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Alexander...

Me despierto a la madrugada por culpa de mi teléfono que no deja de sonar, me doy cuenta que estoy agarrando a Urano de la cintura y que mi cara está entre su cuello y el hombro, tiene muy rico olor el enano este.

_ mierda_ susurro separándome de él tratando de que no se despierte, me levanto y agarro mi teléfono que lo había dejado en el piso, veo que es un mensaje de uno de marcos que avece el organiza las peleas y dice que quiere que este en la que viene, van a dar mucha plata por el ganador así que no lo pienso y le digo que sí.

Me vuelvo a acostar y le doy la espalda al enano, me vuelvo a dormir.

Me despierta un olor a comida, abro los ojos y noto que ya es de día pero como están las cortinas abajo no entra mucha luz, me siento en la cama y veo mi teléfono en la mesita en vez del piso donde lo había dejado, lo agarro y veo que son la una y media del mediodía.

Tengo que ir a buscar ropa a mi casa.

Me destapo mientras me siento en la cama, me levanto y camino hacia una de las puertas, la abro encontrándome con Urano quien tiene ojeras de tonos muy oscuros y un tono de piel muy pálido.

_ buenos días_ dice tímidamente, cuando se aleja unos pasos para tener una distancia y verme a la cara.

_ ¿Qué tiene de buenos si lo primero que veo es a vos?_ pregunto con el ceño fruncido y la voz roca por el sueño, le paso por al lado y bajo las escaleras sin importarme que siga sin camisa. Sigo el olor a comida y veo que hay dos platos con ravioles, me siento en la mesa y veo que viene el enano, se sienta en el otro lugar que está al lado mío, yo me senté en la punta y el al costado.

Empiezo a comer, pero noto que él come de apoco, en cambio yo trago en cada bocado, además yo tengo boca grande, entonces me entra más comida. Él come como un jodido pajarito, es débil comer así, no lo entiendo, hace que me enoje cada que lo veo come así, cada que mueve tan delicadamente sus labios.

_me vas a tener que ayudar a ir a mi casa a buscar ropa_ le digo cuando termino de comer y el solo va por la mitad del plato. Necesito que el venga conmigo porque como no tengo la camioneta necesito que el lleve algo, aunque sea una campera.

_ En, bue-no_ asiente y se aparta de su plato corriéndolo un poco agarrando su baso que tiene agua.

_ ¿no vas a comer más?_ le pregunto señalando su plato con mi barbilla mientras me cruzo de brazos, el niega y sigue tomando de su agua_ tendrías que comer más, por eso estás tan flaco y desnutrido, por eso tienes esas ojeras_ lo acuso y veo como se le sale una lágrima mientras se levanta lentamente y deja su plato en la mesada.

_ así es mmi cuerpo_ se excusa lastimeramente, bajando la cabeza y se garra la panza mientras se encoje en sí.

_ es así de desnutrido porque no te alimentas como tendrías_ digo serio mirándolo mientras que lo señalo de pies a cabeza, me tendría que callar, su papá también es así menudo. Además yo como demasiado, más allá que entrene y demás cosas, yo como por dos personas seguramente.

_ Sí que me alimento_ susurra tratando de convencerme y yo me río sin gracia mientras niego con la cabeza.

_ Mentiroso, como no te alimentas estas débil, pareces un maldito zombi, te ves horrible_ lo digo con tanto asco que veo como de sus ojos salen gruesas lágrimas, más que normalmente le salen_ lo único que sabes es llorar como un nene de cinco años estúpido_ hablo fuerte y se pasa el dorso de su mano por los pómulos tratando de borrar el camino de las lágrimas que salieron de sus hermosos ojos azules_ o dejas de llorar o te voy a dar razones para llorar con ganas_ lo amenazo mientras me levanto con mi plato en mano acercándome a él, cosa que hace que corra rodeando la barra por el otro lado y valla hacia una puerta que no había notado y se encierre.

Cruel (gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora