⸙12

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DongMin no quería ir a su instituto

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DongMin no quería ir a su instituto. Lo comenzó a odiar desde hace unos 10 minutos, donde tuvo que separarse del alfa estando tan cómodos en la cama y prepararse para no llegar tarde. Así es como el Omega se colocaba su saco azul marino y encima un gran abrigo negro, refunfuñando comenzó a bajar las escaleras con cuidado, pues caer rodando es lo que menos quería.

—¡DongMinnie!—el menor alzó la mirada hacia la puerta mientras se sostenía de la barandilla con susto. Ahora el instituto no era lo que odiaba.

— MJ...— DongMin hizo un puchereo enfadado.— Me asustaste, tonto.

—Uy, tonto.— lo imitó pero con la voz más aguda. DongMin lo ignoro, aún quedaba un poco de buen humor en su sistema y no quería que su primo lo arruinara.— Vine de muy lejos para ir juntos al instituto, ¿Y así me pagas?

— Vamos a desayunar, tengo hambre.- escucho la risa del Omega mayor y pronto ya se encontraba a su lado molestándolo. DongMin apresuraba sus pasos para llegar al comedor y MJ ya comenzaba a trotar.

— ¿Están haciendo una carrera?— el rubio miro divertido a los dos omegas que habían llegado corriendo.

— Hyuung.— DongMin uso su tono meloso, como si estuviera haciendo aegyo.— Dile a MJ que no me moleste.— el menor se sentó en el lado izquierdo de la mesa dos sillas después de la punta. Sanha no sabía que hacer en ese momento y MJ volvió a molestar al menor al no recibir alguna respuesta del rubio.

— Dime, Minnie, ¿Porqué estás aquí de nuevo?—MJ se sentó a un lado del menor mientras comenzaba a picar su mejilla.

—No te diré.— DongMin rendido río un poco por lo molesto que llegaba a ser su primo.

— Dime...— Siguió insistiendo y esta vez DongMin solo reía sintiendo sus mofletes hundirse y tocar sus dientes.

— Ya déjalo, MJ.— el menor sonrió aliviado a MinHyuk, MJ en cambio dejo de molestar comenzando a quejarse con su hermano siendo totalmente ignorado cuando el beta empezó a entablar conversación con el más alto. DongMin le saco la lengua cuando esté le volteo a ver.

— Infantil.

— infintil.

— No molestes.

— Ni milistis.

— DongMin, yo ya pare de molestar.— Los primos comenzaron de nuevo a pelearse más se detuvieron cuando la anciana beta entró al comedor.

— Buenos días — Todos respondieron amables entregándole una sonrisa a la dulce beta.—  ¿Qué desean desayunar?

—  Batido de chocolate y postre... de chocolate— DongMin sonrió como un niño y la mayor soltó una risa enternecida.

— Anotado.—Le beta volvió a preguntar a los demás y cuando recibió sus respuestas, salió a la cocina a traer el desayuno.

Dulce ᵇⁱⁿʷᵒᵒDonde viven las historias. Descúbrelo ahora