Soulmate ℘ Bangchan

Capítulo 5

Un pequeño degradado amarillo se hacía presente en la habitación, o al menos, eso es lo que podía notar con los ojos aún cerrados.

Empecé lentamente a abrir los ojos, constando del izquierdo, posterior, me senté en dónde estaba.

Chan seguía dormido, tiernamente su cabello rubio se dejaba notar por la luz que entraba, y aún dormido tenía esa sonrisa.

Cuando empecé a mover mi cuerpo comencé a tener dolor de cabeza, tratando de descifrar el por qué, quizá fue que cabía la posibilidad de que pudiera haber llorado en la noche sin haberme dado cuenta.

Cuando mi cuerpo y mente entraron en sintonía, más el dolor no se había aliviado, caminé hacia el baño, en el camino por poco me doblo el pie por aún no tener los ojos bien abiertos.

Aún me ví recolectada en el gran espejo me di cuenta de dos cosas;

Me veía muy bien con aquella camisa, además de parecer que recién había tendido sexo.

Además, de comprobar mi anterior teoría.

Cómo sea, seguí restándole importancia, solo lavé mi rostro con agua fría y así misma mente de dirigí a la cocina, abrí la nevera de Chan, viendo medio paraíso para un cocinero.

Tomé lo que consideraba, podría ser mi mejor receta, y empecé a cocinar.

Unos minutos después había terminado, puesto que fueron hotcakes no tardaron demasiado en hacerse, dejé calentando chocolate caliente y me dirigí a la habitación de Chan.

Me apoyé en el marco a ver la escena. Quizá si que le gustaba mi aroma, porque se encontraba en donde estaba durmiendo yo, con aún esa sonrisa sin sentido.

Me acerqué al borde de la cama, más específicamente al rostro feliz de Chan.

-Chan... Despierta. -Dije acariciando su mejilla, poniéndome de puntillas casi sentada en el suelo.

-No te vayas... -Cuando estuve a punto de quitar mi mano la tomó con una de las suyas.

Sin saber que hacer, solo intenté no morir por la ternura que me estaba provocando, además de seguir tratando de despertarlo.

Cuando por fin súbitamente abrió sus ojos me asusté un poco.

-¿Estás bien? -Pregunté debido a su repentina reacción, la cuál dejaba claramente que estaba agitado y un poco asustado.

-Si... Tuve una pesadilla... No es nada.

De repente sentí como toda esa ansiedad y miedo empezó a asfixiarme, aunque poco solo duró unos segundos.

-Jihyun... ¿No llevabas algo ahí además de tu ropa interior? -Ambos miramos mi entrepierna a la vez.

Cuando recordé que solo tenía mi ropa interior encima instantáneamente me tapé con ambas manos, perdiendo el equilibrio y sin hacer de cuenta de que Chan aún tenía tomada mi mano y la jalé con la suficiente fuerza para traerlo conmigo al piso.

Pese a que atajé todo su peso en mi, no sentí dolor alguno debido a la suave alfombra a un lado de su cama.

-¡Lo siento, no quería mirar! -Dijo Chan haciendo cosquillas debido a que se encontraba en mi cuello.

-¡Me haces cosquillas? -Dije tratando de hacer que al menos se moviera un poco, y lo hizo, pero quedó encima de mí.

-No tengo problema con lo que sea que viste, fué un accidente, pero el que me hayas hecho cosquillas, inconscientemente o de cualquier forma no se va a quedar así. -Volteé la situación y quedé encima de él haciendo tanta cosquilla podía, descubriendo en el proceso que tenía casi una fuerza sobrehumana, y pues claramente tenía el doble que la mía, dejándome nuevamente otra vez debajo de él.

Tiempo después, del cuál por desgracia me tuve que rendir y suplicar por mi vida, nos levantamos, ambos quitándonos las lágrimas.

Al llegar a la cocina, el chocolate por poco se había pasado, aunque no quedó perfecto como sabía pero seguía estando muy por encima de los estándares aparentemente bajos de Chan, puesto que estaba disfrutando su desayuno tal como un niño.

Cuando terminé de desayunar, poco después que Chan, me cambié de ropa y me despedí, con destino a mi hogar.

No tardé mucho en llegar, puesto que era un día libre solo me tire en cama, tiré mi celular a un lado, y esperando a dormir, cosa que por poco pasa, recibí una notificación, y en el momento de desbloquearlo recibí una segunda notificación.

Aunque dos notificaciones parecían poco, para una persona que no tiene demasiada vida social, además de tener las notificaciones de grandes redes sociales desactivadas, dejando solo los mensajes directos, es mucho en un momento.

Seungmin
(1)

“¿Olvidaste nuestra cita de hoy?”

Chan
(2)

“Gracias por ser mi modelo...”

“Y lo siento otra vez por haber visto tan sinvergüenzamente”

¿Cita con Seungmin? ¿Seungmin?

Después de unos momentos de rebobinación, recordé a Seungmin, un chico que conocí cuando probé una aplicación de citas, siendo él solo el inicio con medianamente éxito de más de once.

Tú

“Claro que no lo olvidé, aunque, ¿A qué hora te resultaría mejor?

Seungmin

“Lo olvidaste, así que mejor te recuerdo otra vez, a las 7:45PM en el restaurante que concordamos, y si también lo olvidaste te enviaré la dirección otra vez”

Después de recibir la dirección la anoté para no volver a olvidarla.

Tú

“No hay problema, siempre puedo ser tu musa, y además, me gustó ignorar un poco la rutina, y tú camisa es muy cómoda... Tendré que ir algunos días más para poder usarla de pijama”

Después de responder el mensaje de Chan tiré el teléfono con verdaderas intenciones de dormir, las cuales esta vez sí se cumplieron.