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Taehyung trabajaba en una linda cafetería, la paga no era mucha pero sin duda era un gran apoyo para sus padres que trabajaban todo el turno de la noche, su madre era ayudante en enfermería y su padre el guardia de seguridad de una empresa respetable. 

Sonrió con alegría a cada uno de los clientes que iban ingresando, pero su sonrisa tembló al encontrarse con un par de ojos sobre su vestimenta, la cafetería en realidad era como una fiesta de disfraces a diario. 

—lindo atuendo— susurró yoongi cerca su oído. 

Taehyung estaba a punto de patearlo lejos pero se detuvo al recordar que estaba en horario de trabajo, suspiró y le dedicó una sonrisa exagerada que asustó al alfa. 

—tu sonrisa da miedo— respondió—mejor sonríe así—habló el alfa levantando con sus fríos dedos las comisuras de los labios del omega. 

El moreno lo observó en silencio, sin creer lo que había hecho antes de aclarar su garganta y tomar el pedido del alfa.

Últimamente yoongi solía venir a verlo trabajar a diario y lo acompañaba hasta su parada de bus, siempre tratando de impregnar su sutil aroma a romero con miel. 

Taehyung no iba a aceptarlo pero prefería que el alfa hiciera eso a tener que soportar que otros alfas se le acercaran, era como un repelente de mosquitos pero con un aroma más agradable. 

—¿nos vamos?— preguntó yoongi ofreciendole su mano para que el moreno la tomara, siendo como siempre rechazado. 

—debo dejar este disfraz atrás si quieres puedes irte, no es necesario que me esperes siempre— dijo sin interés, dirigiéndose a los vestidores sin ser consciente que era seguido por el alfa. 

—¿qué, qué haces aquí?—preguntó asustado al sentir unas manos rodear su cintura—deberías salir— desvío la mirada del par de ojos que lo veían con intensidad. 

—hace un momento unos tipos te observaban demasiado—interrumpió el alfa posando uno de sus dedos sobre los labios del moreno—creo que están aquí y no precisamente para beber café. 

Taehyung se sorprendió ante la confesión y se reprendió en silencio ante su evidente falta de percepción. 

—¿que deberíamos hacer?—preguntó taehyung angustiado por la situación. 

—ocultar nuestros aromas hasta que esos tipos se vayan—habló seguro el alfa. 

—no puedo dejar la cafetería a su suerte, soy el encargado— sus palabras quedaron en el olvido al ser retenidas por unos labios que se posaron sobre los suyos, creando así una extraña sensación para el omega. 

—iré yo, no te deshagas de mi aroma— se despidió no sin antes volver a besar rápidamente los labios del moreno, quien lo miraba irse completamente sonrojado. 

Taehyung revisaba su móvil preocupado por la hora, ya era algo tarde y sus hermanos de seguro no habían probado bocado pero estaba aún más preocupado por la ausencia del alfa, pero no se lo haría saber. Intentó tranquilizarse con el aroma de yoongi y hasta cierto punto había funcionado, pasados unos minutos escuchó el cerrojo de la puerta ser abierta. 



Al parecer los hombres planeaban robar un poco de los bocadillos nada grave, así que decidió obsequiarselos y dejar un poco de dinero en la caja para reparar los gastos. 

—si, no eran malos solo querían comer— habló un sonriente yoongi, siendo recibido por un abrazo. 

—¡tonto, me asustaste!— chilló el omega aferrándose a su camisa. 

—¿te preocupaste por mi?—preguntó con esperanzas y un bonito brillo en sus ojos que desaparecieron al ver como taehyung evitaba verlo. 

—cerremos el lugar y vámonos—se alejó como si la piel del alfa quemara —es algo tarde para que tomes un bus— murmuró—dormirás en mi casa— finalizó taehyung deshaciéndose de su disfraz de panecillo frente al mayor. 

—¿dormiré contigo?— preguntó divertido yoongi al ver como el rostro del menor se iba haciendo más pálido por la situación. 

—claro que no— contestó rápidamente el menor esta vez escondido tras una litrera para así cambiarse lejos de los ojos del alfa.

Ingresó nervioso a su hogar siendo seguido por yoongi, temía que sus hermanos despertarán.

palidecio al sintir unas manos sujetar su cintura—no te aproveches alfa mañoso— golpeó las manos que rodeaban su cintura. 

Yoongi rió nervioso bajando la vista—lo siento. 

Taehyung rodó los ojos, decidió no prestarle mucha atención y dirigirse a la cocina sorprendiendose al encontrar un posillo de comida, lloró internamente al probarlo, sus hermanitos habían preparado su primer platillo. 

—¿que haces?—preguntó yoongi, quien lo había seguido hasta la cocina. 

Se sorprendió al encontrar al menor con los ojos llorosos. 

—ellos lo hicieron para mi— chilló aún con restos de comida en sus labios. 

Yoongi rió en bajo, antes de acercarse al menor y limpiar la comisura de sus labios. 

—lo siento, tenias restos de comida—se excusó al ver la mirada perdida del moreno.

El mayor se regaño mentalmente al recordar que con anterioridad ya había besado al omega sin su consentimiento, se supone que haría las cosas bien.

Tras una reverencia de disculpas se dirigió a la puerta con intenciones de irse, pero un agarre en su camisa lo detuvo. 

—no seas tonto, no puedes irte a esta hora— suspiró taehyung, llevándose consigo al mayor—dormiremos juntos ¿eso esta bien para ti?—preguntó mientras arrastraba a un sonriente yoongi.

¿Dormir en la misma habitación que sus hermanitos era igual que dormir juntos verdad? entonces ¿porque ese bobo alfa lucia decepcionado? se preguntó taehyung sintiendo los ojos pesados y abrazando a la masa caliente que repentinamente estaba a su lado.

—buenas noches taehyungie—murmuró bajito yoongi feliz por su gran idea de acercarse sigilosamente al menor.



















volvi! disfruten el capitulo

feel special | yoontae Donde viven las historias. Descúbrelo ahora