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Auron:

—¿Un beso?—Pregunte sorprendido ¿Acaso escuche bien? Reborn quiere un beso mío

Comencé a comer el sándwich para no levantar sospechas de que quería sonreír de la felicidad que me causo oír eso. Yo sabía que le gustaba, ya era hora de que lo admitiera

—Si, un beso. ¿O no sabes que es? Podría enseñarte—Dijo el muy descarado pasando la lengua por su labio inferior. Lo estaba haciendo a propósito porque sabía que mi cara comenzaría a arder

Lo detesto, y sin embargo, lo único que deseo ahora es sentir sus manos sobre mi piel, su boca sobre la mía... Enseñándome todo lo que el quisiera. Pero no se lo iba a dejar tan fácil

—No puede tratarme a tu antojo, Reb—Apoyé mis codos sobre la mesa alta, mirando su cara de confusión, no se esperaba para nada esto, tampoco yo me esperaba esto de mí

—Se que estuve mal en algunas cos...

—Estuviste mal en todo—Me apresuré a echárselo en cara. Sus manos se volvieron puños y mantenía la mandíbula apretada. Lo odio, odio que no pueda soportar que le digan las cosas que ha echo mal. Pero esto puede cambiar ¿Cierto? Yo puedo hacer que cambie... ¿Cierto?

—¿Me vas a dar el beso o seguirás diciéndome todo lo que he echo mal?—Su voz me irrita y no soporto cuando se pone así de idiota

—Te daría un beso—Ladeo la cabeza haciéndome el pensativo—Pero con una condición

Reborn soltó un suspiro

—¿Qué sería eso?

—Pasar un día juntos—Sonreí emocionado—. Haremos cosas que que me gusten a mi, y luego cosas que te gusten a ti

—¿Y todo eso por un simple beso? No gracias—Hizo un ademan de irse de la cocina pero hable sin pensar

—¡N-No solo será un beso!

—¿Ah, no? ¿Qué más será?—Su lengua volvió a mojar sus labios con lentitud. Trague saliva, nervioso ¿Por qué dije eso? No estaba preparado para  hace algo más, si darle un beso a alguien me daba vergüenza no me puedo imaginar hacer... Lo otro

—S-Soló dejemos que las cosas fluyan—Murmure mirando mis pies en el aire, ya que la silla era muy alta y yo no alcanzaba a tocar el suelo. Me atreví a mirarlo cuando noté que no había dicho nada más, a veces Reborn podía llegar a confundirme más de lo normal. Sus cambios de humor son tan rápidos que pueden llegar a asustarme, él me asusta y no se si debería temer el estar a solas con él

—Bien, acepto. Pero con una condición, no te me acerques en la escuela. Nos vemos a la salida al lado de la tienda de música—Su actitud es una mierda, sin embargo, me hace feliz que que aceptara mi invitación

—Si, seguro—Sonreí feliz sacudiendo mi mano en forma de saludo. Reborn rodo los ojos y salió de la cocina, me gustaba cuando fingía que no me soportaba, porque si no lo hiciera no hubiera aceptado mi invitación

La cocina quedo en silencio, y yo no paraba de sonreír, bajé con cuidado de la silla alta y coloqué todo aquello que había usado para el sándwich en el fregadero, limpie todo con cuidado y acomode las cosas en su respectivo lugar. Mi madre siempre me decía que nosotros mismos deberíamos limpiar lo que usamos, lo hacia desde niño y lo hare siempre

—Auron...—La voz de Claudia me sacó de mis pensamientos, sequé mis manos prestando atención—¿Qué te e dicho sobre lavar los platos? No tienes que hacerlo, deja que yo me encargue—Es tan amable, tan linda y tan dulce, nada que ver con su hijo

Yo negué con la cabeza

—Lo que uso, lo limpio, así de simple Claudia—Le sonreí tímido. Ella me miro con ternura y colocó su mano en mi pómulo, acariciando mis mejillas con su yema

—Es tarde ¿Por qué no vas a la cama?—Sus ojos brillaban, y se le notaba cansada, era obvio que le dolía pelearse con su hijo

—Pero... ¿Esta bien? Podríamos compartir un zumito su quiere...

—Te lo agradezco cielo, pero estoy bien, esperare a tu padre en la sala. Ve a dormir ¿Si?

—Bueno—Solté un bufido rendido. Papá es muy bueno escuchando a los demás y estaba seguro de que la ayudaría con uno de sus consejos—Buenas noches Claudia

—Que descanses, Auron











Apenas pise la escuela Perxas comenzó a gritar mi nombre y sacudió sus manos en forma de saludo, todos lo miraban de una forma un tanto rara. Sonreí, nunca creí que haría amigos tan rápido en una nueva escuela, siempre se me hacia difícil acercarme a hablar con una persona que no conocía, pero con ellos era diferente, fueron ellos quienes se acercaron a mi y se interesaron en conocerme

—Jaume deja de avergonzarnos—Murmuro Mara en broma, Perxitaa cubrió la boca de la teñida y ella le mordió la mano

—¡Ah! ¡Mi mano!

—No es para tanto—Rodo los ojos y me miro con una sonrisa radiante. Mara es hermosa, y Dess debe de ser la envidia de todos los chicos que desean besarla, o chicas ¿Por qué no?

—¡¿Qué no es para tanto?! ¡Mira esta línea de marcas de dientes!—Perxitaa nos enseño la palma de su mano, tan extra como siempre, había rastros de saliva en esta, todos comenzamos a reír 

—¿Cómo va todo, Auron?—Habló por primera vez Dess, quien rodeaba a Mara con su brazo, ella tomo su mano y la entrelazaron, se veían muy bien juntos

—Oh, hubo un pequeño problema en casa ayer... Reborn puede llegar a ser un poco agresivo con su madre—Susurré lo ultimo, todos prestaron atención, cerrando más el circulo

—Ese Reborn es un idiota

—Yo creo que tiene problemas serios, chicos...—Rasque mi cuello nervioso, dudando en si contarlo o no

—¿Problemas de ira?—Pregunto Focus, todas las miradas se posaron en él, Perxitaa negó

—Conozco a Reb, no pueden ser problemas de ira, más bien...

—¿Algo respecto a su personalidad?

—Tal vez, no lo sé—Dijo Mara pensativa—. A veces él se comporta de lo más normal y otras...—Dejo de hablar cuando notó que Reborn entro a la escuela, todos giramos a verlo disimuladamente, bueno, todos menos Perxitaa

Reborn no dijo ni una palabra y solo entro al salón de clases. Lo que faltaba, que piense que nosotros nos pusimos en su contra por la pelea que tuvo con Perxitaa

—¿Habrá escuchado lo que hablábamos?

—No creo, llevaba auriculares

—¿Dónde mierda le viste auriculares?—Le pregunto Mara a Perxas

—Era solo un comentario para convencerlos de que no escucho nada

—Idiota. Vámonos a clase, tengo examen de filosofía y no recuerdo ni mi nombre—Todos reímos por el comentario de Mara, y ella solo hizo una mueca, estaba hablando en serio

—Nos vemos en el receso chicos—Me despedí de ellos y me dirigí a mi salón de clases. No podía esperar a ver a Reborn, y que un bonito día conmigo

Estoy seguro de que lo disfrutara

I hate you; RebornplayDonde viven las historias. Descúbrelo ahora