11

313 25 17
                                    

Después de todo lo que pasó en Los Ángeles, las cosas comenzaron a caer en su lugar.

Para superarme y no quedarme estancada ante mi dolor y toda la situación respecto a Drew, decidí que lo mejor sería ir a terapia.

Habían pasado algunos meses, cuatro para ser exacta. En ese lapso de tiempo, mi terapeuta me había pedido que escribiera una carta para desahogar mis sentimientos por Drew; dijo que esa carta sería solo para mí y que cuando estuviera lista, escribiera otra para él y se la hiciera llegar... Ese día era hoy.

La carta a grandes rasgos decía el por qué me alegraba separarme de él, le agradecí los momentos buenos que pasamos y también le expresé los buenos deseos que tenía para él.

Había quedado de verlo en un café cerca de mi trabajo. Esperé cinco minutos y cuando me percaté, Drew ya estaba cruzando la puerta.

Había pasado mucho desde la última vez que lo vi, así que de tornaba raro el tenerlo frente a mi...

—¡Es bueno verte!—dijo una vez que me saludó con un fraternal abrazo y tomó asiento.

—Lo mismo digo.—sonreí...

Nos pusimos al día, comenzamos a hablar sobre nuestra vida laboral, pues por fin, sentía que estaba teniendo una buena racha en mi trabajo.

—Bueno, la razón por la que te cité aquí en por qué tengo que darte algo...—saqué de mi bolsillo del pantalón la carta y se la di.

—¿Qué es esto?—dijo mientras soltaba una pequeña risa.

—Una carta, solo que no la leas frente a mi. Sería incómodo.

—La leeré llegando a casa.—guardó la carta en uno de los bolsillos de su saco.—Zoé...—me miró serio.—Sé que en el pasado y lastimé. Estoy consciente de que fui yo quien arruinó todo, pero si tan solo pudieras darme otra oportunidad...

—Drew... Yo...

—Desde el día que nos dejamos en aquel antro, de verdad mi vida no ha vuelto a ser la misma.—me interrumpió.—Esta vez puedo tratarte mejor de como lo hice en el pasado. Te mostraré que puedo ser un mejor hombre...

Esa labia, la había escuchado antes y no estaba interesada en volver a caer en ello. Si quería "tratarme mejor", ¿Por qué no lo hizo durante el tiempo que estuvimos juntos?

—Andrew... Me halaga tu propuesta.—dije cansada.— Pero me temo que tendré que rechazarla...

—¿Hay alguien más, cierto?—yo me limité a asentir.—¿Es Woosung, verdad?—volví a asentir.

Después de que Woosung se fuera, me di cuenta de que yo también quería estar con él; quería esperar a que yo me sintiera bien del todo para intentar algo nuevo. Llevábamos poco tiempo siendo pareja, pero en ese lapso él me demostraba que lo nuestro le importaba muchísimo, aún a distancia. Eso hacía que mi corazón estuviera seguro de nuestra relación.

—Empezamos a salir hace poco.—le conté.—Y las cosas entre nosotros van muy bien, mejor de lo que podría imaginar.

—Me da gusto oír eso...—contestó—Sé que serán felices juntos.

—Gracias.—respondí y nos quedamos en silencio.—Bueno, creo que es hora de que regrese al trabajo.

—¿Por qué tan pronto?—preguntó algo desanimado.

—Tengo que volver para terminar unos pendientes.—mentí, mi jornada ya había terminado. Busqué una excusa para poderme ir, pues comenzaba a sentirme incómoda.

—Puedo llevarte, si quieres.—insistió.

—No es necesario, mi trabajo está muy cerca de aquí.—comenté y el se levantó, tenía miedo de que me insistiera más.

—Entonces supongo que te veré después.—sentí alivio cuando supe que solo se iba a despedir; en seguida ambos nos dimos un abrazo.

—Así será...—dije para reconfortarlo

Al terminar el abrazo él se quedó en la mesa y yo tomé camino a la salida, no son antes decirle algo más.

—Y Drew... Te deseo mucho éxito, no solo en los negocios, sino en todos los ámbitos de tu vida.—dije sincera.—Y sé que encontrarás la mujer ideal con quién compartirás mucho.

Me dirigí a mi auto y conduje camino a casa.

En casa adelantaba algunas cosas del trabajo, estaba tan metida ahí que no me había dado cuenta de que ya pasaba de media noche.

Lo bueno de esto es que coincidía que era mi día libre, así que si quería, podía pasar toda la madrugada hablando con Woosung.

Estaba a punto de hace una videollamada con él, pero mi computadora comenzó a su sonar iluminando la pantalla con su foto. No dudé en contestarle.

Platicamos sobre el trabajo, él decía que estaban preparando algunas cosas grandiosas pues su regreso musical había sido hace unos días.

...¿Y te dijo algo más?—dijo él preguntando respecto a la carta que le había dado a Drew.

—No, pero quería que volviera con él.—ambos reímos.

—¿Y pensaste algo sobre eso?

—Sí, de hecho esta misma tarde regresamos.—el sarcasmo en mi voz se notaba, Woosung hizo una mezcla de disgusto. Me encantaba molestarlo.—Sabes que miento.

Sonabas muy convincente.—dijo él sarcástico.— ¿Escuchaste “She's In The Rain”?

—¡Obviamente! Es una canción bellísima, estoy segura que tus fans ya la adoran.—contesté.—¿Habrá promociones hoy?

Nope, pero una estación de radio nos invitó a su fiesta de aniversario.—comentó— Así que pasaremos un rato ahí, de hecho no tardamos en irnos.

Comentó unos detalles más sobre ese evento, también estaba consultando conmigo si su atuendo sería perfecto para esta ocasión.

Él seguía batallando para elegir accesorios, cuando de repente pude observar que su puesta se abría.

—¡Woosung, cariño! ¿Tardarás mucho? Ya me quiero ir, se nos hace tarde.—decía una chica quien asomaba su cabeza por la puerta... Estaba confundida y apunto de llorar.

—¿“Cariño”?—Woosung al oírme sacó a aquella chica de su habitación y se acercó rápido a la pantalla.

¡No es lo que parece! Zoé, te juro que no es lo que tú piensas.—decía nervioso.—¡Puedo explicarlo!

—Perfecto, espero que tengas buenos argumentos...—dije algo enojada.—...Y que me digas todos, porque ahora mismo voy a Corea a qué me expliques.

Corté la llamada y fui a mi habitación a empacar lo necesario. Cuando terminé, compré el primer vuelo para hoy a Corea. Abrí la puerta y no me percaté que había despertado a Lauren.

—¿Qué carajo haces?—dijo adormilada.

—Voy a Corea a que Woosung me explique por qué había una chica entrando a su habitación.—mis palabras hicieron que Lauren abriera los ojos.

—¡No puedes ser así de impulsiva! ¿Segura que necesitas ir?—dijo ella intentando que entrara en razón, pero no me importaba.

—Yo siento que sí lo es, por que en serio algo así no puede estar pasando.—dije con tanto estrés que estaba a punto de vomitar.

—Bueno, entonces déjame llevarte al aeropuerto. No puedo dejar que te vayas así como así.

Impulsivamente o no, las cosas no se iban a quedar así...
Woosung me iba a oír.

🎉 Has terminado de leer 𝐜𝐚𝐥𝐢𝐟𝐨𝐫𝐧𝐢𝐚 ♡ k. woosung 🎉
𝐜𝐚𝐥𝐢𝐟𝐨𝐫𝐧𝐢𝐚 ♡ k. woosungDonde viven las historias. Descúbrelo ahora