6.Hermanas

3 0 0
                                    

Tal algún día lleguen a perdonarme por ser tan mala hermana.

Sofía casi tiene diez y Juli tres, y desde que nacieron me enamore perdidamente de ambas.

Cuando Sofi nació, tan solo tenía siete años, y aún así, supe que quería cuidarte por toda la vida, verte sonreír y verte siempre feliz.

Pero nunca lo cumplí, por mi culpa has sufrido demaciado, soy alguien, explosiva, que te grita y golpea cuando no me obedeces, te excluyó de todo lo que tenga que ver conmigo, por qué me da miedo explotar y, golpearte otra vez, hacerte moretones y que llores.

Cuando eso pasa me siento un asco, y soy una completa mierda, eres mi hermana, jure protegerte, pero simplemente no me controlo bien y tú pagas.

Tu pagas por mi locura Sofía, espero que algún día me perdones.

Cuando Juli nació, ya era un poco mayor, tenía, creo, entre 12 o 13 años, me quedé prendida de sus mejillas rosadas y regordetas, nos parecíamos demaciado y al mismo tiempo, éramos tan diferentes.

Quise pasar tiempo con ella, quise, encerio quise, quería abrazarla y darle besitos en sus gigantescas mejillas.

Pero tampoco pude, y está vez, no fue por mis problemas mentales, si no por ella.

Ella me prohibia tocarte, como si fuera una muñequita de porcelana, eras pequeña y frágil, pero tampoco estaba en mi plan dejarte caer al suelo, solo quería sentirme como tu hermana mayor.

Me recriminaba cada que podía que estaba sucia y que no tenía que tocarte, y cuando alfin podía, me miraba como si quisiera matarme.

Y yo quería matarme.

Por mi debilidad, falte a todos los cumpleaños de Juli y nisiquiera tenía valentía para llamarla en ese día, a veces pensaba que ella, nisiquiera sabía de mi existencia o me recordaba.

Por culpa de ella me perdí mucho de el crecimiento de Juli.

Pero también es la mía.

Tal vez, algún día me lleguen a perdonar hermanitas, encerio lo siento.

Y espero, que cuando encuentren este libro, y ya sean mayores, puedan llegar a entenderme.

Tal vez algún día...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora