Porque Me Enamoré De Ti - Fanfic The Last Of Us [EDITANDO]

FURTIVOS

Habíamos avanzado tranquilamente los últimos kilometros de la ciudad. Los enemigos no se mostraban en el horizonte. El único sonido que había era el del viento. Joel detuvo el paso.

Jo: Si queremos llegar al norte debemos pasar por este lugar —dijo al ver el metro.

Señaló el lugar. El lugar estaba deteriorado, destruido. Además, había un hedor al que, cualquiera de nosotros, reaccionaría con un vomito en el suelo.

Jo: Nos llevará a las afueras de la ciudad.

J: Sí, reconozco la ruta —mencioné —. Aunque he usado otra, es la más fácil para ello.

E: Debes conocer esta zona mejor que nadie, ¿qué eres? ¿Un mapa humano?

J: Sí, lo soy.

Seguimos bajando por los edificios. Llegamos a una zona relativamente segura, un apartamento abandonado. Joel aprovechó y buscó provisiones, yo hice lo mismo, guardando todo lo necesario en la mochila. Al haber allanado por completo el lugar. Ellie se sentó en el sillón desgastado. Miré un momento por las ventanas amuralladas de madera. Había gente en nuestro camino

J: No estamos solos.

E: ¿Qué ocurre? —Preguntó ella e inmeditamente se dirigió a la ventana.

J: Son Furtivos... mis muñecos de tiro favoritos.

Joel salió de una habitación. Nos movilizamos fuera del lugar. Pasando por los pasillos decorados con colores pasteles y pisos de ladrillo, llegamos a las escaleras metálicas. En ellas yacía un cadaver. Este traía consigo un rifle de precisión Remington 700 con la culata desgastada. Él lo tomó y se lo largó a la joven a mi lado.

Jo: Toma, niña.

E: ¿Qué esperas que hagamos con esto? —Preguntó un poco confundida.

Jo: Cubranme mientras despejo el area.

El anciano comenzó a bajar por las escaleras metálicas. Ellie y yo adoptamos posición de tiro en la baranda. Ajusté la mira telescopica, las lineas negras se dibujaban en ella, la distancia me mostraba a dónde era necesario disparar. No había viento, la bala iría recto.

E: He manejado un rifle antes... aunque era de balines y le disparaba a las ratas.

J: Siempre hay una primera vez para todo —disparé a la cabeza, la sangre salió disparada —. Te acostumbras.

Ella suspiró.

E: Quisiera estar muerta, así todo se hubiera solucionado.

J: Si quieres, no sé, ¿te disparo?

E: ¿Te parece buena una broma en este momento?

J: A todo esto, es muy raro. ¿Por qué dices que quieres estar muerta? ¿No tienes familia o amigos en alguna parte?

Tal vez, había tocado una fibra delicada. Aunque era necesaria. Ella hizo una pausa, entonces suspiró y se dignó a responder. Yo era quien disparaba, Ellie no podía concentrar su mira. Parecía no querer disparar a los enemigos.

E: Todos muertos, ¿qué tal contigo?

J: Perdí a mi último familiar hace un año, lo mordieron. Compañeros, ¿quién los necesita? Están muertos, perdidos, desaparecidos, me importa poco.

E: ¿Qué eres un robot? Señor bip bup bip bup bap, ¡daño en el cerebro! ¡Vamos a morir todos!

J: No lo sé —murmuré.

Fui quien apoyó a Joel en su trabajo por despejar la zona. Cuando bajamos nos recibió tranquilamente.

E: ¿Qué tal lo hice?

Jo: No estás preparada —le quitó el rifle de las manos, como si supiese que no disparó —. Buen trabajo, niño. Me gusta contar con tus habilidades.

J: Vale.

E: ¿Ni un maldito «gracias»? —Susurró.

«No hiciste nada para que se sintiese agradecido por ello», pensé. Avanzamos por la despejadas calles hasta dar con nuestra meta. El túnel apagado del sistema ferroviario de la ciudad. No me agradaba lo que podríamos encontrar allí.

Jo: Llegamos al metro —informó —. Bajemos.

Al adentrarnos llevé la mano a la mochila en mi espalda. El lugar estaba lleno de la monstruosidad que se llevaba a las personas con solo olfatear.

J: Mierda, esporas. Ponganse las mascaras.

Jo: Hay que moverse. Con cuidado, este lugar es inestable.

Joel colocó sobre su rostro la protección al igual que yo. Ellie era la única que se mantenía sin una mientras caminabamos por el oscuro lugar.

J: ¿Cómo demonios respiras con estas cosas? —Pregunté a la pelirroja.

E: Huele a fresas, no... a margaritas. Tal vez, a mantequilla de maní... ¡Oh, ya sé! ¡A chocolate!

J: No es gracioso.

Encontramos soldados al salir del túnel. Se hizo un breve tiroteo el cual no es importante mencionar. Al finalizar, con los enemigos caidos, habíamos llegados a las afueras de la ciudad.

E: ¿Hacia dónde, Joel?

Jo: Seguiremos la vía, llegaremos muy pronto.