afraid of you (Fred Weasley)

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Jane leía tranquilamente mientras esperaba a Fleur para contarle sobre su nueva apuesta sobre quién sería el mejor bromista de Hogwarts.

Jane tenía confía en ella pues había aprendido del mejor, su padre siempre sabía cómo lidiar cada situación, y devolvía las bromas por el triple.

Mientras, detrás de los arbustos se encontraban Fred y George espirando a la chica, viendo cada cosa que ella hacía.
-Muy bien, nuestro objetivo está en posición.- le dijo el gemelo mayor.

-Seguro que saldrá bien? Nunca lo habíamos probado y puede arruinarle la cara...- dijo George no muy seguro a lo que Fred levantó la ceja.- Qué? Ella es bonita...seria una pena dejarla fea.

Que si le molesto que su hermano dijera eso? Definitivamente si. Que si sabía el por que? No tenía ni la más mínima idea.

Fred miró de nuevo a la chica para volver a mirar a su hermano.
-Por eso vamos a usarla a ella como conejillo de indias.- dijo este finalmente con una sonrisa.

Jane miraba su reloj y sabía que la francesa se había quedado dormida. Rodó los ojos para ella misma y se levantó se donde estaba sentada.

Pero cuando quiso caminar no pudo pues sus zapatos estaban pegados en el suelo.
-Qué diablos?- dijo para ella misma mientras miraba de despegarse.- Pegamento instantáneo? Es lo único que se os ocurre?- preguntó ahora con una sonrisa mientras a miraba en dirección a los arbustos.

Los gemelos salieron de su escondite.
-Eso no es todo.- dijo George mirándola con una sonrisa.

-Tenemos otra sorpresa.- dijo Fred colocándose detrás de ella.- Preparada?- le preguntó en un susurro haciéndole erizar la piel.

George no espero más para tirarte una especie de polvo rosa. Un polvo rosa que picaba bastante.
-Qué me habéis hecho?- preguntó, ya que no sentía nada más que un leve picos en los labios y en su boca.

-Enserio quieres saberlo, conejito?- le preguntó Fred con una sonrisa burlona mientras la miraba fijamente.

Conejito? A que venía eso?
-No me llames así.- dijo ella algo molesta pero fue cuando de repente, sus dientes incisivos centrales empezaron a crecer.

Tenía los dientes de conejo y ahora cuadraba el apodo que le había puesto.

George solo se reía mientras Fred estaba cruzado de brazos, con una sonrisa en el rostro.
-Y bien, quienes son los mejores bromistas del colegio?- preguntó agachándose para quedar a la altura de la chica.

-Obviamente vosotros no.- dijo ella tapándose la boca pues realmente era vergonzoso.

El me miró y sonrió más.
-Bien, que disfrutes tus nuevos dientes, conejito.- dijo tocándole la punta de la nariz.- Por cierto Jane 1/ Fred 1.- le recordó a lo que ella rodó los ojos.

No había sido la gran broma, es decir, un conejo? Era en serio? Tampoco había sido tan original.

Ella lo podía hacer mucho mejor.

Así que cuando pasó el día completo, después de encontrar la poción para que desaparecieran los dientes de conejo con la ayuda de Fleur, preparó lo necesario.

Ahora solo faltaba la carnada.
-Weasleys!- dijo ella llamando la atención d ella pelirrojos que caminaban hacia el gran comedor.

Ellos se giraron a la vez y se miraron entre sí.
-Qué pasa conejito?- preguntó Fred con una sonrisa burlona, de nuevo.

Jane solo sonrió.
-Solo quería deciros que lo he pensado...y vosotros sois los reyes de las bromas... por eso, os he preparado galletas.- dijo extendiéndoselas.

Fred en ese momento quería reír por la inocencia que tenía y lo mala bromista que era para pensar que ellos caerían en algo tan simple.

-Y nosotros no somos tan inútiles para aceptarlas.- dijo este cruzándose de brazos.
-Sabemos el truco de la galleta Monroe, es un clásico.- dijo George sonriendo.

Jane frunció el ceño.
-No queréis?- preguntó ella a lo owe los gemelos negaron.- Esta bien, supongo que me las tendré que comer mientras miro el espectáculo.- dijo encogiéndose de hombros.

Fred y George se miraron entre sí.
-Qué espectáculo?- preguntaron a la vez a lo que la chica dio un paso atrás.

-Sorpresa!- dijo ella sonriendo mientras se escuchaba la risa de Peeves encima de ellos con un cubo.

El fantasma les tiró lo que había en el cubo llenándolos de una substancia viscosa... más bien caramelo.

Jane abrió la puerta del gran comedor donde estaban literalmente la mayoría de Hogwarts mirándolos en shock.

-El espectáculo que acabáis de hacer por supuesto.- dijo ella riendo.- Gracias por la ayuda Peeves.

-Todo por las bromas!- dijo este marchándose mientras se reía.
-Qué sepas que me parece una tradición!- le gritó Fred pero creo que el fantasma no le escuchó.

-Qué es esto?- preguntó George asqueado.
-Esto, querido George, es caramelo con colorante verde, deberíais ir rápido a daros un baño, cuando se pegue...dudo que os lo podáis quitar...- le dijo ella cruzándose de brazos.

Jane se puso enfrente de Fred y pasó su dedo por el pecho de este, probando el caramelo que tenía encima.
-Delicioso... por cierto, Jane 2/ Fred 1.- dijo con una sonrisa orgullosa mientras se iba a su mesa con sus compañeros.

Fred no quería sonreír, enserio no quería pero solo el echo de que fuera tan buena como sus bromas hacia que le pareciera más interesante.

-Que diablos ha sido eso!?- precintó una voz apareciendo en la sala común de Gryffindor.

-Cállate Ronald.- le dijeron los gemelos a la vez algo cansados.
-Como es posible que os haya humillado!? Sois los gemelos Weasley! Los reyes de las bromas! Demostrarle quien manda!- dijo el pequeño pelirrojo.

De repente una risa hizo que todos miraran a la castaña que se encontraba sentada en uno de los sillones.
-La habéis subestimado por ser una chica, y os ha dado vuestro merecido, dejar de ser tan infantiles y admitir la derrota.- dijo Hermione sin despegar la mirada del libro.

George miró a Fred quien aún pensaba en lo asombrosa que era Jane, sin embargo no se daría por vencido.

Se enteraría quienes eran los gemelos Weasley.