Mi primer amor

Cap 13

Narra __

Pensé un momento la oferta y acepte, necesitaba despejarme. Ignazio salió y yo comencé a alistarme, me puse un bikini azul con puntos amarillos y me até mi cabello en un moño alto, ignoraría a Gianluca todo el día. Bajé y los 3 chicos esperaban en el auto

Narra Gianluca:

Con los chicos decidimos ir a la playa, entramos al auto y el chofer no avanzaba

-Por qué no avanzamos?-dije mientras me acomodaba en mi asiento

-Falta una persona-dijo Piero indiferente

-A quién invitamos?- dije mientras notaba que la puerta de la casa se cerraba y salía una arreglada __-no!!-dije

-Cálmate Gian, ayer te pasaste y ella necesita despejarse aunque te trate mal tu no lo hagas solo por hoy si?-Dijo Ignazio ya enterado de todo

-Okay-bufe y me puse mis audífonos

-Hola-Dijo una alegre __ que entraba al auto

-Hola linda-respondieron mis compañeros pero yo me limité a hacerle un gesto con mi cabeza que ella simplemente ignoró.

El auto era conducido por Ignazio, este hablaba muy animadamente con Piero pero yo solo miraba por la ventana, por otro lado __ también participaba de su charla pero de vez en cuando me miraba de reojo, decidí seguir su juego ya que estaba aburrido y era un camino largo. Ella me miraba asesinamente y yo la miraba neutral. Me miraba, la miraba, ella también se había dado cuenta del juego y lo seguía confundida, me distraje por unos segundos y me atrase al mirarla entonces fue cuando nuestras miradas se cruzaron, ninguno se atrevía a apartar sus ojos, en la mirada de ella pude ver recelo y enojo al principio pero poco a poco se fue ablandando y una sonrisa se formaba en rostro.

Narra __

Después de estar mirando un rato a Gianluca, el comenzó a mirarme, nos mirábamos directamente, me aburrí del juego y gire de golpe para mirarlo feo y así terminar todo pero cuando giré el giró y nuestras miradas se cruzaron, ninguno se apartaba, mi mirada era fría y enojada, su mirada era neutral pero en el fondo podía ver arrepentimiento, eso me conmovió, nada me conmueve pero eso lo hizo, ablandé mi mirada y comencé a sonreír, el me miro confundido y luego me correspondió la sonrisa, su mirada pedía disculpas y yo las acepté. El momento era único. Era como si solo existiésemos los 2 y nadie más. Ya habíamos llegado y Piero e Ignazio miraban la escena divertidos y atónitos. Piero golpeó el vidrio del auto ocasionando que Gianluca y yo nos tensemos y salgamos de ese trance tan lindo.