¿Qué demonios somos? - Thiam [Traducción]

07. Unknown scheme

En algún momento entre Theo despotricando contra la economía y la despotricación de Liam sobre la inutilidad de la biología –que además había dado lugar a la indignación de Theo– se habían dormido. Theo en el lado derecho, con la mano derecha debajo de su cabeza y la izquierda debajo de su estómago, y Liam después, con la mano izquierda debajo de la almohada y la derecha a lo largo del lado.

Cuando Theo se despertó a la primera luz del amanecer, increíblemente descansado después de una noche absolutamente descargada de malos sueños (probablemente gracias a su llamado "atrapa-sueños) descubrió que ya no estaba en la posición en la que recordaba haberse dormido. Ahora estaba boca arriba, la mano izquierda apoyada sobre el pecho y la derecha estirada, aparentemente dormida, viendo el hormigueo que sentía. Y hablando de hormigueo, algo le hizo cosquillas gratamente en la barbilla, y fue esa extraña sensación la que lo hizo abrir lentamente los ojos.

Se dio cuenta de que el hormigueo en su brazo era causado por el enorme peso que pesaba sobre él, peso que era solo el cuerpo de Liam. Liam que se había acurrucado contra él, una expresión tranquila en su rostro, se encorvó entre su hombro izquierdo y el hueco de su cuello, el suave cabello que acariciaba su barbilla.

Theo se endureció por un momento ante el sentimiento de Liam en su contra, luego trató de liberar su pobre y maltratado brazo. Liam no estaba contento de eso. Se quejaba de algo incomprensible, aún evidentemente dormido, y se acercó todavía más a Theo, si es que eso era posible, colocando su brazo izquierdo alrededor de su cintura y deslizando una pierna entre la suya.

Theo soltó un aliento tembloroso, inclinando ligeramente la cabeza para poder mirar a Liam. Quería en ese momento molestarlo como lo había hecho la mañana anterior, burlarse de él y burlarse de la posición en la que se habían visto atrapados, pero no podía hacer ninguna de estas cosas. Solo logró quedarse quieto y verlo dormir, tratando de ignorar el calor que sintió moviéndose en su pecho al verlo, y la inmensa sensación de paz y familiaridad que sentía.

—Mmh —murmuró Liam cuando Theo intentó moverse en una posición más cómoda, e inclinó ligeramente la cabeza y un mechón de pelo cayó frente a sus ojos. Theo sonrió y de inmediato su mano derecha se elevó con cautela. Entonces, con una ligera caricia llevó el mechón rebelde de Liam de vuelta a su lugar.

Liam respiró hondo, su aliento acariciando ligeramente la sensible piel del cuello de Theo, dándole un escalofrío por todo su cuerpo, y obligándolo a suprimir ese deseo incontrolable de poner sus labios en los ahora medio abiertos de Liam

"¡¿Qué diablos le estaba pasando?!" Pensó, quitando su mano tan rápido como si se hubiera quemado, girando la cabeza hacia arriba para evitar mirar a Liam, concentrándose más bien en el techo. Luego se volvió hacia la mesa de noche donde la alarma se mostró en ese momento a las 7.00 con un agudo pitido. Ya casi era hora de desayunar, pronto tendrían que salir al colegio, pronto Liam se despertaría y se daría cuenta de que estaban pegados como dos mejillones, y la madre de Liam pronto se acercaría a llamarlos y... joder.

La puerta de la habitación se abrió con un golpe, y la madre de Liam apareció molesta en la puerta.

—Theo, ¿dónde está Liam? —Ella lloró de pánico. En el momento en que terminó de hablar, su rostro cambió en una expresión sorprendida, y Liam abrió los ojos de repente. En tres segundos, abrió los ojos, miró a Theo, miró a su madre, chilló y, con su rostro de un color rojo tomate, empujó a Theo fuera de la cama con una patada en sus costillas.

—¡Liam! —su madre lo regañó—. ¿Así es como tratas a un invitado!

Theo lo miró desde el suelo.

—Sí, Liam, ¿dónde está tu cabeza?

La Sra. Geyer puso los ojos en blanco y se giró para irse.

—Es la hora del desayuno de todos modos...adolescentes, bah.