Pendejo [C.H] Usarg

6

Ayer fui directo a casa. No podía soportar quedarme más tiempo, así que me ratée.
Y hoy, estaba encerrado en mi habitación. No sabía por qué me puso en tan mal estado.

Sus palabras y su rostro magullado seguían volviendo a perseguirme.

Me sentí culpable pero no debería. Él fue quien cometió el error, no yo. Fue él quien logró hacerme daño.

Me había pasado el tiempo tratando de encontrar el motivo de su acto, pero no pude entenderlo.

Es solo un bastardo que disfruta volviendo loca a la gente.

No, no fue eso. No quería creerlo. Parecía tan dulce esta semana. No fue por eso. ¿Pero entonces por qué?

Enterré mi rostro en mi almohada, gritando durante mucho tiempo en ella.

Eran alrededor de las 4 p.m. cuando sonó el timbre. No me importaba en absoluto, prefiero rumiar en mi rincón. Habiendo encendido la música en mi habitación, escuché solo algunos fragmentos de conversación.

-....Hablarle.

-... dormitorio ... puerta a la derecha.

Seguí mirando fijamente a mi techo, dejando que la voz de la cantante me transportara a un mundo completamente nuevo. No escuché que nadie llamara a mi puerta, ni que nadie entrara a mi habitación. Lentamente moví la mirada hacia un lado y vi a Usa de pie, mirando a su alrededor con torpeza. Suspiré de molestia y me escondí debajo de mi edredón. Genial, ahora también vino a perseguirme en mis sueños. 

-Tina, realmente necesito explicarte. ¡El gringo de mi sueño realmente quería hacerme sentir culpable! 

Saqué mi cara de la colcha y miré al chico en mi habitación. Sin embargo, parecía muy real. Así que decidí frotarme los ojos pero nada ayudó: todavía estaba allí. Entonces me di cuenta de la situación y salté de la cama, apagué la radio y señalé la puerta con el dedo. 

-Salí afuera. 

-No, respondió. Apreté los dientes y bajé el brazo. 

-¡¿Quién te dejó entrar de todos modos?! ¿Estás haciendo eso ahora también? ¿Irrumpir en las casas de las personas? Parecía molesto lo dije con dureza, lo que me hizo sentir mal: 

-No, yo no hago ese tipo de cosas. Tienes que dejar de verme como un delincuente. Casi contraataco con un "pero eso es lo que eres de todos modos", excepto que no era cierto, así que me contuve. 

-Si de verdad quieres saberlo, es tu madre quien me dejó entrar. 

Me crucé de brazos con molestia y lo miré: 

-¡¿Qué quieres de mí?! Lo escudriñé con el ceño fruncido. Pasó una mano por su cabello todavía enredado. 

-Explícate sin que vuelvas a huir. 

- ¡No me escapé! 

-Sí, Argentina, todo lo que haces es huir. Así que por favor escúchame. Entonces tendrás derecho a dejar de hablarme y a odiarme y yo ... Espera, ¿estás usando el suéter azul? 

Miré hacia arriba y me sonrojé mucho. De hecho, llevaba el suéter azul que él me había aconsejado, diciendo que me sentaba bien. No tenía idea de por qué lo estaba usando, pero me recordaba a él. 

-Es sólo porque estaba ahí fuera... Usa tenía una sonrisita divertida en sus labios que desapareció tan pronto como recordó la razón de estar aquí. 

-¿Entonces, Tina? Lo pensé por un momento, pero la curiosidad que burbujeaba dentro de mí me hizo ceder. 

Me senté en mi cama y me crucé de brazos. Me quedé mirando al suelo antes de murmurar: 

-Adelante. Lo escuché suspirar un poco "Gracias ..." Y comenzó su explicación. 

-La razón por la que hice esto, la razón por la que les pedí a tus amigos que te hicieran esto es porque te amo. De verdad. Levanté los ojos bruscamente y lo miré en estado de shock. Mi boca estaba entreabierta, pero aún no salió ningún sonido. Fue imposible. Me estaba mintiendo, eso era seguro. Siendo incapaz de hablar, continuó: 

-Te he amado durante tanto tiempo ... Desde el momento en que Mex nos presentó. Ya me había fijado en ti antes, en los pasillos. Lo primero que me llamó la atención fue el color de tu cabello. Tu melena celeste rizado. Luego estaba tu sonrisa. Cuando sonreiste, mi corazón dio un vuelco. Mis manos empezaron a temblar y no pude describir mis sentimientos en ese momento. Mi corazón estaba acelerado y no me atrevía a mirarte, nunca creí que me vería de esa manera. Por un lado, me dio cierta satisfacción saber que había podido atraer a este tipo, pero por otro lado, estaba completamente perdido, confundido. 

-Si supieras ... continuó Estados Unidos, si supieras cuánto soñé que algún día estaría dirigida a mí esta sonrisa. Excepto que la mirada que me lanzaste la vez que tu amigo nos presentó me hizo entender que nunca me sonreirías de esa manera. Estaba tan molesto al ver solo odio en tus ojos. Me odiaste. Fue tan obvio. Y no entendí por qué. Tan pronto como hablé parecías molesto y cuando aparecí en tu campo de visión me diste la espalda. 

Escuché que la voz de este chico se quebró mientras hablaba y fue solo entonces que me di cuenta de que estaba diciendo la verdad. De todos modos, ¿qué ganaría con mentirme además de ser rechazado ...? 

-Sin embargo, he hecho mucho para complacerte. Fui amable contigo, pero no pareció funcionar. Siempre fuiste el mismo. Así que la única forma que encontré de acercarme a ti fue esta estúpida apuesta. Me dije a mí mismo que, finalmente, me mirarías directamente a los ojos. Si supiera cuánto luché para que tus amigos aceptaran ... Al final se rindieron, aunque no sé por qué. Y esta semana ... Oh, esta semana ... Vi que no estabas nada feliz pero sabía que lo harías y aproveché. Me encantó verte sonrojarte cuando me acerqué y ver tu mirada avergonzada. Pero lo que más me gustó fue que ese destello de odio en tus ojos se había desvanecido. Y pensé que tenía una oportunidad contigo. Así que probé todo. No sé si funcionó, si ahora tú también sientes algo por mí, pero al menos me habrías mirado con cariño y me habrías sonreído por primera vez. 

Apreté mis manos sobre mis jeans, mirando al suelo. Ya no sabía qué hacer y decidí interrumpirlo: 

-Cállate. Lo escuché suspirar y acercarse a mí, estresándome más. Por tanto, mi intuición era buena. Él me amaba. De alguna manera me gustó mucho. Me sentí amado. Durante esta semana, me di cuenta de que, de hecho, era tan sensible y adorable. Realmente comencé a apreciarlo. Pero en este momento, no sabía cómo me sentía por él. Todo era tan confuso en mi cabeza. 

-Tina... no quiero que termine esta semana. Ojalá pudiera besarte todos los días, hacerte sonrojar más y estar siempre a tu lado. Te amo. Te amo tanto que mi corazón está a punto de estallar. 

Sus palabras fueron como flechas clavándose en mi cuerpo. No sabía qué hacer. Estaba perdido e indefenso. ¿Cómo reaccionar? Quería que se fuera pero al mismo tiempo quería que me sostuviera en sus brazos mientras me susurraba cosas dulces al oído. Apreté los puños e hice lo único que pude hacer en este mismo momento: " Vete", le dije con voz temblorosa. 

-Argie... 

-¡Cerrá el orto te dije! Lo sentí congelarse ante el sonido de mi voz. Seguía mirando al suelo, incapaz de afrontarlo. Escuché sus pasos alejarse y la puerta cerrarse. ¿Qué diablos me estaba pasando?

*inserte separador que wattpad no me deja ponerlo*

Hey hey heyy!

Les dije que me portaría bien y les traería un capítulo hoy como regalito de navidad uwu

Solo para que sepan, espero que no se hayan encariñado demasiado con Arge porque les va a caer bastante mal de ahora en adelante ups

Anyways, espero que hayan pasado lindas fiestas!!!!