Parejas, amor y otra cosa...

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Al hablar de una relación -de parejas- lo primero que se nos viene a la mente son los besos, caricias, buenos momentos y lindos atardeceres que fueron observados hasta el cansancio.

De alguna forma llegamos a amar el amor pero no amamos el proceso del amor, las discusiones, malos entendidos, celos, diferencias, caminos que tomar, etc.

Por eso, no hacemos nada. Nos quedamos varados anhelando a alguien que corresponda nuestros sentimientos pero no podemos lidiar con la idea de responsabilisarnos de nuestros actos y empezar a pensar por dos, al unirnos como uno solo.

Y a causa de eso muchas personas empezaron a odiar las relaciones, creyendo que no valía la pena cargar con los problemas y sentimientos de los demás- ese puede ser un caso- o por que han salido de una mala experiencia que les dejó un sabor amargo en la boca.

Pero ¿Por qué necesariamente tenemos que "cargar" con los sentimientos-inseguridades-problemas de nuestra pareja? Es cierto, puede que al unirnos a otra persona deseamos lo mejor para ella y queremos que esos malos pensamientos desalojen la mentecita de nuestro ser amado, pero no es nuestra responsabilidad, si no de ellas.

Pero hay que hablar claro; culpa y responsabilidad no es lo mismo.

Puede que no sea culpa de tu pareja que sienta celos por tus compañeras de trabajo, pero ¿que hará con ellos? Es ahí cuando se convierte en su responsabilidad, el/ella tiene que decidir lo que hará a continuación.

a) trabajar en su autoestima y seguridad para no sentir que esas chicas o chicos son mejores que el/ella.

b) hacer berrinche y creer que es tu culpa por no demostrarle que le amas lo suficiente.

Aunque vamos, la mayoría escoge la dos.

Es por eso que hay que estar cien por ciento seguro de que nuestra persona especial o persona que hemos elegido para pasar el resto de nuestra vida tenga la suficiente conciencia y madurez para hacerse responsable de si misma y que tú seas simplemente su animador, no su entrenador o tutor.

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