Capitulo 4

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Lentamente, empezaron a subir las escaleras. Juan y Benja primeros y Alex y Marcos detrás. Hunter no entendía mucho la estrategia. Es por eso que estaba al último. A mitad de camino la puerta se cerró de golpe y los cuatro gritaron. Hunter se escabullo por el medio y subí a toda velocidad. Cuando llegó al cuarto de los padres de Juan comenzó a ladrar con todas sus fuerzas. Juan logró llegar a su cuarto y sacar unas tijeras que estaban sobre su escritorio. Benja agarro una zapatilla lo cual Juan le preguntó:

- ¿Me estas jodiendo?

- Bueno. Algo es algo. ¿No te parece?

- Eso creo. Vamos.

Se uniron con los otros dos chicos y entraron al cuarto grtiando. Ninguno se dio cuenta que debían prender la luz. Marcos lo hizo. Y vieron la ventana abierta y un vestido que se movía por el viento. Marco empezó a burlarse y a imitarlos.

- Ahhhh. Soy el guerrero. Juera fantasmita. jajaja

- ¡Cortala salame!

- Son muy graciosos o estan muy borrachos.

- Vamos a bajo por favor chicos - Dijo Juan.

Cuando llegaron al livingroom, la tabla de la ouija estaba en la mesita y en la pantalla del televison estaba la imagen "game over".

- MARCOS. ¿En qué momento la trajiste? - preguntó Juan.

- Yo no la traje. ¡Ustedes dos! - Benja y Alex movieron la cabeza.

- ¿Chicos? - llamó la atención Benja. Su cara estaba paralizazo. Su boca abierta y sus ojos grandes. Ló unico que pudo hacer es levantar su mano y apuntar con el dedo hacia la ventana de afuera. Se veía una silueta como si alguien con capucha y mirando hacia abajo estaba parado en la vereda. Se dió la media vuelta y se fue.

- ¿Vieron eso? - dijo Alex. Todos quedaron en silencio.

- No entiendo - agregó Benja - ¿Era un fantasma o una persona?

- No sé - contestó Juan - Todo es muy confuso. Puede haber sido alguien que entró por la ventana y el viento cerró la puerta y se asustó. La tabla aquí. Es muy confuso.

Las luces empezaron a bajar la intenisdad, prenderse y apagarse. Los chicos se reunieron detrás del sofá. Miraban expentante para todos lados. Hasta que se dieron cuenta que el triangulo sobre la tabla estaba girando en circulos.

- ¿Chicos? Miren - Apuntó con el dedo Benja.

El triángulo empezó a marcar letra por letra: E-S-T-O-Y-A-Q-U-I

- ¿Qué queres? - Preguntó Marco con una voz llena de miedo. Y la tabla contesto.

U-S-T-E-D-E-S- M-E L-L-A-M-A-R-O-N A-H-O-R-A L-E-S V-O-Y A E-N-S-E-Ñ-A-R A-L-G-O

Y fue directo a la parte inferior "good bye"

- A la m... esta cosa escribe más rápido que yo.

- ¡Marcos! No es momento de hacer bromas. ¿Que vamos a hacer?

- ¡Juan! la tiremos - Sugerió Benja.

- No, No. La quememos. Así ya no volverá a comunicarse.

- Buena idea, Alex.

Juan sujetó la tabla y la puso en la chimenea. Fue a la cocina y trajo fosforos. Encendío uno y empezo a prenderla. Rápidamente el cartón se incendió. Los cuatro miraban como el fuego consumía el juego no tan divertido y golpearon la puerta tres veces....

El juego que ya no es juegoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora