera, solo era él y yo en nuestra pequeña burbuja.

Acarició la mejilla de Ethan sintiendo su ligera barba y este comienza a abrir los ojos, yo solo sonrio, al tenerlo abriendo me acerca más a él.

-- Buenos días mi Luna -- dice con una pequeña sonrisa y una voz ronca.

-- Buenos días lobito.

-- ¿No me dará mi beso de buenos días?

Ríe por ello pero está claro que se lo di ¿No?. ¡Besa de maravilla!.

-- Hoy tengo que arreglar algunas cosas con Iker y Lukas en una manda cercana, y Joana irá a traer a Saúl a la casa de sus padres.

-- ¿Saúl?

-- El hijo de Iker y Joana, se queda con sus abuelos una vez por mes, tiene ochos años pero es muy inteligente para su edad y muy travieso también.

-- Bueno...entonces la casa estará sola el día de hoy.

-- No te preocupes, llegaré temprano para que en la tarde vayamos a comprar ropa para ti y así no me extrañarás mucho tiempo.

-- ¿Y que te hace decir que lo haré?

-- Por qué yo sí lo haré. -- dice para luego besarme.

***

Estaba terminando de desayunar, Ethan ya se había ido a arreglar sus cosas con el flacucho y su hermano.

-- Buenos días enana -- me saluda Nicolás al entrar a la cocina.

-- Buenos días demonio -- le respondo y lo veo service un poco de jugo en un vaso.

-- ¿Y Matt?

-- sigue dormido.

-- No me sorprende de él ¿Me quieres acompañar a ver la mansión? Ethan me menciona que había una biblioteca y la quiero encontrar.

-- Ok, hasta el momento solo la piscina he visto

-- ¿Hay piscina? -- ríe y asiente con la cabeza.

Bueno quién lo diría, yo con solo el baño que tiene me es suficiente por poco me perdió ahí a la hora de bañarme. Ethan me había prestado una de sus camisas y Joana me dejó unos jeans.

Comenzamos a caminar con Nicolás a mi lado.

-- ¿Crees que me dejaría unirme a los guerreros?

-- ¿Quieres unirte?

-- Si, en mi manada yo era uno.

-- Yo creo que sí te dejaría pero si te dice que no me avisas para convencerlo. -- le digo mientra subo las escaleras. -- ¿Crees que Matt también quiera unirse? Él también era guerrero en nuestra manada ante que pasara todo eso.

-- No sabría que decirte, por qué él pensara en ti antes de tomar esa decisión.

-- ¿Por qué en mi?

-- Eres su hermana pequeña, él te protege de todo, cuando Lukas nos llevó a nuestra habitación del hotel no dejaba de dar vueltas en todo el cuarto y preguntose si estarías bien con el alpha ya que no confiaba en él. Esa es la razón por la que te fuimos a buscar temprano al día siguiente.