『 Querido Hermano 』

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«Hermano, yo... quería disculparme, rompí la promesa que me hice y no pude protegerte, espero que puedas algun día puedas perdonarme y nos volvamos a encontrar en la próxima vida, Genya»

 quería disculparme, rompí la promesa que me hice y no pude protegerte, espero que puedas algun día puedas perdonarme y nos volvamos a encontrar en la próxima vida, Genya»

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La batalla final contra los demonios había finalizado y la organización de caza demonios había terminado victoriosa.

La paz con la que tanto habían soñado por generación tras generación por fin estaba presente.

La muerte de todos sus compañeros en batalla al fin había sido vengada, las noches eran tranquilas y las personas ya no tenían que preocuparse por ir a exterminar demonios o proteger a otros civiles de estos.

Ya no habría mas muertes ni asesinatos ocasionados por ellos.

Muzan Kibutsuji había sido derrotado...

Esa mañana, los cazadores sobrevivientes llenaron de alegría sus corazones y dejaron que las lagrimas de felicidad desbordaran de sus ojos, la primera semana el ambiente era sumamente tranquilo, ciertamente fue un gran cambio para toda la organización sabiendo que iban a  misiones casi a diario.

Giyuu y Sanemi, ellos eran los últimos dos pilares que sobrevivieron a la batalla de la fortaleza infinita.

Ambos agradecían infinitamente a sus compañeros pilares por haber dado hasta lo ultimo de ellos esa noche, si no fuera por ellos, seguramente en este momento ellos tampoco se encontrarían allí.

Tres meses transcurrieron...

La familia Ubuyashiki convoco a la ultima reunión como pilares antes de que la organización se dispersara, y aunque esta nunca fue reconocida por el gobierno, no les fue importante, proteger siempre seria lo primordial.

Esa ocasión tanto Kiriya Ubuyashiki, el ultimo jefe de la organización, como sus dos hermanas se inclinaron ante ellos representando todo el agradecimiento que tenía su clan por su esfuerzo. Ambos se negaron a esto, no era necesario, todo había sido un trabajo en conjunto, hasta el mas mínimo detalle fue importante.

Tomioka Giyuu Sonrió, expresando la felicidad que había ocultado por años, a lo que Sanemi hizo igual, no podían estar mas felices que esto.

Un mundo sin demonios, un mundo sin come humanos, un mundo con noches tranquilas, un mundo un poco mas tranquilo...

Pero... 

¿Por qué Sanemi se sentía tan incompleto aun? 

¿Por qué sentía que algo faltaba? 

¿Qué era lo que estaba ausente?....

Esa tarde, el joven albino se dirigió a la finca de las Mariposas, lugar donde se encontraba las personas en recuperación.

La mansión se había encontrado en constante movimiento a pesar de que Shinobu ya no se encontrara en ese lugar. Las visitas entraban y salían diariamente, por consecuencia, la enfermería era el lugar mas aglomerado de la zona, todos los días había un grupo de herreros que visitaba a cierto chico pelirrojo.

『 𝐐𝐔𝐄𝐑𝐈𝐃𝐎 𝐇𝐄𝐑𝐌𝐀𝐍𝐎 | KNY 』Donde viven las historias. Descúbrelo ahora