Eran las seis y tantos de la mañana, JinKi estaba en la sala junto a una de las ventanas con un café en la mano, después de tener sexo con su marido el dia anterior no pudo conciliar el sueño y no quería tomar algo frente a MinHo así que se quedó ahí sin poder cerrar los ojos. Temprano por la mañana se levantó, no tenía hambre, se sentía cansado pero no tenía el sueño suficiente como para dormir plácidamente. Estaba sentado en el piso, la madera de este lo mantenía cálido, afuera estaba lloviendo y su corazón se sentía roto, como si alguien lo hubiera tomado y lo hubiera lanzado desde el décimo de un edificio. Llevaba solamente un suéter tejido por la madre de MinHo y unos boxers, aún así no sentía la necesidad de llevar más ropa. Dio un gran y profundo suspiro, se levantó de donde estaba y salió fuera, sus pies descalzos sentían las gotas de lluvia aterrorizar en ellos, sus rodillas se volvieron color rojo, al igual que su rostro. No penso que podría enfermarse, JinKi camino y la lluvia caos sobre el, las gotas en cuestión de segundos lo envolvieron y ocultaron las lágrimas que brotaban de su rostro, el frío que sentía en ese momento era nada comparado al frío que sentía su pecho.
MinHo dormía tranquilamente cuando escucho un enorme y escandaloso trueno debido a la lluvia, tenía frío así que intento acercarse al mayor 0para buscar calor con su cuerpo pero la cama estaba vacía, de un segundo abrió los ojos y se reincorporó, miró hacia todos lados y su esposo no se encontraba junto a él o en la misma habitación. Rápidamente se quitó las sábanas de encima y salió en busca de su hombre. Saliendo de la habitación le llego el olor a café, se dirigía hasta la cocina cuando al pasar por la sala pudo visualizar a JinKi tras el ventanal que lo resguardaba del frío y la lluvia, JinKi estaba ahí, de pie, únicamente con un suéter y unos calzoncillos, su cabello todo mojado escurría por su rostro y su cuello, en sus pies había lodo de aquel húmedo pasto de su pequeño jardín, MinHo se le quedó mirando por algunos minutos, si bien, nunca había visto a JinKi hacer ese tipo de cosas supuso que estaría meditando así que se dirigió hasta el cuarto de baño y preparo la Tina con agua casi hirviendo, coloco algunas velas aromáticas y esferas efervescentes. Espero a que se llamara todo para después salir por su esposo, tomo una sombrilla y fue hasta el, sus pestañas estaban inclinadas hacia abajo por pesadas gotas de agua en ellas.
"Quiero un bebé" pidió JinKi al sentir a MinHo junto a él.
"¡He dicho que no te cansarás! Acepte que salieras con un hombre porque pensé que estabas confundido pero no voy a permitir que te cases" sentenció en señor Choi furioso.
Y no estaba enojado por nada, su hijo menor se casaría con un hombre, suficiente tenía con saber que su primogénito se había divorciado y ahora su pequeño hijo estaba planeandose casar con un hombre!?
"Hijo, escucha a tu padre, nosotros solo queremos lo mejor para ti. ¿Cómo se supone que seré abuela si te piensas casar con un... con u...?"
"Hombre mamá, si! JinKi es un hombre, lo amo y quiero vivir el resto de mi vida junto a él, además, ¿quien dijo que seriamos padres?"
"¿Que dirá la gente cuando se entere?"
"¡A ustedes solo les importa lo que diran los demás, pero a mi no y he dicho que me casare y tienen dos opciones ser parte de mi vida y mi felicidad o quedarse fuera de ella dos!"
"Quiero un nieto MinHo, lo único que te pide tu pobre madre es un nieto y aquel muchacho no te podrá dar el hijo que tanto esperas"
"Pues tienes dos nietos y sin embargo no los quieres ver por lo que dirá la gente, así que no esperes de mi un nieto porque sabes que no quiero hijos y JinKi tampoco. Me voy"
"¿Un bebé?" Pregunto sorprendido, en aquellos años, nunca habían mencionado ser padres, MinHo sabía del pequeño trauma que tenía su esposo y él simplemente no se sentía con la necesidad de tener un bebé.
"Si, quiero ser papá, quiero un bebé" volvió a pedir el mayor.
"Pero..."
"MinHo, hemos estado casados por casi 10 años, tu trabajas y me dejas solo y no quiero estar solo, quiero un bebé"
MinHo sabía lo solo que se podía llegar a sentir su marido, desde que se casaron no permitió que el mayor trabajara puesto que no era necesario, al principio era la razón de sus principales peleas pero con el tiempo simplemente se acostumbraron a vivir de esa forma.
"Entiendo que te sientas solo pero..." JinKi corto con los que estaba diciendo cuando le miro por primera vez en toda aquella mañana. "Esta bien, tengamos un bebé, pero primero entra a la casa, te prepare la bañera así que toma un baño en lo que preparo el desayuno."
Sin ninguna expresión en el rostro el mayor se alejó sin aceptar la sombrilla que su marido le ofrecía, se baño, se vistió y bajo a desayunar, al parecer MinHo no iría al trabajo, este le comento que había pedido algunos días para poder estar con él y descansar del agotador trabajo que tenía últimamente. Una vez terminados los alimentos JinKi se levantó de la mesa y se dirigió hasta el lavabo, empezó a fregar los platos sucios cuando unos brazos lo sujetaban desde su espalda. Su cuello era besado por su esposo haciéndole desear más. "Espera" pidió, sin embargo MinHo hizo caso omiso al pedido del mayor.
"¿Que? Debemos empezar a trabajar al bebé, porque este no se hará solo" bromeo el menor,provocando algunas risas por parte del mayor. "¡Te voy a preñar Lee JinKi!"
En aquel momento MinHo volvió a ser aquel esposo raro y loco que tanto amaba JinKi, su estómago dolia de tanto reír al escuchar cada ocurrencia que el otro decía, ni siquiera había terminado de fregar los trastes sucios cuando ya hacía sobre la cocina siendo penetrado con gran intensidad y fuerza. Cuando eran jóvenes llegaba a tener sexo en donde fuera y aquella situación le hacía recordar aquella vez que lo hicieron en la casa de JongHyun, específicamente en la cocina. En aquel entonces la madre del amigo de su esposo había salido junto a su hermana a un viaje por lo que JongHyun se quedó solo, pero no dudó en llamar a MinHo, el cual llevó a JinKi, se divirtieron los tres, comieron, jugaron hasta que se cansaron y fueron a dormir, pero a las cuatro de la mañana algo había despertado a JongHyun, el cual con miedo busco el lugar donde provenían aquellos ruidos de platos rompiéndose hasta que pudo visualizar a los calientes de sus amigos teniendo sexo en sobre su cocina... Desde aquel día no los a vuelto a invitar a quedarse en su casa.
Cocina, comedor, salón de star todos los rincones de la casa eran excelentes para tener sexo a cualquier hora, ambos estaban recostados en el piso, completamente desnudos, con una respiración agitada y transpirando. Miraban juntos hacia el techo de su hogar, MinHo estaba recargado en el brazo del otro buscando alguna comodidad.
"A este paso realmente quedaré preñado" mencionó JinKi entre algunas risitas, su cuerpo estaba agotado y sudando pero no le importaba, MinHo había vuelto, su esposo y mejor amigo había vuelto y estaba feliz, eso quería decir que no se iría, que se quedaría junto a él, adoptarían a un bebé y finalmente estarían juntos de nuevo, finalmente serian una familia como los demás.
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Prometí amarte hasta el final.
FanfictionJinki y MinHo están casados desde hace 15 años. Una visita a la oficina de Min le hace darse cuenta que sus horas extras no son debido al trabajo. Pero Jinki está tan enamorando que no le importa ser lastimado, no mientras aquel hombre con quien se...