assassination classrom La Belleza De La Vida

capitulo 28

Capítulo 28: Vigésimo octavo período: tiempo de secretos

Pasaron exactamente treinta y seis horas antes de que Ame se despertara. Debido a la gravedad de sus heridas, la píldora regenerativa especial que había ingerido había hecho función en su cuerpo. Sin embargo, después de un examen minucioso, Yagi aseguró que no habría daños duraderos ni traumas por la herida de bala. Sus costillas estaban casi completamente curadas y los moretones que cubrían sus brazos y piernas ya habían desaparecido. Al final, lo único que no pudo tratar fue el trauma dejado por la traición de Inu.

Sin embargo, ahora no era el momento de lamentar la traición de su amigo. Aunque había sido arrestado, ya no podían arriesgarse a permanecer en el mismo lugar. Afortunadamente, Saru aparentemente había estado preparando algo durante un tiempo, ya consciente de que había un traidor entre ellos, por lo que ya se había establecido un nuevo cuartel general. Mientras Ame estaba inconsciente, todos los integrantes trabajaron incansablemente para sacar el equipo, modificar los puntos de caída, cambiar las rutas habituales, alertar a sus contactos, reemplazar los teléfonos y sus números, etc., etc. No había duda en su cuenta que, ahora que lo habían atrapado, Inu... no, el dios de la muerte haría todo lo posible para derribarlos con él, y ciertamente no estaban dispuestos a dejarlo.

-¿Realmente no hay nada que pueda hacer para ayudar?- Ame preguntó por cuarta vez desde que se despertó.

-Como te dije, no hay nada más que hacer, mocosa-, gruñó Yagi, guardando sus suministros médicos. -Hemos manejado todo mientras estabas en ese estado de semi-coma. Aún no puedo creer que ese bastardo realmente te disparó...-

-Sí, yo tampoco-, suspiró Ame, todavía sintiéndose un poco desorientada. -Pensar que se volvería contra nosotros así... ¿Ne, Yagi? ¿Es cierto? Sobre... sobre Saru queriendo que yo—-

-Ha convocado una reunión-, la interrumpió el hombre brusco, dándole la espalda. -Es en una hora. Tómate ese tiempo para descansar un poco más-.

-Esperar lo--

Pero no esperó, simplemente dejándola para que se ocupara de sus demonios. Maldiciendo en voz baja, Ame se recostó, su mente se arremolinaba con preguntas y dudas sin respuesta. Después de lo que dijeron Lovro e Inu, el dios de la muerte, en realidad fue una pregunta bastante estúpida: Saru estaba planeando convertirla en su sucesora. Sin embargo, la verdadera pregunta era... ¿por qué? ¿Por qué ella? ¿Por qué ahora?

Y todavía hay que lidiar con la clase, recordó luego, reprimiendo una mueca de vergüenza. Esta vez no hay forma de mentir a mi manera. Tendré que explicarles todo...

Pero no tenía sentido preocuparse por eso por ahora. Hasta que ella y los demás manejaran los asuntos de Zodiaco y todos los problemas que vinieron con la traición de el dios de la muerte, ella no volvería a la escuela. Sin embargo, con suerte, no tomará mucho tiempo. No porque falte a la escuela en particular, sino porque sabía que, si tardaba demasiado en regresar, sus amigos y su estúpido maestro pulpo seguramente la perseguirían y causarían todo tipo de problemas.

Hana vino a buscarla exactamente cincuenta y seis minutos después. Ninguno de los dos pronunció una palabra, fueron juntos a la sala de reuniones. Ame ya había comenzado a memorizar el diseño de su nueva sede, pero no pudo evitar sentirse un poco perdida, todavía. Este no era el lugar donde había crecido, y mudarse repentinamente fue solo un amargo recordatorio de lo que había sucedido. Sin embargo, su dolor emocional se hizo a un lado rápidamente cuando entraron a la sala de reuniones, en la que ya estaban ocupados trece de los dieciséis asientos. Mientras Hana y Ame iban a ocupar sus respectivos lugares, la niña miró hacia el asiento a su derecha. El dibujo de un perro se mostraba claramente en el asiento, ya que este estaba vacío. Además, el anillo que había recuperado del dedo del dios de la muerte había sido colocado sobre la mesa justo antes del asiento vacío. Sacudiendo la cabeza,