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Lily Potter partió de la oficina del director y se dirigió a Valle de Godric, rentaba la casa frente a la de James. Entró por la chimenea a la sala y la esperaba un hombre sentado, este tenia el caballo en rulos color castaño.

-¿Cuándo llegaste?- preguntó Lily.

-Esta mañana, ¿Dónde estabas?- preguntó el hombre.

-En Hogwarts, Aylin, Harry y Severus saben la verdad- dijo la mujer dejándose caer en el sillón a un costado del hombre.

-¿Aylin lo sabe?- cuestionó.

-Tuve un enfrentamiento con Harry anoche, no esperaba verlo, pero... el chico es astuto- dijo Lily con un suspiro.

-¿Saben toda la verdad?- cuestionó el hombre.

-No Alex, solo saben que no tienen relación sanguínea con James y que su verdadero padre es Severus- dijo Lily con un suspiro.

-¿Cuándo dirás la verdad completa?- cuestionó el hombre.

-Eso no les compete a ellos, fue algo entre James y yo- dijo la mujer de manera rotunda.

Ambos amigos se quedaron callados.

-¡Canuto! ¡Ven para acá!- se escuchó un grito de afuera.

Lily arrugó la frente.

-¿Canuto?- cuestionó en susurro.

Se dirigió a la puerta principal y la abrió de golpe, un hombre de ojos ámbar y un perro la voltearon a ver, el perro empezó a ladrar desesperado, el hombre se puso pálido.

-Esa voz- escuchó Lily que su amigo susurró.

Alex se posicionó detrás de la mujer asomándose hacia la calle.

-¿Alex?- cuestionó el hombre de la calle casi sin aire.

-Remus- susurró el hombre poniéndose pálido de pronto.

Lily miró a su amigo.

-¿Lo conoces?- cuestionó la pelirroja.

-No se si para bien o para mal, pero si, lo conozco- dijo Alex hacia su amiga.

El perro seguía ladrando desesperado, Lily miró la casa en ruinas.

-Venir no lo devolverá a la vida- dijo Lily secamente- Le pido que calle a su perro- dijo de forma dura, les dio la espalda y entró al interior.

El perro corrió y sin aviso entró a la casa, Remus lo siguió.

-Pasa, hay que hablar- susurró Alex sin verlo.

Una vez todos en el interior de la casa, Alex cerró la puerta. Las tres personas vieron como el perro se transformaba en un humano.

Alex se sentó a un costado de su amiga.

Los dos hombres restantes y la mujer se miraban sin decir palabra alguna.

-Verse en silencio no responderá nada- dijo Alex varios minutos después, miró al de ojos ámbar y después a su amiga- Me voy a recostar- avisó.

Se puso de pie y caminó hacia el pasillo, no pudo avanzar mucho porque fue retenido.

-Espera- dijo Remus tomándolo de la muñeca.

-Esperar nada, no quiero saber nada, y menos de ti- dijo el hombre de rulos con desprecio.

-Por favor, déjame hablar- dijo Remus desesperado.

-Con solo verte todas las dudas se disiparon, suéltame porque no respondo- amenazó el de rulos.

La chimenea se activó y entró otro hombre.

Descubriendo La Verdad.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora