Capítulo 13

1.3K 190 6
                                    

GUN

Me despierto con las primeras luces de la mañana, miro hacia el otro lado de la cama y Off sigue durmiendo con su pelo revuelto sobre la almohada blanca. Su cara mientras duerme es de relejada felicidad, tan hermoso que no creo merecer esta suerte. Después de haberlo pateado de mi vida como basura él ha vuelto a mi vida para salvarme, otra vez.

Tenemos que organizar nuestras vidas, él deberá volver al trabajo y yo debo adaptarme a mi nueva situación con la silla de ruedas. El lunes empiezo la rehabilitación, en principio el fisioterapeuta vendrá a casa y haremos los ejercicios aquí. Una vez que pueda moverme con más facilidad seré yo el que vaya hasta las instalaciones del hospital.

Me han advertido que la recuperación será larga y dolorosa, que debo tomarlo con calma, pero yo solo quiero ponerme bien para dejar de ser una carga para Off y para Sammy que sigue culpándose por lo que me pasó. No sé qué hubiese sido de mí sin ella, y ya no sé cómo decírselo, me salvó la vida y me devolvió a Off, no me alcanzará la vida para agradecérselo.

-Buenos días- oigo entre mis pensamientos.

-Buenos días Off, ¿has dormido bien?

-He dormido mejor de lo que he dormido desde hace mucho tiempo- me dice poniendo su mano sobre la mía suavemente.

Sé que se anda con pies de plomo en todo lo tocante a mí. Antes de poner su mano en la mía o cuando me ayuda a lavarme, siempre me pide permiso con la mirada, me evalúa a ver cómo me siento cuando me toca.

Si supiera que es cuando me toca cuando más seguro me encuentro, su tacto, su mirada cuando lo hace es lo único que me hace sentir en casa.

Ruedo hacia su lado y pego mi cuerpo a su cálido cuerpo. Mi mano se posa en su cara y lo acerco para darle un largo y suave beso que me deja sin aliento. Él me mira como siempre lo ha hecho, como si solo yo existiera en el mundo, incluso cuando le dije que se fuera nunca me miró con odio o rencor.

-¿Estás bien?- me pregunta.

Yo prefiero contestarle con mi piel, sé que cualquier cosa que le diga no me creerá, tiene miedo por mí y yo solo quiero que sea natural y cariñoso como lo era antes de todo esto, antes de que yo lo estropeara.

Rodeo su cuello con mis brazos lo mejor que puedo, todavía mi brazo derecho no me obedece del todo, pero no me duele. Alineo su cuerpo con el mío y tiro un poco de él para que quede encima de mí. Off se pone rígido y me mira buscando algo en mi mirada que le indique que estoy bien.

Su erección se clava en mi cadera y yo me froto contra él, la sensación es brutal. Como la primera vez que estuvimos juntos, mi piel reacciona a la suya de inmediato, no hay miedo aquí, solo el amor que sentimos y quiero que lo sepa, quiero que me ame sin barreras.

Un gemido sordo sale del fondo de su garganta y su cuerpo tiembla, pero todavía no puede dejarse ir, siento su resistencia a tocarme libremente.

-Off, pon tus manos sobre mí- le pido.

-¡Dios Gun! No hay nada que desee más- me dice cerrando sus ojos y apoyando su frente en la mía.

-¿Pero?- le pregunto.

-No quiero hacerte daño, puedo esperar a que estés bien, hasta que cures tus heridas- me dice con su voz rota.

-Off mírame, por favor- le exijo.

-Gun amor, no tienes que hacer esto por mí- vuelve a repetirme.

-Ya te he dicho que no volveré a hacer algo que no quiera hacer. Te necesito para poder curarme, necesito al hombre que me enseñó a tener fe a pesar del miedo, te necesito a ti- le respondo.

Rompe mis cadenas - OffGunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora