Lee Minho ama las películas, doramas y todo lo que tenga que ver con el romance. Un día el destino o una fuerza desconocida lo mete a uno de sus doramas favoritos.
Un dorama muy cliché, lleno de cosas clichés. Los estereotipos, los musicales. ¿Podrá...
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Capitulo quince: Aclaraciones parte 2.
Cuando llegaron se encontraron con varios pares de ojos mirándolos. Los amigos de Jisung le observaron confundidos y también algo molestos, pero se limitaron a ignorarlos.
Jisung tomó la mano de Minho para llevarlo hasta su habitación también pasando de ellos.
— Parece que es algo grave — susurra Minho subiendo las escaleras mirando las paredes llenas de fotografías de aquellos chicos.
— Uh, si. Te lo dije — habla Jisung abriendo la puerta de su habitación parandose en seco — Maldita sea... — Minho también se detiene al darse cuenta de lo que habla el mayor.
La habitación se encontraba en un estado lamentable: la cama volcada, la ropa echa trizas, el mueble y todas sus pertenencias como perfumes, cremas y discos rotos en el suelo.
— Jisung... — Minho le toca el brazo sintiéndose mal.
— No importa — se encoge de hombros mirando la puerta del baño — Iré a darme una ducha, lamento el desorden — se acerca a la cama arrugando la nariz — Hijos de puta — la habitación tenía una mezcla de perfume con orines — Lo siento no sé dónde podrías acomodarte.
— Estoy bien aquí — le sonríe un poco — Ve a darte una ducha — el mayor suspira negando.
— Primero tengo que arreglar esto, lo siento Minho. No sabia que harían algo así — se rasca la nuca — en realidad me avergüenza mucho esto.
— Fue mi culpa, ¿Cierto? — mira a otro lado notando las paredes manchadas.
Había varias palabras ofensivas en ellas, no quería seguir mirando, se sentía mal con Jisung, pero sentía que el mayor no le había contado toda la historia.
— No, no — niega levantando algunas cosas, abriendo una bolsa de plástico negra tirando todo ahí sin mirar demasiado — no pienses mucho en ello, me lo merezco — suspira arreglando un poco el desorden.
Por suerte para Jisung todo lo material podía remplazarlo tarde o temprano y no tenía demasiadas cosas en aquella habitación por las cuales sentirse mal.
— Te ayudo — Minho se acerca tomando algunas cosas para ponerlas en la bolsa.
Tardaron algunas horas pero ya todo estaba mejor que antes. Jisung había ido a la parte de abajo por una escoba y con que limpiar las manchas de orines.
Minho miraba a su alrededor, no creyó que la primera vez que entraría a la habitación del mayor se encontraría con tal sorpresa.
— Oh... — se gira cuando escucha aquella exclamación encontrándose con el rostro de Yeongjun mirándole sorprendido — no sabía que te encontrabas aún aquí — se rasca la nuca — Creí que te habías ido.
— Sigo aquí — susurra sintiéndose un poco intimidado ante la mirada poco disimulada del chico — ¿Por qué le han echo esto a Jisung? ¿No es acaso su amigo? — su rostro se frunció mostrando enojo.
