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✧ ᴛ/ɴ, ᴛᴜ́ ɴᴏᴍʙʀᴇ ✧

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ᴛ/ɴ, ᴛᴜ́ ɴᴏᴍʙʀᴇ

La luz de la alberca se torno de un color rojizo, segundos después era moradizo, esos dos colores aparecían causando una vibra más romántica pero atrevida.
Sus manos en mi cintura bajo del agua y las mías en su cuello y torso desnudo, besándonos como nunca antes lo habíamos hecho con alguien era una sensación que no quería dejar de sentir jamás. Nos separamos por falta de aire, él quiso continuar de inmediato el beso pero yo alejé mi cabeza.

¿Qué sucede? —preguntó desconcertado.

Slow Bautista, slow, we have all night to go crazy. (Lento Bautista, lento, que tenemos toda la noche para enloquecer) contesté pasando mi dedo índice por sus labios, recorriéndolo por su mandíbula y terminando por sus clavículas.

Tú me volviste loco desde el momento uno... No puedes tener así...

Just enjoy. (Solo disfruta).

Ambos sonreímos, Mario salió de la alberca solamente para traer la botella y copas, regreso colocando todo a la orilla de la alberca, el color de luz de la alberca había cambiado a un tono azul causando paz entre nosotros.

¿Tienes pareja Mario Bautista? fue la primer pregunta que me llegó a la mente.

¿Por qué el interés? preguntó curioso.

No quisiera meterme en problemas, no soy ese tipo de personas que aprueben la infidelidad, me lo han hecho y se lo mucho que puede doler. contesté sincera.

¿Eso quiere decir que tu no tienes pareja? preguntó con una ceja levantada.

No, en estos instantes de mi vida prefiero ser libre y disfrutar... Se que si tuviera una pareja no la podría respetar, especialmente en estos días...

¿Por qué? se acercó a mi de manera coqueta —¿Por mi?

Exactamente... Si tuviera pareja, le seria infiel contigo porque es algo inevitable teniéndote a mi lado... Por eso, prefiero ser sincera con las personas que he estado... Pero nos desviamos bastante del tema, ¿tienes pareja?

No, no tengo. Estoy en la misma posición que tu, aproximadamente hace uno o dos años terminé con mi ex, a partir de ahí decidí no tener algo formal hasta que nacieran de nuevo esas ganas de amar...

Perfecto... Estamos en la misma sintonía...

Se acercó acorralándome con ambos brazos contra la pared de la alberca, la luz se había tornado rojizo nuevamente. Ambos nos mirábamos, nadie decía una palabra, el silencio era algo satisfactorio, con nuestras miradas nos decíamos todo lo que queríamos hacer. Acercó su rostro al mio, pero no nos besamos, nuestras respiraciones chocando y narices rozándose. Yo hacia como si fuera a acercarme a besarlo pero no lo hacia, nada más lo provocaba, roce mis labios contra los suyos, se notaba que ya estaba desesperado porque no lo besaba, era gracioso pero tentador ver su rostro.
Iba a continuar haciéndolo, hasta que él colocó su mano en mi nuca, la subió un poco llegando a mi cabello, ahí enredó sus dedos con mi cabellera causando un leve gemido por mi parte, él sonrió de inmediato.

Touch me when it's time to do it. (Tócame cuando sea el momento de hacerlo) mencioné después de haber hecho aquel gemido, eran las mismas palabras que le había dicho en la fiesta donde nos conocimos.

And now is the time to make you mine. (Y ahora es el momento de hacerte mía).

Ambos sonreímos en ese momento, ese era una señal de que era hora de que todo sucediera entre nosotros.
Él sin pedir permiso alguno, comenzó a besarme, era un beso con desespero, no era como el primero que comenzó siendo romántico, este era todo lo contrario.
Mis piernas enrolladas en su cadera, sentí como una de sus manos paso haciendo la silueta de todo mi cuerpo, hasta llegar a mis glúteos, el cual apretó, yo volví a gemir en medio del beso, él sonrió de inmediato.

¿Es momento de saltarnos todo el recorrido por tu casa y poder pasar a tu habitación?

Yes, please. (Si, por favor)

Ambos salimos de inmediato de la alberca, Mario tomó la botella de MÖET y yo las copas de champagne, tomados de la mano nos encaminamos hasta el segundo piso, entrando a mi habitación. Yo acomodé a un lado las copas, miré a Mario quien él observaba minuciosamente la habitación, tome un pequeño control y con ese mismo prendí las luces que se encontraban por toda mi habitación, colocando el color rojo y coloqué música, Mario me observó con una media sonrisa.

¿Todo bien? pregunté.

Más que bien, ven aquí. —yo me acerqué, él con una sonrisa posó sus manos en mis hombros —Quedate quieta y simplemente disfruta...

Yo obedecí a lo que él me dijo, mi corazón se disparo más de lo que ya estaba, comenzó a acariciarme con el dorso de su mano, cerré los ojos para disfrutar el tacto, sentía como acariciaba mi otro brazo con la yema de sus dedos, colocó su mano por mi espalda, sentí como poco a poco comenzó a bajar el cierre del vestido, así hasta que este resbalara por todo mi cuerpo terminando en el piso quedando en ropa interior, él paso su mano por mi espalda, yo sentí un escalofrío por sentir la frialdad de su mano.

Tranquila, que muy pronto dejarán de estar frías... contestó con una sonrisa juguetona.

Colocó su mano en mi cintura desnuda, acercándome a él, yo coloqué mis manos en su pecho desnudo, iba a bajar la mirada para admirar sus tatuajes pero él no me lo permitió, ya que tomo mi mandibula y comenzó a besarme, era un beso desesperado, con necesidad.
Caminamos hasta la cama sin separarnos de aquel beso, ambos caímos a la cama, él cayo encima de mí, quería comenzar a besar mi cuello y de más, pero yo lo interrumpí.
Hice un movimiento causando que yo quedará encima de él, yo sonreí al ver su rostro sorprendido.

I like that you are not shy. (Me gusta que no seas tímida)

Yo no se con que clase de chicas te metías y no me interesa saberlo, pero aquí... I am the one who takes control. (Yo soy la que toma el control)

Él se mordió el labio inferior, me senté encima de su miembro, el cual ya estaba presente, hice movimientos circulares encima de este. Él de vez en cuando soltaba jadeos.

Dejame hacerte mía, por favor... rogó Mario, realmente estaba desesperado.

Mario... Eres muy acelerado, aprende a tomarle aprecio y valor a lo que tienes, porque cuando ya no esta en tus manos es cuando comenzamos a desearlo como nunca...

Él se quedó callado, tenía razón en mis palabras, por eso mismo él no quiso insistir.

Dejame apreciar tus tatuajes...

Dije pasando mi dedo índice por el tatuaje que esta en su garganta, para acercarme y besarlo, besé cada centímetro de aquel tatuaje, sentí como la piel de Mario se erizaba. Mi lengua paso por encima de la ilustración que tenía plasmada en su garganta. Las manos de Mario se fueron a mis glúteos los cuales apretó al sentir mi lengua.

Tranquilo... Que todavía me faltan más tatuajes...

Comencé a bajar un poco para hacer exactamente lo mismo con los tatuajes que se encontraban en su pecho y brazos.

Ya no tengo tatuajes más abajo... comentó Mario al ver que ya no encontraba que más hacer.

Ahora es momento de apreciar todo tu físico...

Mario no dijo nada, no quiso interrumpirme nuevamente, por lo que yo me coloqué a la altura de sus rodillas sentándome en estas, comencé a desabrochar su cinturón y bajé su cierre, bajando un poco su pantalón; mire su boxer color negro, pero el cual tenía un bulto bastante notorio.

Esta noche, seria la mejor de todas y donde comenzaría mi perdición por Mario Bautista.

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⏰ Última actualización: Feb 18, 2021 ⏰

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