Kohaku consígueme una esposa

Capítulo 22

Encuentros inesperados 

–Kohaku Pov– 

Caminaba por las grandes calles de Nueva York, aún me quedaba 20 minutos para poder ingresar al trabajo y deseaba reposar el almuerzo; me senté en una banqueta del parque con mirada al gran lago, una suave brisa jugó con mi cabello anunciando la próxima temporada, otoño, pronto tendría que usar abrigo para cubrirme del frío 

–¿Kohaku?–una voz conocida me habló y lo vi frente mío 

-¿Mozu?–me levanté y me acerqué a abrazarlo– ¿Qué haces aquí?–me sorprendía el verlo en este lugar 

–Estoy trabajando en una de las sucursales del señor Sasaki– 

–Vaya... No tenía ni idea de eso–absolutamente me sorprendía 

–¿Y cómo estás? Hace mucho no hablamos ni nos vemos ¿el trabajo de presidenta te deja sin tiempo?–lo miré asombrada ¿cómo...?–Luna me dijo–y como si la llamara con la mente apareció y tomó el brazo de mi amigo... 

"¿Es acaso un anillo de compromiso?" 

No podía desviar mis ojos de esa gran joya 

–¿Te gusta?–dijo la señorita con una gran sonrisa enseñándomelo mejor 

"Este no es el anillo ¿le regaló otro?" 

–Es precioso–susurré, se me estaba encogiendo el corazón 

–Gracias, es muy especial para mí–su sonrojo era evidente y tan sólo sonreí con hipocresía, Senku nuevamente se lucía 

–Oh Kohaku, ahora que por fin nos vemos te quiero entregar algo–abrió el gran abrigo que llevaba y sacó un sobre que luego me entregó 

–¿Qué es?–lo reparé y lo abrí, era una invitación preciosa, con bordados dorados y una letras negras encursiva 

Dios unió nuestras vidas y señaló el espacio donde podríamos construir nuestro camino. Hemos decidido aceptar el desafío y emprender juntos la increíble aventura de vivir. Deseamos con todo el corazón poder contar con tu presencia para que juntos podamos celebrar nuestra unión

Yamamoto y Sasaki 

-¿Qué?–mi asombro era evidente y los miré– ¿Ustedes...?–los señalé y asintieron 

–Nos vamos a casar–dijo Mozu con alegría, palidecí 

– ¿Y Senku?–prácticamente supliqué 

–¿Senku? ¿Él no está saliendo contigo?–la pregunta de Sasaki me removió el corazón y me hizo sentir una mierda, negué con la cabeza 

–Ese idiota–susurró Sasaki, al parecer ella sabía algo que yo no, aunque ahora eso era lo que menos importaba, tenía que hablar con él 

"¿Me perdonará después de lo que dije?" 

–Es mejor que me vaya, tengo trabajo y ustedes están como ocupados, ah, felicitaciones por la boda– dije y me retiré rápidamente, tenía que hablar con él urgentemente