Keigo los había llevado a un restaurante italiano más antiguo para cenar y no había estado en mucho tiempo. El viaje había sido bastante incómodo, todo el mundo estaba en silencio, Shoto siempre mirando por la ventana cada vez que Dabi echaba miradas hacia atrás en él. Dabi no podía evitar preguntarse en qué había estado pensando mientras miraba hacia el cielo oscuro. Dabi todavía se preguntó esto incluso después de que estaban sentados en una cabina dentro del restaurante.
El camarero les había dado sus bebidas, y tomó su orden, y el silencio todavía se comía a Dabi. Se sentó junto a Keigo y Shoto estaba frente a él al otro lado de la cabina. Shoto tenía el codo sobre la mesa, apoyando su barbilla sobre la palma de su mano, mirando por la ventana junto a ellos. Dabi consideró muchas veces preguntarle qué estaba mal, pero temía que le molestara, ya que después de todo no era asunto suyo saberlo. Aún así, eso no impidieron que Dabi quisiera saber.que mirar la cara de Shoto lo hizo preocuparse.
Parecía que estaba barnando el peso de todo el mundo sobre sus hombros, y Dabi quería ayudar.
Dabi miró a Keigo que estaba mirando a algún lugar en el restaurante. Dabi agarró su mano, haciéndole girar para mirarlo. Dabi le dio una ligera sonrisa antes de centrar su atención en Shoto.
—H-Hey Shoto?— Dabi gritó mansamente.
Shoto miró a Dabi. Levantando una ceja.
—¿Estás bien?—Preguntó.
Shoto miró a Dabi antes de sonreír tranquilizador. —Sí, estoy bien. Sólo... mucho en mi mente — Sus ojos se desviaron hacia Keigo y se estrecharon. —Tengo un montón de preguntas que todavía quiero hacerte.
Keigo sonrió ligeramente como si lo tomara como un desafío. —Entonces pregunte
Shoto miró ligeramente. —Bien, y es mejor responder con sinceridad a todo!— Dijo en serio.
Keigo asintó con la nación una vez.
Su resplandor se convirtió en una sonrisa. —¿Siempre has sido profesor? — Shoto comenzó. Mirando fijamente a Keigo.
Keigo miró. —Sí.
—¿Alguna vez has cometido un delito grave?
—No.
—Drogas hechas?
—No.
—¿Fumas?
—A veces.
—Beber?
—De vez en cuando
Shoto comenzó a mirar a él. Luego miró a Dabi y le dio una mirada de desaprobación. Al menos Keigo estaba siendo honesto. Cuando Shoto lo miró continuó interrogándolo.
—¿Cuáles son tus intenciones con Dabi?— Shoto preguntó.
—Si crees que planeé aprovecharme de él, entonces estás muy equivocado. Nunca lastimaría a Dabi de esa forma— Keigo retrocedió — No tengo ninguna intención con él ahora, sólo disfruto estar a su alrededor— respondió honestamente.
Shoto estudió Keigo antes de continuar. —¿Tienes hermanos o hijos?
—No.
—¿Tienes alguna... piercings extraños?
Keigo miró, claramente se molestó por todas las preguntas. —No.
—Tattoo's?
—No.
Antes de que Shoto pudiera preguntar cualquier otra cosa, Dabi interfirió. —Creo que son suficientes preguntas, ¿no crees?
Shoto suspiró. —Muy bien, bien...— volvió su atención por la ventana para mirar un poco más.
