Reche

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POV ALBA

“Al salir de la discoteca y por primera vez bastante poco perjudicada ya que tenía que conducir de vuelta al piso de joan, la amiga de este, María creo que se llamaba me dijo que les sobraba una habitación y que si buscaba piso podría irme a vivir con ella y con sus otras dos amigas que también estaban de fiesta y la verdad no dudé mucho en aceptar, buscar un piso en Madrid es más complicado de lo que me imaginaba, pero así de un día para otro había encontrado uno, al girar la esquina de la discoteca casi me tropiezo con una chica bastante alta, morena y con un cuerpo que apostaría que podría ser modelo así que la verdad por un acto reflejo le solté mi nombre, al poco rato volví con mis amigos y minutos después me volví a cruzar con ella en el parque y le introduje un papel en el bolsillo de su pantalón y supe que se había dado cuenta por como me miro pero no le hizo ni caso”

Al día siguiente me desperté cerca de las 1 de la tarde y es que nos acostamos bastante tarde y no tenía ninguna gana de levantarme y ese día tampoco tenía pensado hacer nada y no me quitaba a esa chica de la cabeza aunque estaba claro que no la volvería a ver sobre todo porque no se ni quien era y la verdad es que me interesaba bastante poco, lo de soltar el papel con mi apellido fué idea de Miki para ver si conseguía divertirse y jugar a ver si me buscaba, y teníamos una apuesta con eso, al levantarme vi que Joan ya tenía la comida hecha y tras saludar a los dos me senté con ellos a comerme el plato de comida como si no lo hubiera hecho en semanas, tenía tanta hambre que sería capaz de comerme de todo

- Albita ¿has recibido alguna notificación nueva?

- Joan dejalo, esa chica no me va a buscar, si ni siquiera me conoce de nada y dudo que vaya a perder su tiempo en eso, yo no lo haría

- Vamos Alba, ¿no viste como te miraba?

- Claro cabrón porque me empujaste y casi nos chocamos

El resto del día lo pasamos tranquilamente preparando las maletas de nuevo para irme al día siguiente al piso de María donde viviría a partir de mañana, ya que el curso de bellas artes no lo empezaba hasta dentro de unos meses, sobre todo porque acababa de empezar el verano y era vacaciones así que tenía unos meses para adaptarme, y con mis padres pues los llamé el día anterior y la verdad es que hoy absolutamente nada aunque es cierto que Marina no paraba de escribirme.

El día pasaba lento y no se porqué no paraba de mirar el móvil, con tanta insistencia Joan había conseguido hacerme creer que esa chica de anoche me buscaría en redes sociales o alguna cosas de esas, ¿vaya estupidez no?, una chica que no conozco de nada con la que casi tropiezo y le suelto mi nombre de repente se va a levantar al día siguiente y lo primero que va a hacer es buscarme, esto se lo cuento a un editor y forma un libro de ficción, aparte incluso dudaba que lo hubiese visto.

POV NATALIA

Al día siguiente la verdad es que no me levanté pronto y tras desayunar y mejorar un poco mi imagen de dominguera recién despierta algo me vino a la mente de repente, y fué la imagen de la chica con la que casi me choco en la esquina de la discoteca y con la que casi tropiezo otra vez en el parking y es que parecía que lo hacía a caso hecho y no me quitaba tampoco el nombre de la cabeza “Alba” la verdad es que al principio no le di mucha importancia supongo que sería alguna tontería de niña malcriada aunque es cierto que no tenía ese aspecto, era bastante guapa y por lo que pude ver el poco tiempo con el que casi me tropiezo tenía unos ojos preciosos color miel que tenían algo que te atrapaba, pero la verdad es que a esa chica no la conocía de nada y tampoco me sonaba de haberla encontrado por Madrid, al terminar de arreglar mi habitación salí donde Marta y Damion estaban muy animados hablando

- Hola chicos ¿qué habláis?

- De tí y de la cara tonta que se te quedo con la chavala esa que vimos anoche

- Era guapa pero sin más, solo que me asusté

- Si si, pero bien que te llevaste su nombre, ¿como era?

- Alba por lo que pude oír

- Uyy vamos a buscarla en redes

- Marta estate quieta, no piensas hacer nada sobre todo porque no te lo voy a permitir

- ¿Alba que más Nataliuca?

- Ni idea, solo dijo eso, Alba

- Buah entonces va a ser imposible buscarla- y menos mal, pensé, porque conociendo a Marta ya le habría escrito para quedar con nosotros y es que estaba empeñada en que debería ir buscando una pareja y dejarme de rollos de una noche

Pasamos la mañana entre risas y bromas creadas por parte de Marta sobre la rara situación de la noche anterior y la verdad es que esta gente siempre me animaba y me hacía olvidar todo, a veces me ponía mal ya que llevo sin hablar con mis padres el mismo tiempo que llevo viviendo en Madrid, y sabía de ellos porque mis hermanos me lo decían y por lo que me decían no tenía pinta de que se acordaran mucho de mí aunque mi hermana, Elena, no paraba de decirme que todos me echaban de menos.

Tras terminar de comer me metí en mi cuarto para tocar un rato la guitarra y sí, cuando tenía tiempo tocaba la guitarra, el piano y a veces componía, me ayudaba  a soltar mis preocupaciones y es que no era mucho de hablar de mis problemas y de guardarlo todo para mí sobre todo porque siempre me acababan fallando, mientras tocaba la guitarra me dió por pensar en la noche anterior y en el nombre de aquella chica, no se porque me dió por mirar mis ropa de esa noche con la intención de buscar no se el qué, y en el bolsillo del pantalón encontró un papel, los desdobló y se quedó totalmente pillada

“Reche”

Tras mucho pensar, algo en ella le dio por juntar el nombre de aquella chica con lo que ponía en el papel

- Alba Reche- pensó

Tras eso se puso a buscar ese nombre por instagram y tras mucho rato encontró un perfil que coincidía con ese nombre y se metió en el perfil y gracias a que tenía éste lo tenia público pudo confirmar que era aquella chica y se dió cuenta de que era guapísima y que lo que había pensado de ella era lo cierto, esos ojos brillantes color miel, el pelo rubio cortito, era como una diosa sin ser diosa, se pasó gran parte de la tarde mirando el perfil y al subir todas las fotos para arriba sin querer le apretó al botón de seguir

- Mierda, mierda y mierda, ¿cómo puedes ser tan estúpida Natalia?- pensó, y es que si quitaba la solicitud iba a ser muy obvia, asi que lo dejé puesto, y la verdad es que dudo que me siga esta, además no es ni de Madrid, por lo que pudo leer era de Elche, lo que no se esperaba era lo que iba a pasar minutos después….

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