Elección ~Yoonmin

Capítulo 16: No me sueltes.

-Jiminie... yo... en verdad lo siento.

"¿Vez? Era evidente lo que iba a suceder, jamás se fijaría en serio en alguien como tú. Eres un idiota Park Jimin. Y para peor ahora tu Hyung se está disculpando por algo por lo que no debería, ¿Y gracias a quién? Por supuesto que gracias a ti" De nuevo esa voz resonaba en su cabeza, siendo la culpable de que sus mejillas fuesen bañadas por las lágrimas que corrían sobre estas.

-No se disculpe, por favor- dijo casi en un susurro, sintiendo el nudo en la garganta que lo hacía sollozar-Solo hace que me sienta peor-limpio bruscamente las lágrimas que seguían cayendo de sus ojos, incapaz de mirar directamente al rostro contrario-Bueno, creo que ya está todo aclarado, lo que pasaba entre nosotros termi- no pudo acabar con lo que estaba diciendo, ya que fue interrumpido por los brazos de su Hyung, uno de ellos tomándolo por la cintura y el otro acariciando sus cabellos.

-Lo siento, en verdad lo siento mi Jiminie-Jimin se tensó, que el mayor se disculpara por no corresponderle lo estaba lastimando incluso más.

-Ya le dije que...

-Lamento ser tan estúpidamente lento y no habértelo dicho antes- Yoongi sintió como sus propias mejillas también se humedecían, no pudo evitarlo, estaba guardando esas lágrimas desde hace mucho.

-A que se...

-Te amo, Jimin- soltó un largo suspiro. Pudo sentir como una gran carga por fin era liberada- Te amo en todo el sentido y significado que pueda existir para esa palabra. Amo tu risa que me alegra hasta los más oscuros días; amo tus pomposos y suaves labios capases de hacerme adicto a ellos; amo tu voz, tanto cuando hablas como cuando cantas, cuando la escucho siento como si fuese la más suave y hermosa melodía; Amo tu hermoso, esculpido y deseable cuerpo; amo como con solo una mirada me das las fuerzas y esperanzas que necesito para continuar, sin importar lo pesado que sea todo. Amo una y mil cosas más de ti, mi Jiminie. Yo...-Se despegó ligeramente del menor, solo para tomar sus mejillas y mirarlo directamente a los ojos, de donde seguían saliendo lágrimas, pero estaban acompañadas de una hermosa sonrisa, volviéndolos dos tiernas líneas- Estoy malditamente enamorado de ti, Park Jimin.

-Hyung...

-Y ahora qué sé lo que sientes, jamás te dejaré de nuevo. - Yoongi acarició suavemente las mejillas del contrario, contemplando lo hermoso que era, sin poder creer que este momento realmente se haya hecho realidad.

Jimin ya no tenía noción de nada, menos de sus actos, solo hizo lo que su cuerpo le pedía a gritos. Estampó sus pomposos labios sobre los finos del mayor. Había anhelado tanto ese momento, en el que su Hyung le dijese aquellas palabras, sin embargo, con el tiempo, fue perdiendo toda esperanza. Pero ahora, sentía que su corazón estaba a punto de salirse de su cuerpo. Su felicidad era tal que nublaba toda pizca de duda que existiese en su mente. Quería quedarse así, justo como estaban. Encerrarlos juntos dentro de una caja de cristal, donde nada pudiese afectarlos, donde pudiesen ser felices sin que nada más importe. Solo quería que ese sentimiento que llenaba todo su ser, permaneciese para siempre.

Yoongi estaba igual o incluso peor que el contrario. Ni siquiera podía retener otro pensamiento que no sea lo bien que sabían los labios de su Jiminie. Tampoco quería pensar en otra cosa, quería disfrutar de ese momento lo más posible. Si, se habían besado antes, sin embargo, esta vez era diferente. Podían sentir en cada vaivén de sus bocas, la confirmación de que todo lo que el otro proclamaba era cierto. Al sentir el aliento ajeno chocar contra sus pieles, parecían ser recorridos por la brisa más refrescante y cautivadora. El chasquido provocado por la unión de sus belfos era la música que dirigía la danza de los mismos.

Lamentablemente los escases de aire les hizo tener que separarse. Juntaron sus frentes, ambos con los ojos cerrados, de donde ya no emanaban lágrimas, compartiendo un silencio que era interrumpido por sus fuertes respiraciones.