Tú eres el omega [Jikyu]

12

19 años

Existió la atracción sexual desde los inicios de su pubertad, pero siempre respetaron a su pareja a pesar de todo. A parte al no poder percibir un aroma o mantenerse en el margen de no seducir sexualmente a su pareja, demostraron que no era necesario en su relación.

Ellos se amaban, lo demostraban de la forma más pura: a través de la compañía, la confianza y la sinceridad, mientras el acto carnal lo mantenían para un momento más alejado.

La atracción sexual nunca estuvo tan marcada hasta que uno de ellos presentó su rango.

Ese día por la mañana parecía normal, cambió por la tarde.

«¿Nos vemos a fuera de mi facultad?»

«Lo siento, hoy no podré.»

El receptor del mensaje hizo una mueca con sus labios, eso era extraño en su pareja.

Solían estar juntos pasará lo que pasará, caminado fuera de la cafetería donde se encontraba, se alejó a un lugar más solitario.

«¿Porqué? ¿Pasó algo?»

«No tienes por qué preocuparte.»

Fue lo que recibió y de forma automática hizo lo contrario, se preocupó.

«¿Puedo marcarte?»

Le pareció eterno el momento donde apareció el leído y su pareja no contestaba.

«Siempre»

Recibió minutos después y lo hizo.

"¿Estás bien?" fue lo primero que dijo cuando el contrario respondió.

"Sí" escuchó como del otro lado su pareja jadeaba con dolor.

"No te escuchas bien ¿seguro que sí?"

"La verdad no. No me encuentro bien." chilló y se escuchó los rechinidos de la cama.

"¿Quieres que vaya a tu casa?"

"Joder, te necesito tanto en este momento, pero no quiero que vengas." un sonido extraño –húmedo, más bien–, llegó a los oídos del receptor; pero no le prestó importancia.

"¿Por qué no? Estoy seguro que tus padres no están, si tanto me necesitas puedo cuidarte."

"Si vienes, te voy a follar con locura." el receptor empezó a escuchar jadeos y gemidos de parte de su pareja.

Se estaba masturbando escuchando su voz y el pene del receptor, empezó a endurecerse a mitad del solitario lugar.

"No me molestaría, Junkyu."