Final primera parte

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—¿Te sentís bien mi amor?—pregunto Francisco

—Perfecto guapo, ansiosa por la fiesta de esta noche.— dijo Sonia

Francisco le comentó cómo eran las fiestas que su padre organizaba para los aniversario, grandes fiestas, lujosas, con mucha gente, venían de varios países.

—Confirmo Marisol , vas a ver a tu compañera— le dijo Francisco

—Que bueno mi amor, no me dijo nada, hable la semana pasada con ella, no le comente lo del embarazo— dijo Sonia

—Mejor así hoy le das la noticia personalmente.

Después de almorzar, Francisco la acompañó a Sonia y Ameli,  a la peluquería
Sonia se realizó unos reflejos más claros y se cortó un poco el pelo, se lo dejo semirecogido y le hicieron ondas en las puntas.

A la pequeña le realizaron un baño de crema y la peinaron con dos nudos redondeados, con  2 trenzas hechas coronas.

Se veían espléndidas ambas, ahora tenían que esperar que llegue el momento.

Cuando llegaron a la casa, Francisco recibió una llamaba y se marcho a su despacho.
Sonia se colocó una gorra de baño y se fue a bañar .

Cuando salió lo encontró bastante nervioso, hablando aún por teléfono.

Así que se fue a la cocina para preparar algo para merendar .

—Ameli, Veni a buscar tu licuado – dijo Sonia.

—Gracias Sonia –dijo ella

La pequeña,  se encontraba con ellos hace 4 días, solo vio a Tahia una sola vez más después de la desaparición, no porque Francisco no la dejará ir, Tahia no tuvo intención tampoco.

Pero eso lo tenía mucho más preocupado ahora.

No se había presentado en la oficina,  y nadie sabía nada de ella.

—Mi mamá también trabaja en la empresa del abuelo,  la voy a ver en la fiesta – dijo Ameli

—Ojalá que si linda —dijo Sonia mientras estaba sentada junto a ella esperando que Francisco termine la llamada.

—¿Me porté mal, por eso mamá Tahia no me quiere ver?

—No mi amor, no pienses esas cosas, tu mama seguro está ocupada , es por eso que no vino, pero seguro que hoy la vez.—le dijo Sonia.

Justo en ese momento entro Francisco.

—Te preparé un café,  el mío es con leche.— dijo ella

—Gracias mi niña.—le respondió

Ameli le dio un beso a su padre

—¿Todo bien?,¿ paso algo?

—Varias cosas,¿ por donde empiezo? —Dijo Francisco —La primera en llamarme fue Tahia, esta súper borracha por lo que pude escuchar, y más de lo mismo de siempre, amenazas, sus locuras, historias que ella se inventa .

—Que te dijo Francisco?

—Me dijo que hoy en la fiesta, iba a  demostrarle a todos quién es mi mujer.

—No le hagas caso mi amor,  sabes que esta más loca que las cabras — dijo Sonia

—Si pero lo que más me preocupa es que ella sabe que Ameli no es mi hija, me lo dijo.

—¿Como te dijo?

—Me dijo que seguramente Sergio estaría muy enojado al saber, qué hasta la hija le robe.

—Mi amor, sabes que eso no es así, el seguro está agradecido por como te ocupaste estos años, seguramente te equivocaste, pero el no sabia como era su mujer, nunca te escucho

—Si lo se, gracias,  vamos a ponernos bien, que hoy vamos disfrutar la noche.

Estaba oscureciendo y Francisco esperaba a sus mujeres para que bajen y poder  marchar a la fiesta.

Sonó su celular

—-Cata, decime— dijo él

—Francisco ya estamos acá y ¿ ustedes?

—Estamos por salir, Ameli se durmió y estuvimos esperando que despierte— dijo él

—Bueno esta bien, los esperamos, es una hermosa fiesta hermano, por cierto, ¿sabes algo de Tahia?

—Nada , lo último que supe , fue cuando me llamo al mediodía para amenazarme como siempre, ya le llegó la carta que envió el abogado para tener la custodia completa de Ameli, imagínate como estaba, creo que había tomando – dijo él

—Mejor hermano,  así no parece por acá, bueno nos vemos .

Cuando francisco cortó la llamada , vio cómo bajaban dos hermosas mujeres de la escalera .
Quedo helado al ver tanta hermosura junta.
Sonia tenía puesto un vestido de fiesta largo, plateado, elegante, cuello redondo, sin mangas  con lentejuelas, unos zapatos negros altos y  un maquillaje sencillo pero sensual.

Ameli llevaba un vestido color rojo, estilo princesa, con un gran moño por detrás.

—No puedo creer , lo que mis ojos están viendo— dijo el

Ambas se miraron y sonrieron

—Están hermosas las dos

—Gracias mi amor – dijo Sonia mientras se acercaba para besarlo

—¿Vamos chicas?—dijo Francisco

Mientras el iba conduciendo,  Sonia miraba por la ventanilla y pensaba  en como tan poco tiempo su vida había cambiado.

Lo miraba y no podía creer que el se haya fijado en ella, en como sin conocerla, la había imaginado,  tal ves su mamá tenía razón y el destino de cada uno está escrito.

Toco su vientre y sonrió.

Recordó la pregunta que le hizo su mamá,  el día que encontró a Nicol engañándola.

—¿ Sos feliz con él?, ¿sentís que es todo en tu vida?, ¿ cuando lo miras a los ojos, sentís el amor hija?

Y Sonia pensó, después  de un rato, se limpió las lágrimas y le dijo

—No mamá— dijo ella

—Entonces, deja el pasado y busca tu felicidad.

Y así fue.

Lo miro de nuevo y el la estaba observando,  con una hermosa sonrisa le dijo.

—Sos tan hermosa, cuando tu mente vuela, tendrías que ver tu expresión. —Dijo él

—Ja jajá, estoy pensando en nosotros, hasta donde llegamos, y que no puedo amarte más de lo que te amo —dijo ella.

—Cada noche cuando acuesto a tu lado, lo pienso , cambiaste mi mundo por completo, cambiaste todo de mi, te amo, y si ese día fuera de la empresa en Argentina no hubiera existido, te hubiera buscado hasta el fin de mis días— dijo él

Aparcaron el auto frente al gran salón ya que el estacionamiento está lleno de autos.

Francisco tomo a Sonia de la mano y a la pequeña de la otra y entraron.

Era una fiesta de esa que podrían comer en el piso y seguro estaría de lo más higiénico. Baldosas blancas súper brillantes, techo alto con lámparas de vidrio colgadas, las mesas estaba preparadas una al lado de la otra , en el medio quedaba un pasillo, que conducía a lo que sería la pista de baile, luz tenues, bajas, todo era perfecto.

—Francisco, esto es …. , no se ni como expresarlo, es de lo más hermoso que vi en mi vida.— dijo Sonia. 

—Las fiestas de mi papá— dijo Francisco

—¿ Dónde tenemos que ubicarnos nosotros? —dijo  Ella

—Ves allá en el centro, bueno en ese mismo lugar, donde una loca está levantando las manos— dijo él

Catalina que vio que caminaban despacio, empezó a mover los brazos,  para avisarles de alguna manera, llamando mucho la atención,  que tenían su lugar en esa mesa.

—¡Cuñada!, pero estas fabulosa,— dijo cata

—Vos también cata, muy hermosa.

Después de saludar a todos, Francisco le presento algunas personas, le enseño los inversores que más invertían en la empresa y hasta le contó chismes de algunos.

Cuando levantaron los platos de la cena, le dieron la palabra a Julián,  que aprovecho para agradecer a todos y especialmente a su hijo.
Todos aplaudieron y Francisco le brindo un gran abrazo a su padre.

Después Francisco le pidió a Sonia que lo acompañe.

—Quiero mostrarte algo – dijo él

Cuando llegaron Sonia, saltó de felicidad.

—Marisol, amiga, estás hermosa— dijo Sonia, abrazando y besando a su amiga.

—Vos lo estás, mira que mona— dijo ella .

—Dante, tanto tiempo ¿ como estas?—pregunto Sonia

—Hola querida, muy bien,¿ vos? me abandonaste, jajá , tuvo que aparecer este rompe corazones para robarme a mi secretaria— dijo Dante  de forma graciosa.

—Jajá , surgieron los cosas rápido sin darnos cuenta, y ahora estamos muy felices por formar una familia—dijo Sonia  mientras abrazada a Francisco

—Que bueno Sonia, te deseo  lo mejor, y sabes que las puertas de la empresa están abiertas para vos.— dijo Dante

—¿ Cómo es eso se la familia?.—preguntó Marisol

—Estamos esperando un bebé— dijo Francisco

—¡Aaaaah!, muchas felicidades chicos— dijo Marisol.

—Gracias- dijo Sonia mientras se abrazaban.
Después de hablar un rato, fueron a sentarse a la mesa, junto a la familia.

Catalina se ubicó cerca de Sonia y Francisco, Ameli estaba en la otra punta, junto a su abuela y Julián.

Estaban hablando cuando de golpe se escucharon gritos de una mujer y personal de seguridad detrás de ella.

Claro como no, Tahia.
Francisco se paró rápidamente y se puso delante de ella

—¿ Que haces acá y en ese estado? – dijo el, mientras le hacia una seña a su madre, para que aleje a la niña de ese lugar.

—¿Que pasa? – grito Tahia delante de todos,—¿ no soy bienvenida suegro?— dijo mirando a Julián

—Por favor Tahia, salgamos de acá, vamos afuera.—dijo Julián, levantándose,  para calmar todo .

Las mesas que estaban cerca, estaban al tanto de todo lo que estaba pasando.

—No quiero ir afuera, ¿ donde está?—dijo buscando a Sonia.

Sonia se paró y se acercó a ella, Francisco le pidió que se quede sentada , pero Sonia estaba cansada  de ser humillada y ofendida por ella.

—¡No Francisco! – dijo Sonia soltando el brazo de el— ¿ quiere hablar conmigo? — ¡habla! —dijo mirando a Tahia

—Jajá, por fin das la cara desgraciada.—dijo ella

—Siempre me ocupo de mis problemas, pero, ¿sabes cual es la diferencia de este?—dijo Sonia

—¿ Cuál es Sonia? —Dijo Tahia mientras se cruzaba de brazos

—Que para mi, no sos un problema, no sos nada,  al igual que para el,— dijo señalando a Francisco , — jamás  fuiste nada para el, solo un puto problema y dolor se cabez…

En ese momento Tahia le pegó una  cachetada, Sonia se cubrió la mejilla y cuando la miro, Francisco la tenía del brazo y estaban sacando del salón.

—No va a quedar así maldita—grito Tahia.

—¿Estas bien cuñada?— dijo Catalina

—Si despreocúpate, se merecía escuchar todo eso.—dijo Sonia.

Después de arreglar varios asuntos, Francisco volvió y se unió de nuevo a Sonia.

—¿Estas bien mi amor?— le dijo el

—Si guapo, no te preocupes, ¿ donde está ella?— dijo Sonia

—La acompañaron a la salida, ya no puede entrar—dijo Francisco

Después  del brindis y anunciar algunos premios, se abrió la pista de baile .

—¿ Me concede este baile? – pregunto el

—Como no cabello—dijo Sonia mientras le tendía la mano 

Bailaron 3 temas seguidos, por suerte habían podido olvidarse de lo sucedido anteriormente y estaban disfrutando mucho.

—Sos maravilloso Francisco, nunca te alejes de mi lado— le dijo ella

—Jamás mi amor, voy a protegerlos siempre, te amo para toda la vida Sonia- dijo el mientras la besaba .

—Para toda la vida mi amor, te amo para toda la vida

El salón estaba quedando vacío, Ameli se había marchado ya con Rosa.

—Hermano vamos yendo¿ te parece?— le dijo Catalina

—Si vamos – dijo el mientras salía. De la mano, junto a Sonia.

—Francisco me olvide el abrigo, anda saliendo que ya te alcanzo— dijo Sonia

Sonia entró rápido, agarro su saco de la silla y salió

Francisco estába de la mano de enfrente, abriendo la puerta del acompañante y Catalina junto a el esperando.

Sonia estaba cruzando mientras se ponía el abrigo, cuando se escucho un auto acelera a altas revoluciones

Francisco giro y salió corriendo

—¡ Sonia, noooooooooooo! — grito

Hace tiempo te buscaba ( Parte 1)  [Editando] #LunaRoos2020   Donde viven las historias. Descúbrelo ahora