Capitulo 0: Deberias Rendirte (Parte 1)

257 19 6
                                    

Han pasado aproximadamente poco más de 4 años desde que el encapuchado se hizo ver por última vez.
Ahora nos centramos en dos niños, uno con el cabello verde y otro rubio, ambos iban con otros dos niños por el bosque jugando a los héroes tranquilamente. Hace poco Bakugo había descubierto su quirk el cual le permitía generar explosiones mediante su sudor, este estaba más que contento, en especial cuando comenzó a recibir halagos de todos los adultos.
En este momento los niños cruzaron por un pequeño río el cual estaba un poco más abajo, cuando se acercaron Bakugo tropezó con una Roca y calló al agua, en ese momento Midoriya bajo para ayudarlo, lastimando un pocos sus rodillas.

- ¿Estas bien Bakugo?-. Pregunto el peli verde.

- Si, solo me golpeé un poco el brazo -. Dijo mientras sobaba su brazo izquierdo. Cuando intento levantarse vio que su pie estaba atorado.
- Genial, lo que faltaba-. Dijo molesto.

- Bien, entonces toma mi mano, te ayudaré a salir. Sujetate fuerte-. Dijo Izuku mientras extendía su mano. En ese momento Bakugo agarró su mano.
- Bien a las tres -. Dijo el pequeño brócoli.

- ¡1, 2, 3!-. Dijieron al mismo tiempo los dos niños. Izuku utilizaba sus dos manos para levantar a Bakugo y este se agarraba lo más fuerte que podía. Midoriya tiró hasta que Bakugo logró estar perfectamente de pie y salir del agua.

- Gracias-. Dijo Bakugo algo cansado por hacer fuerza.

- De nada, para eso son los amigos ¿cierto?-. Dijo sonriendo. Un "Ja" fuera salió de la boca de Bakugo mientras extendía su puño, el peli verde lo vio un segundo y comprendió, extendió su puño y lo choco con el del rubio.

Luego del pequeño incidente los niños regresaron a sus hogares, Bakugo se fue con Midoriya, ya que le dijo a su madre que iba a estar con el. Lo que no sabía ambos era lo tardé que se había hecho. Cuando llegaron a la casa de Midoriya estban los padres de este último y los padres de Bakugo. Se sorprendieron al ver que ambos estaban lastimados.

- ¡¿Que demonios te pasó?!-. Gritó Mitsuki enojada con los ojos blancos mientras agarraba a Katsuki del cuello de la remera.

- Espera Mitsuki, cálmate un poco-. Solto Masaru tratando de tranquilizar a su esposa.
- Esta lastimado, tenemos que limpiarle las heridas y vendar su brazo. ¿Tienes un botiquín Hisashi?-. Dijo mientras sostenía el brazo del pequeño rubio.

- Si tengo uno, ya lo traigo. Inko revisa si Izuku no tiene más heridas -. Dijo mientras iba al baño para sacar el botiquín.

- Si-. Dijo tranquila la peli verde.

-Bien, digan que pasó, y quiero una buena explicación-. Dijo Mitsuki enojada.

Al ver la cara de enojo los niños trataron saliva y procedieron a contar lo que sucedió.
La rubia quería darle un sape a su hijo por su torpeza pero se tranquilizó, además sabía que no era momento. Hisashi había vuelto con el botiquín para desinfectar y vendar a los niños, este escucho la historia desde el baño.

- Bien, ahora los están como "nuevos"-. Dijo Inko después de vendar las rodillas de Izuku y el brazo de Bakugo.

- Bueno Inko, nos vamos, lamentamos las molestias-. Dijo la rubia a su amiga.

- No hay problema-. Devolvió mientras agitaba los brazos en señal de negación.

- Igualmente gracias, ¡tu, di algo!-. Dijo la rubia al rubio menor.

- Si, gracias, lamento las molestias-. Dijo el niño con los ojos en blancos.

A los Midoriyas y a Masaru solo les cayó un gota al estilo anime. Luego la familia del pequeño musulmán se fue.

El Libro del Heroe: La 3ra es la vencida Donde viven las historias. Descúbrelo ahora